Detenido el responsable de una ONG en Almería que pedía sexo a cambio de alimentos
Alrededor de treinta víctimas han sido localizadas por la Guardia Civil
Un varón de 63 años, responsable de una organización no gubernamental (ONG), ha sido detenido este martes en Vícar (Almería), acusado de pedir relaciones sexuales a personas en situación de necesidad a cambio de alimentos. Además, la Guardia Civil investiga también a su esposa y a otro responsable de la ONG como presuntos autores de un delito de apropiación indebida. El principal arrestado está acusado de crear un entramado para apropiarse de alimentos que debía repartir, cobrando incluso por ellos. Alrededor de treinta víctimas han sido localizadas por el instituto armado.
La denuncia presentada por una de las víctimas el pasado enero puso en marcha la operación Asuero, según ha informado la Guardia Civil en una nota. Fue el primer testimonio que relató las prácticas que supuestamente realizaba V.G.H.M, acusado de un delito contra la libertad e indemnidad sexual y otro de apropiación indebida
Según manifestó la víctima, el acusado le ofreció comida a cambio de mantener relaciones sexuales " desde el primer momento", accediendo por la mala situación que pasaba. Las víctimas carecían de trabajo o se encontraban en condiciones de precariedad y con hijos a su cargo. Muchos de las personas afectadas son cabeza de familias monoparentales y se encontraban en el país en situación irregular, subsistiendo en gran medida gracias a ayudas y acciones humanitarias.
Irregularidades en la ONG
Los agentes de la Guardia Civil constataron además que otro responsable de la ONG "omitía sus obligaciones" porque no controlaba las inscripciones de personas necesitadas y tampoco la recogida, el almacenamiento y la entrega de los alimentos. Estas funciones las delegaba en el detenido. V.G.H.M entregaba los alimentos a personas que no estaban dentro del Programa de Ayuda Alimentaria y a las que sí estaban, no les daba la cantidad correspondiente.
Según el instituto armado, el arrestado almacenaba los alimentos de la ONG en su garaje, que además de no ser el lugar designado para ello, carecía de condiciones de salubridad. También cobraba efectivo a algunas de las víctimas para entrar en el programa.
De las treinta víctimas localizadas, la Guardia Civil ha podido confirmar que seis de ellas accedieron a mantener relaciones sexuales con V.G.H.M., mientras que en el caso del resto únicamente les habría cobrado por acceder a los alimentos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.