Vestidos negros, labios rojos, camisas blancas: 25 años sin Carolyn Bessette-Kennedy, la reina del estilo minimalista de los noventa

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Fue un suceso que marcó una época. El 16 de julio de 1999 John F. Kennedy Jr. (de 38 años, apodado John-John); su esposa, Carolyn Bessette-Kennedy (33 años), y la hermana mayor de esta, Lauren Bessette (34 años), perdieron la vida en un accidente de aviación. El abogado, hijo de John Fitzgerald Kennedy y Jacqueline Kennedy, pilotaba la avioneta Piper Saratoga PA 32 monomotor en la que viajaban los tres. Se dirigían a la boda de la prima de John-John, Rory Kennedy (la hija menor de Robert Kennedy), que iba a celebrarse en la exclusiva isla de Martha’s Vineyard (Massachusetts), y acabó siendo suspendida tras el trágico accidente. Bill Clinton, presidente de los Estados Unidos en ese momento, desplegó un gran dispositivo para buscar los cuerpos, que permanecieron hasta el día 22 desaparecidos en el Atlántico; sus restos fueron encontrados a 35 metros de profundidad gracias al uso del sónar de un buque de la Marina. John-John había obtenido su licencia de vuelo un año antes del suceso. En esta imagen, tomada el 21 de julio de ese mismo año, se ven las muestras de afecto espontáneas que la gente fue dejando durante esas jornadas ante el edificio donde estaba el apartamento de la pareja en Nueva York.HENNY RAY ABRAMS (AFP via Getty Images)

Kennedy y Bessette se habían convertido en la pareja modelo de los noventa. Eran guapos, inteligentes y muy estilosos. Se habían casado en una ceremonia íntima el 21 de septiembre de 1996 celebrada en Cumberland Island (Georgia). Solo acudieron 40 invitados y el único fotógrafo que inmortalizó el momento fue Denis Reggie, hermano de la mujer del senador Ted Kennedy, por eso es difícil ver fotografías del vestido minimalista blanco creado por Narciso Rodriguez que eligió Bessette. La novia era muy amiga del diseñador de padres cubanos, habían trabajado juntos en Calvin Klein; ella como publicista y él en el departamento de diseño. Ese modelo satinado de aires lenceros fue un clásico instantáneo y supuso el primer trabajo de Narciso Rodriguez bajo su propio nombre. Un año después, en 1997, creó su propia firma. Bessette y Kennedy nunca dejaron de ser iconos de estilo. En la imagen, la pareja (ella con un vestido de Jean Paul Gaultier) en la cena anual de corresponsales de la Casa Blanca celebrada en mayo de 1999, solo dos meses antes del accidente en el que perdieron la vida.Tyler Mallory (Getty Images)

"Era hermosa y fuerte, irradiaba una especie de luz a su alrededor, pero a la vez era delicada", dice Yuma Euell, una amiga de su familia, al recordar a Carolyn Bessette de niña en 'Once Upon a Time: The Captivating Life of Carolyn Bessette-Kennedy' (Simon and Schuster), la biografía que este año ha publicado la periodista Elizabeth Beller. Carolyn Jeanne Bessette nació el 7 de enero de 1966 en White Plains, Nueva York. Tenía dos hermanas gemelas un año mayores, Lauren y Lisa. Su padre era ebanista y su madre trabajaba como administrativa en el sistema de educación público de Nueva York, y se divorciaron cuando ella era pequeña. La joven estudió en la Universidad de Boston, tuvo algún trabajo ocasional como modelo, pero su carrera profesional estuvo ligada a una firma de moda en concreto: Calvin Klein. Empezó a trabajar para la marca como dependienta en una de sus tiendas y acabó en su área de publicidad y relaciones públicas en el establecimiento central de la enseña en Manhattan. En 1992, con 26 años, la edad en la que fue tomada esta foto, conoció allí a quien se convertiría en su marido.WWD (Penske Media via Getty Images)

John F. Kennedy Jr. y Carolyn Bessette se convirtieron en los 'príncipes de Nueva York'. Él era parte del clan Kennedy, lo más parecido a la realeza que había conocido el país, el heredero del Camelot de su padre, John Fitzgerald Kennedy (político demócrata que fue presidente de Estados Unidos entre 1961 y 1963). Antes de empezar a salir con Bessette, él había mantenido relaciones con personajes conocidos, como la cantante Madonna y las actrices Sarah Jessica Parker y Daryl Hannah. John-John nació en 1960 y vivió toda su infancia bajo los focos. Su padre fue asesinado cuando estaba a punto de cumplir tres años y ese suceso, la 'maldición' ligada al apellido Kennedy, marcó su vida. Había estudiado Historia en la Universidad de Brown, uno de los centros de la prestigiosa Ivy League, y trabajó como abogado y editor de la revista 'George', que en sus páginas combinaba política y estilo de vida.New York Daily News (NY Daily News via Getty Images)

