El milagro Mariah Carey o por qué la fórmula para resucitar canciones la tiene TikTok

Tik Tok no solo viene dispuesta a revolucionar las narrativas en las redes sociales entre los más jóvenes, también sirve como eje e imaginario para campaña contra la violencia de género o como aliado para incentivar la cultura musical. Así lo demuestra The Washington Post, que ha publicado un reportaje en el que asegura que, a pesar de que las canciones que suenan de fondo están limitadas a 15 segundos de escucha, la aplicación «se ha convertido en una aliada de la industria musical».

Así ha pasado, por ejemplo, con Mariah Carey. Fue viralizarse un vídeo de una chica bailando y llorando con Obsessed de fondo (una canción de la artista de 2009) y el fenómeno se propagó como la espuma. Consiguió 2,5 millones de likes y propició nuevas variaciones en otros vídeos, hasta Carey llegó a hacer la suya, que han provocado que el tema entrase directo al número 23 de la lista Billboard. La popular lista cuenta las visualizaciones de YouTube pero no las de Tiktok. El efecto contagio, tal y como desvela en el reportaje Trevor Anderson, director de las listas de R&B en Billboard, viene «porque la gente ve todos estes memes sobre una canción que había olvidado, así que obviamente se van a Spotify o Apple Music para escucharla».

Otra prueba del efecto contagio: que Old Town Road, la canción de Lil Nas X que empezó a prodigarse con montajes con usuarios de TikTok convirtiéndose en vaqueros y cowboys, se haya convertido en el tema con más semanas en el número 1 de Billboard Hot 100.

La publicación también realiza otra lista de grandes éxitos que han reflotado gracias a la aplicación como Your Song de Elton John (utilizada para vídeos en la que se muestra a una persona que encuentra algo divertido pero sus amigos no), Mr. Sandman de The Chordettes para enseñar efectos multiplicados –esté empezó con gatos y en la fórmula ha caído hasta Reese Witherspoon).

El fenómeno del reto Obsessed seguirá repitiéndose en la aplicación, tal y como pasó con Instagram y otros retos virales que han aupado canciones durante un momento determinado. Así fue con In my feelings, la canción que se popularizó con los usuarios grabándose (en algunos casos bajándose) del coche y hasta la DGT tuvo que advertir de lo problemático del asunto.