Iglesias y Errejón escenifican su reconciliación y cierran filas con la moción de censura al PP

Más de dos meses y medio después de Vistalegre 2, Pablo Iglesias e Íñigo Errejón escenificaron este martes su reconciliación. El líder de Podemos y su ex número dos, que tras ser derrotado en el congreso del partido perdió ese puesto y la portavocía parlamentaria, además de ser apartado de todo altavoz mediático, protagonizaron por primera vez un acto conjunto por la celebración del Dos de Mayo en Madrid. El mitin, ante varios centenares de simpatizantes en la plaza del museo Reina Sofía de Madrid —donde el partido celebra siempre las noches electorales— sirvió como lanzamiento oficioso de la candidatura de Errejón a la Presidencia de la Comunidad de Madrid en 2019, y para promocionar las dos mociones de censura que el partido promueve contra el PP.

“No es casualidad que nos juntemos en un 2 de mayo. Es un orgullo juntarme en el escenario con Pablo”, afirmó Errejón nada más tomar la palabra. El secretario de Análisis Estratégico de Podemos y el líder lanzaron varios mensajes implícitos sobre la candidatura de Errejón a la Comunidad en 2019. “Tu inteligencia, lo que representas, tu capacidad para seducir a los que faltan serán fundamentales para echar al PP de las instituciones en 2019”, dijo Iglesias a su ex número dos.

Uno y otro llamaron a la unidad. “Estoy seguro de que hoy hay muchos de nuestros militantes que sonríen”, apuntó Errejón sobre la nueva foto conjunta, aunque no renunció a terminar su discurso con la uve de victoria, el símbolo que usan los errejonistas. “Gracias, Íñigo, por disipar las dudas de los que siguen hablando de la división en Podemos. Muchas gracias por demostrar que remamos en el mismo barco”, dijo Iglesias. “Hemos discutido mucho, y seguiremos, pero contra el PP todos a una”, pidió el líder en Madrid, Ramón Espinar. El secretario general en la comunidad, que tendrá que apartarse para dejar paso a la candidatura de Errejón, dedicó al diputado palabras elogiosas — le presentó como "un referente intelectual para los procesos de cambio que hay en toda Europa" y uno de los "dirigentes fundamentales" de Podemos— al tiempo que puso en valor a la portavoz en la Asamblea, Lorena Ruiz Huerta.

El partido centró el mitin en defender las dos mociones de censura que ha anunciado que presentará, contra Mariano Rajoy y Cristina Cifuentes, aunque antes ambas tienen que ser validadas por sus bases. La consulta a la militancia en Madrid comenzó ayer, hasta el próximo domingo, mientras que la de las bases del partido en toda España se celebrará del 8 al 15 de mayo. En paralelo, buscarán sumar apoyo social a la moción con una concentración el 20 de mayo, la víspera de las primarias del PSOE, en la Puerta del Sol de Madrid.

“Pase lo que pase en el Parlamento, vamos a ganar la moción se censura”, afirmó Iglesias, "España no tolera más al PP". La moción, explicó, tiene que servir para demostrar dos cosas: que Podemos "sí está dispuesto a enfrentar al PP" y que tiene "una alternativa de Gobierno y de país". "¿Que más les hace falta falta que vean que hay que echarles ya?", reclamó al PSOE la portavoz parlamentaria, Irene Montero.

Durante este tiempo, Errejón ha permanecido en segundo plano, sin apenas conceder entrevistas, y sin participar en los actos del partido. El diputado, como contó a EL PAÍS el pasado abril, preparaba un regreso progresivo a la esfera pública no con un hito, sino con normalidad, esta misma primavera. El acto de este martes es el ejemplo. Con el título de "Madrid se levanta", "Contra el saqueo y la vulneración de la separación de poderes", el partido organizó su celebración alternativa del día de la Comunidad de Madrid, toda vez que no acudió a los actos oficiales. Iglesias y Errejón estuvieron acompañados de Irene Montero y los principales dirigentes en Madrid, así como del exJEMAD Julio Rodríguez, de quien Iglesias dijo que le aguardan "grandes tareas".

Errejón no ha cambiado de parecer y las ideas que defendió en el congreso de Podemos que le apartaron de Iglesias siguen siendo las mismas. “Los rasgos de lo que yo he defendido no han sido ningún secreto. Siempre he puesto énfasis en la vocación de mayorías y en demostrar la posibilidad de un orden alternativo, pero orden al fin y al cabo. Creo que hay que disputarle a los poderosos la idea de que ellos representan el orden”, explicó a este periódico. Ahora bien, el sector errejonista, que logró un tercio de los votos en el congreso, ha dejado de cuestionar en público las decisiones de la dirección. Aunque una de las últimas iniciativas de la cúpula, el Tramabús, no ha sido promocionado por los dirigentes encuadrados en esta corriente. Errejón se subió el lunes por primera vez al autobús propagandístico, pero solo para un desplazamiento.