American Apparel entra en bancarrota

El pasado mes de agosto American Apparel avisó de que no contaba con recursos suficientes para operar un año más. Ahora, según informa The New York Times, el gigante textil estadounidense entrará en concurso de acreedores tal y como ha anunciado hace unas horas la compañía. Los motivos que han llevado a la marca a esta situación parece que tienen mucho que ver con los conflictos judiciales y escándalos sexuales de su fundador, Dov Charnet, además de con una caída continuada de las ventas (un 17% menos en el segundo semestre en comparación con el año pasado).

Desde mediados de 2014, cuando Charney –encarnación de la hipersexualización de la moda– fue despedido tras múltiples escándalos de supuestos abusos, Paula Schneider ocupa el puesto de consejera delegada de la compañía. Según ha expresado Scheneider, American Apparel necesita una reestructuración para hacer frente a la deuda de 300 millones de dólares que acumula. “Esta reestructuración permitirá a American Apparel convertirse en una empresa más fuerte y vibrante”, ha explicado en un comunicado. “Mejorando nuestra situación financiera, podremos centrarnos en la ejecución de la reestructuración de nuestro negocio mientras creamos productos nuevos y relevantes, lanzamos nuevas iniciativas de diseño y merchandising, invertimos en nuevas tiendas, hacemos creer nuestra shop online o creamos cautivadoras campañas de marketing que nos ayuden a impulsar nuestro negocio hacia adelante”, ha añadido.

Al parecer, la puesta en marcha de un plan de reestructuración a lo largo de los próximos seis meses conseguirá reducir su endeudamiento hasta 135 millones de dólares y no afectará a su estructura de producción en Estados Unidos ni tampoco a su red de tiendas en todo el mundo (unas 230) o a los empledos que trabajan en ellas.

Puedes leer la noticia completa en The New York Times.