9 fotosVenice Beach y otros 8 destinos inesperados donde no puedes hacer toplesA pesar de la reciente liberación del toples femenino, son muchos los lugares públicos en los que quitarse la parte de arriba sigue estando prohibidoMaría López Villodres18 ago 2019 - 01:59CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceVenice Beach (Los Ángeles, California). Es una de la playas más famosas y concurridas del mundo, con un paseo marítimo muy variopinto en el que conviven artistas, turistas y skaters. Pero a pesar del escenario diverso, la prohibición del toples femenino se mantiene. Con una medida propuesta por el propio consejo de vecinos del barrio, presentada en 2015, Venice espera anularla definitivamente en 2020. El problema se extiende a otros puntos de Los Ángeles y California, pero a pesar de existir la prohibición a nivel estatal, hay ordenanzas locales que regulan específicamente su aceptación. Reivindicando la igualdad a la hora de quitarse la camiseta, cada año desde hace una década, las activistas de GoTopless organizan una marcha por Venice Beach. La de este año será el 25 de agosto, en conmemoración del Día de la Igualdad de la Mujer (que es el 26 de agosto, fecha de la consecución del voto femenino en el país). Para burlar posibles penalizaciones, las activistas dejan el pecho al descubierto pero se tapan los pezones.franckreporter (Getty Images)Malta. A pesar de que Europa está a la cabeza, habiendo convertido el toples en símbolo de libertad sexual con el impulso de las francesas en la Costa Azul -mención especial para Brigitte Bardot-, el toples está en horas bajas en el continente. Del 29% de francesas que aseguraban practicarlo con regularidad en sus playas, la cifra ha disminuido a un 19% en los últimos tres años, según ha revelado un estudio reciente del Instituto Francés de Opinión Pública. Entre los motivos para dejar de hacerlo están el miedo a ser acosadas u observadas y a que las fotografías acaben en internet; lo que demuestra la fuerte carga sexual que sigue teniendo el cuerpo femenino desnudo en el imaginario colectivo. Pero ni las maltesas, ni la cantidad de turistas que acuden a sus costas en busca de sol y playa, pueden siquiera elegir. El país lo considera nudismo y lo prohibe en sus espacios públicos (playas incluidas) con multas severas.Brasil. Bottomless más que toples. En el país que da nombre propio a la braga femenina que deja las nalgas al descubierto, hacer lo mismo con los pechos en la playa es considerado un "acto obsceno" que, previa denuncia por "desorden público", es sancionado bajo criterio de los policías y jueces. Hacer toples en una playa no nudista de Río de Janeiro, por ejemplo, puede acarrear multas económicas y hasta cárcel, con una pena de entre tres meses y un año. Se trata de un ley que no se ha actualizado desde 1940 y contra la que pelean activistas del país, como la periodista Ana Paula Nogueira, que desde 2014 organiza una concentración anual en la playa (toplessaço) en señal de protesta.Tailandia. En el país asiático que si no hemos visitado, conocemos gracias a Instagram, el toples no es costumbre ni está bien visto. Aunque la invasión turística -en 2018 lo visitaron más de 38 millones de viajeros internacionales- impone a menudo sus hábitos pasando por alto los de los locales, es común encontrar la advertencia en guías y webs de viajes de que no se debe dejar el pecho femenino al descubierto, sobre todo en las zonas con más presencia musulmana, al sur del país. En complejos hoteleros y playas privadas la cosa cambia y sí está más normalizada su práctica.Srdjan Pavlovic (Getty Images)Argentina. No hay que remontarse mucho tiempo atrás para dar con casos tan desconcentantes como el que tuvo lugar en 2017 en la playa de Necochea (Buenos Aires). Tres mujeres eran expulsadas por 20 agentes de policía por no llevar puesta la parte superior de su bikini, después de haber sido denunciadas por otros bañistas allí presentes. Los agentes amenzaron con "llevarlas presas" y amparaban sus argumentos en una ley de la provincia de Buenos Aires que data de 1973 y prohibe los "actos contra la moral". "Volveremos otro día y seremos muchas más", anunciaron las tres mujeres. Finalmente, la justicia les dio la razón: el juez las dejó libres de sanción, señaló que la ley es inconstitucional y reclamaba al Parlamento provincial que la modifique. Aunque de momento no hay noticias de los cambios.Sofia Briff / EyeEm (Getty Images/EyeEm)Florida, Estados Unidos. A pesar de las instantáneas coloridas y plagadas de cuerpos escultóricos que regalan la arquitectura y las playas de Miami, la libertad que estas evocan no se corresponde estrictamente con la realidad. Según señalan en el mapa que las activistas estadounidenses de GoTopless han creado en su web para señalar cuál es el grado de permisividad de cada estado con esta práctica, Florida estaría en la zona gris, con leyes ambiguas al respecto. Oficialmente no es legal hacerlo en la mayoría de las playas de Miami, la excepción en cuanto a seguridad toples se da en la zona de South Beach, donde sí se hace con más normalidad. Ojo porque en muchas playas y hoteles son muy rígidos incluso a la hora de permitir la mínima expresión de desnudez, señalan desde la web de consejos para un viaje seguro Trip Savy.Jeffrey Greenberg (Universal Images Group via Getty)Chile. “Cualquiera que ofenda el pudor o las buenas costumbres con hechos de grave escándalo o trascendencia sufrirán la pena de reclusión menor en sus grados mínimo a medio”, recoge el artículo 373 de su código penal. ¿Puede un pecho ofender las buenas costumbres? Aunque la legislación del país no es concisa respecto al toples, la realidad es que en Chile, una mujer que se quite la parte superior de su bikini en la playa puede ser objeto de multa económica. No se hace diferencia entre nudismo y toples y el primero solo se permite oficialmente en Playa Nueva. El colectivo feminista chileno Topless Libre se organiza para protestar en conjunto por distintas playas de su costa reivindicando además el derecho a amamantar en público.Malasia. Seguramente, el monte malasio Kinabalu no es el lugar que te viene a la mente al pensar en lo liberador de hacer un toples. Pero si el éxtasis de la subida te lleva a ello, mejor tener presente que el país lo castiga con dureza: lo hace la justicia y lo señalan los ciudadanos. Le ocurrió a la británica Eleanor Hawkins en 2015, acusada de profanación del lugar sagrado junto a otro grupo de viajeros que se quitó la ropa al alcanzar la cima. Además de los tres meses de cárcel que le impusieron en principio, cuando seis días después la región sufrió un terremoto que le costó la vida a otros 18 viajeros, los habitantes de la zona les acusaron de haberlo causado al enfadar a los dioses con su torso desnudo, contó The Telegraph.Soulmemoria (Getty Images/iStockphoto)China. El caso chino es llamativo porque, lejos de acercarse a la igualdad, se ha vuelto incluso más restrictivo en los últimos años. En 2014 se aprobaba una ley que anulaba el permiso para el toples femenino en la única playa del país en el que este no estaba radicalmente prohibido: Dadong Hai. Y este verano también ha dejado una anécdota al respecto. 'El bikini de Beijing', una práctica realizada por algunos hombres chinos de mediana edad que, ante las altas temperaturas, han remangado tradicionalmente sus camisetas dejando sus barrigas al aire, ha sido ahora prohibida por considerarlos "incivilizados".Olivier CHOUCHANA (Gamma-Rapho via Getty Images)