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El Gobierno prepara medidas de impacto para restar espacio a Podemos

No habrá un anuncio espectacular inmediato pero sí habrá en poco tiempo iniciativas sociales

Sánchez e Iglesias, el día de la moción de censura contra Rajoy.Foto: atlas | Vídeo: Uly Martín
Anabel Díez

En pocas semanas Pedro Sánchez pretende que se aprecie el perfil de su Gobierno y en pocos meses que se note la huella de la acción de su Gabinete. Las primeras medidas del Ejecutivo socialista, que este jueves empezó su andadura, serán de impacto social, dirigido a los sectores de izquierda que en los últimos comicios votaron a Podemos. Las más sobresalientes serán sobre sanidad, dependencia y medidas laborales a las que el partido de Pablo Iglesias tendrá dificultad para negar su apoyo. Unas se plasmarán en proyectos de ley y otras en ofertas de pacto a toda la oposición.

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No habrá un anuncio espectacular inmediato como la salida de las tropas de Irak, señalan fuentes del Gobierno, que recuerdan lo que hizo el presidente socialista José Luis Rodríguez Zapatero en 2004. Pero sí habrá en poco tiempo medidas de impacto para que la huella del Gobierno de Pedro Sánchez se aprecie en semanas y esta sea profunda una vez pasados varios meses.

Las primeras tendrán impacto social y por su contenido situadas en el ámbito de la izquierda. “Tenemos que recuperar derechos perdidos”, señalan como primera aproximación fuentes gubernamentales. La ley de igualdad salarial y la de igualdad contra todo tipo de discriminación de trato, están en cabeza de salida y vendrán de la mano de la vicepresidenta del Gobierno y ministra de Igualdad, Carmen Calvo.

Esta es la intención inicial del jefe de Gobierno, que este viernes se reunirá por primera vez en Consejo de Ministros con su equipo. Este jueves, una vez que tomaron posesión de sus cargos, tras prometer la defensa de la Constitución ante el rey Felipe VI, los ministros se desplazaron a sus nuevos lugares de trabajo para tener el primer contacto con los funcionarios.

Fijar prioridades

Cada uno de ellos ya ha estudiado los asuntos que debe abordar, aunque será el viernes cuando se establezcan las prioridades. La universalización de la asistencia sanitaria, que el Gobierno del PP retiró a extranjeros sin papeles y a personas que no tenían seguridad social, será otra de las medidas que se adopten con cierta celeridad. Esta decisión le corresponde a la titular de Sanidad, Carmen Montón.

Estas medidas las hubiera querido consensuar Podemos desde el Gobierno, pero no será así. En cualquier caso, Pedro Sánchez ofrecerá a Iglesias negociarlas, pero será su Gobierno el que lleve la iniciativa. Por mucho que Iglesias acentúe las críticas, Sánchez no teme que Podemos niegue su apoyo ya que son medidas dirigidas al electorado de izquierdas, señalan las fuentes consultadas.

Estos votantes, que desde 2015 se dividieron entre el PSOE y Unidos Podemos, verán con buenos ojos que desde el Ministerio de Trabajo, que dirigirá Magdalena Valerio, se replanteen aspectos de la reforma laboral sin dejar vacíos en la legislación, recalcan estos interlocutores. La recuperación de la negociación colectiva para el diálogo entre empresarios y sindicatos —y no dejarlo solo en manos de las empresas— va a abordarse de inmediato. No echar en saco roto las reivindicaciones de las camareras de habitaciones de los hoteles, las Kellys, está en el listado de prioridades de la ministra de Industria y Turismo, Reyes Maroto. Este tema también es fundamental para Unidos Podemos.

No olvida Pedro Sánchez que los votos de Unidos Podemos le hicieron presidente, de la misma manera que no negoció nada y nada prometió, señalan los interlocutores consultados. Podemos, junto a fuerzas políticas independentistas y nacionalistas, apoyó una moción de censura contra Mariano Rajoy por los casos de corrupción, continúan estas fuentes.

La independencia que siente el jefe de Gobierno tras llegar a La Moncloa sin hipotecas es tanta como la dificultad que tendrá para sacar adelante cualquier proyecto con los 84 diputados que tiene el PSOE.

En el campo educativo, la derogación de la LOMCE tuvo el acuerdo de toda la oposición e incluso el PP está dispuesto a su modificación. Ahora, la ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celáa, ofrecerá un pacto de Estado por la educación a todas las fuerzas políticas.

Su experiencia en la misma materia como consejera de Educación en el País Vasco le da seguridad en esta tarea, pero con matices diferenciales respecto a la sempiterna oferta de cambiar por consenso la ley educativa.

La Formación Profesional es el reto de esta política vasca. Pedro Sánchez quiere poner las bases para la dignificación de este tipo de enseñanza.

Aunque este objetivo puede ser común, en el PSOE se considera que pertenece al ámbito de la izquierda la confianza de poder sacar adelante las principales leyes sociales. Si Podemos se opone a medidas iguales o similares a las que ellos han presentado, tendrán que explicarlo a su electorado, que es al que se dirige el nuevo presidente del Gobierno.

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Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

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