La Guardia Civil investiga la depuradora de la piscina de Mijas donde murieron un padre y dos de sus hijos

Cuando el equipo de emergencias del 112 recibió una llamada el martes cerca de las dos de la tarde, se extrañó mucho. El aviso indicaba que había tres personas de una misma familia británica fallecidas en una piscina de una urbanización de Mijas (Málaga, 80.630 habitantes). No entendían qué había podido ocurrir para que todas murieran ahogadas a la vez. “Las circunstancias son raras”, decían los especialistas, que habían avisado de manera inmediata a la policía local, los servicios de emergencias (que solo pudieron certificar las tres muertes) y la Guardia Civil. Ahora este cuerpo de seguridad investiga la causa y mantiene abiertas distintas hipótesis.

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Entre ellas, si tiene relación con algún fallo de la depuradora de la piscina, ubicada en el alojamiento de lujo Club La Costa World, muy cerca del término municipal de Fuengirola. La administradora del complejo descarta cualquier negligencia y asegura que la instalación acuática no tiene “ningún problema”.

Entre los agentes de la Guardia Civil que se desplazaron hasta la piscina el martes estaban miembros del equipo del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS). Sus agentes comprobaron los motores de la depuradora de la piscina, así como la posible existencia de restos de ropa de alguno de los fallecidos en el fondo de la misma. También tomaron muestras del agua para analizarla. Su objetivo no es otro que arrojar luz sobre qué pudo pasar para que una niña de 9 años, su hermano de 16 y su padre de 53 murieran ahogados. La estructura tiene dos escaleras de obra para salir, así como otras cuatro metálicas.

Fuentes del Club La Costa World han explicado que la piscina se encuentra “en perfecto estado”. “Esta mañana [del miércoles] ya no estaba precintada, es totalmente apta para el baño”, han explicado. El portavoz de la empresa, Juan José Millán, ha descartado la existencia de ninguna negligencia y ha apuntado que la investigación debe seguir su curso y que están colaborando en ella. La firma que gestiona este alojamiento ha comenzado también una investigación interna, aunque subrayan que se han centrado en encargarse de la familia de los fallecidos. La hermana de los menores y su madre están siendo atendidas por un equipo de psicólogos.

Para intentar conocer detalles de lo ocurrido, miembros de la policía judicial de la Guardia Civil han tomado declaración a las personas que estaban por la zona el martes a mediodía. El relato de los testigos ha permitido realizar una breve reconstrucción de los hechos. Sobre las 13.30, la niña estaba dándose un baño. Cuando quiso salir, no pudo. Pidió entonces auxilio y su hermano mayor se lanzó al agua para ayudarla, como también hizo el padre. Ninguno pudo salir del agua y todos murieron.

La piscina no dispone de socorrista en estas fechas. De hecho, es muy poco utilizada por los clientes de la urbanización ya que cuentan con otra bajo techo. Pero al escuchar los gritos, varios empleados se lanzaron al agua para rescatar los cuerpos. Rápidamente les aplicaron maniobras de reanimación cardiopulmonar y, con la ayuda del médico de la instalación, usaron los desfibriladores, según han explicado fuentes de la empresa.

Sin embargo, no pudieron salvarles la vida. Cuando los servicios de emergencias sanitarias llegaron, certificaron la muerte de las tres personas. Según han explicado a Efe fuentes de la investigación, uno de los trabajadores también ha explicado que tuvo problemas para abandonar la piscina.

La familia tenía pensado pasar en Mijas unos días de descanso entre el 21 y el 28 de diciembre. La madre y esposa, así como una tercera hija, también han hablado con los agentes de la Guardia Civil para contar lo sucedido. Ambas estaban en la urbanización cuando ocurrieron los hechos y han necesitado de ayuda psicológica del servicio de Emergencias del 112 en Andalucía.

Tras certificar el médico el fallecimiento de las tres personas se activó la comitiva judicial y el levantamiento de los cuerpos, que fueron trasladados al Instituto de Medicina Legal de Málaga para practicarles la autopsia.