El minimalismo fue el sello de Carolyn Bessette. El diseñador neoyorquino Calvin Klein fue uno de los referentes que popularizaron ese estilo en los años noventa y ella ejemplificó mejor que muchas modelos la sobriedad sofisticada del menos es más. Lo demostraba en sus salidas nocturnas a eventos con su pareja: cortes favorecedores, líneas sencillas, pocos complementos y maquillaje natural. Esta última regla solo la rompía con labiales rojos que solían rematar sus pulidos 'looks' de belleza cuando acudía a una fiesta. En la imagen, la pareja fotografiada en 1998 junto a Caroline Kennedy-Schlossberg (hermana de John F. Jr.) y su marido, el diseñador Edwin Schlossberg, en un evento de la Municipal Art Society en la estación Grand Central de Nueva York en honor de Jacqueline Kennedy Onassis.Sonia Moskowitz (Getty Images)

Bessette podía dar lecciones de cómo lucir de forma impecable un LBD (pequeño vestido negro). Estas prendas abundaban en su armario y eran su comodín a la hora de acudir a los numerosos actos a los que asistía. "Carolyn era una virtuosa del LBD. Por suerte para ella, los diseños de Calvin Klein valían para cualquier ocasión (...) No podía haber existido ningún anuncio mejor para la marca que tener a Carolyn vistiendo uno de sus vestidos 'ready-to-wear' que hacía suyo casi sin accesorios: una chaqueta color crema alrededor de su cuello, o un par de Manolos", escribe Sunita Kumar Nair en su libro 'CBK: Carolyn Bessette Kennedy: A Life in Fashion' (Hachette UK, 2023). En la imagen, delante del diseñador Calvin Klein (a la izquierda en la foto), en un evento de recaudación de fondos en 1992.Penske Media (Penske Media via Getty Images)

La blusa blanca fue otra de las piezas fundamentales en el ropero de la publicista, que sabía cómo llevarlas tanto de manera desenfadada como en actos más formales. Las camisas eran unas prendas recurrentes en sus estilismos desde los años de la universidad, rememora en 'CBK: Carolyn Bessette Kennedy: A Life in Fashion' su compañera de habitación de aquella época, Dana Gallo Strayton, que la recuerda combinando camisas tanto con faldas como con vaqueros o, incluso, pantalones de chándal: "El mar se abría literalmente cuando Carolyn entraba en una sala. Tanto hombres como mujeres se emocionaban al verla, pero siempre intentaba que su belleza no la definiera. Era mucho más que una cara bonita". Sus camisas enfatizaban un estilo unisex y subrayaban la sencillez de sus estilismos. En la imagen viste una de estas prendas en marzo de 1999 en una gala celebrada en el Museo Whitney de Nueva York.Ron Galella (Ron Galella Collection via Getty)

"No me siento cómoda con prendas vistosas. Me gustan los estilismos sencillos y discretos. Me encantan las botas, los vaqueros y las 'blazers", explicaba Bessette en una de las pocas entrevistas que concedió. El texto acompañaba a uno posado de ella, una fotografía en blanco y negro publicada en un número de 1992 de la edición estadounidense de la revista 'Glamour'. En la imagen, vestía una sencilla camisa blanca de manga corta con bolsillos en el pecho metida por dentro de unos vaqueros. Los 'jeans' eran una de sus prendas fetiche: los combinaba con botas o con sandalias de tiras como estas de Prada (en una fotografía de 1996), que fue una de sus marcas de calzado preferidas.Lawrence Schwartzwald (Sygma via Getty Images)

Aunque no hacía alarde de sus complementos, sus bolsos llamaban la atención. No era raro verla paseando a su perro, llamado 'Friday', mientras los 'paparazzi' le sacaban fotos (en la imagen, en Tribeca en 1998), con su Birkin de Hermès lucido con un abrigo y vaqueros. Lawrence Schwartzwald (Lawrence Schwartzwald)

Uno de sus bolsos preferidos fue este de Prada, el 'tote bag' Spazzolato. "Carolyn tenía bolsos, pero no tenía 75 bolsos, no creo que eso existiera entonces, y no puedo imaginármela apuntándose en una lista de espera para un bolso. Este modelo de Prada fue el bolso habitual que llevó durante todo un año", explicó Rosemarie Terenzio, asistente de John F. Kennedy Jr., a 'The New York Post'. En 2012, Terenzio publicó 'Fairy Tale Interrupted: A Memoir of Life, Love, and Lost', un libro en el que recordaba su relación con ambos y abordaba la imagen de 'reina de hielo' con la que muchos medios de los años noventa retrataron a Bessette, tan reticente siempre a hablar en público. "Edward Klein, el autor de varios libros sobre los Kennedy (...) los describió como 'una pareja de los noventa, todo imagen sin sustancia'. La gente no paraba de repetir que Carolyn no era lo suficientemente buena para John. Además de tener que lidiar con las críticas públicas, ella también sintió la presión de tener que ser la cuidadora en la gran vida de John", lamentaba Terenzio.New York Daily News Archive (NY Daily News via Getty Images)

Esa imagen fría y distante con la que Bessette fue retratada en los noventa es algo que ha querido combatir la biografía 'Once Upon a Time: The Captivating Life of Carolyn Bessette-Kennedy'. "Me di cuenta de que quienes la conocieron la describían de una forma muy distinta a como era retratada en los tabloides", escribe Beller en su libro, "¿cómo podía Carolyn, que acompañó a Radziwill a menudo al hospital, ser una 'reina de hielo'? ¿Cómo era posible que una mujer que lo dejaba todo para ayudar a sus amigos cuando estaban mal o para ayudar a un adolescente con problemas en la calle pudiera ser una manipuladora que le gritara a John sin razón?".Penske Media (Penske Media via Getty Images)

En el caso de Bessette, no solo las prendas que llevaba fueron una inspiración y marcaron el estilo de una época; la forma de lucir su melena rubia también influyó en una generación y continúa resonando hoy. En la imagen posa en mayo de 1995 junto a otro icono noventero, Jennifer Aniston. Unos meses antes, en septiembre de 1994, la serie 'Friends' había sido estrenada y la estética de Rachel Green, el personaje de Aniston, era el modelo a seguir para muchas jóvenes, desde el corte de pelo a las prendas que lucía. Muchas de ellas recordaban al armario minimalista de Bessette-Kennedy. Jerseys de cuello alto, vaqueros, blusas, LBD y botas conformaban el uniforme del personaje televisivo del momento.Patrick McMullan (Patrick McMullan via Getty Image)

La melena de Bessette era una de sus señas. Pero muchas veces optaba por recogerla en moños bajos o en colas de caballo para llevar 'looks' más pulidos. La diadema de carey, ancha, sin adornos, fue una de las piezas recurrentes con las que acentuó la pulcritud de sus estilismos capilares. Cuando salía a navegar junto a su marido no olvidaba otro complemento para su cabeza: las bandanas anudadas en forma triangular para recoger su melena.Lawrence Schwartzwald (Sygma via Getty Images)

"Me gustan los colores clásicos. Negro, azul marino, gris y blanco. Si quiero añadir algo de impacto, lo hago a través de las texturas", indicó Bessette en su entrevista de 1992 a 'Glamour'. El beis, en faldas o abrigos camel, era otro de los tonos que solía incorporar a su armario de día. Aunque para los eventos nocturnos el negro era su apuesta segura, en alguna ocasión destacó de blanco, como en la gala Fire & Ice celebrada en los Estudios Universal de Los Ángeles en 1998 a favor de la investigación del cáncer. En esa ocasión eligió un vestido con cremallera delantera de Versace. Aunque su vestido blanco más recordado es el que Narciso Rodriguez diseñó para su boda: fluido, lencero y minimalista, fue el epítome del estilo de la publicista e inspiró a muchas novias después, como a Meghan Markle, que lo tomó como inspiración en su segundo 'look' nupcial, diseñado por Stella McCartney. Penske Media (Penske Media via Getty Images)

Los abrigos fueron una de las prendas fundamentales del armario de Bessette, ya fueran informales o de vestir, como este diseño de Yohji Yamamoto con el que acudió a la entrega de los premios George Newman's Own en 1999. La del japonés era una de sus firmas favoritas, junto a Ann Demuelemeester, Miu Miu y Prada, según Rosemarie Terenzio. Ron Galella (Ron Galella Collection via Getty)

En algunas ocasiones, la publicista también sorprendía con elecciones estilísticas que no seguían la estética minimalista y monocolor que había cultivado a través de sus apariciones públicas. No era habitual ver a Carolyn Bessete luciendo colores estridentes o prendas estampadas, pero hay algunas imágenes que muestran que en su armario también había espacio para elecciones inesperadas, como el vestido de esta imagen de 1996. Se trata de un modelo de Chanel de la época en la que la 'maison' francesa estaba bajo la dirección creativa de Karl Lagerfeld.Lawrence Schwartzwald (Sygma via Getty Images)

"La imagen de Carolyn con un abrigo rojo de Prada, vaqueros azules y un 'beanie' negro agarrada a John, que muestra un fragmento rojo asomando de su bufanda y en su gorro, mientras pasean a su perro 'Friday' es una instantánea monumental de la pareja, su estilo y su vida en Nueva York", escribe Sunita Kumar Nair en 'CBK: Carolyn Bessette Kennedy: A Life in Fashion'. Porque más allá de las imágenes de galas y actos benéficos que mostraban su lado más glamuroso y sofisticado, el de la realeza estadounidense, el verdadero reino de estilo la pareja es el que quedó reflejado en las instantáneas de su día a día, sus paseos por las calles de Manhattan.Evan Agostini (Getty Images)