“Lo de Montoro es intolerable y perverso con los municipios”

La financiación de los ayuntamientos, únicas instituciones que cerraron el ejercicio pasado con superávit, amenaza con abrir un nuevo frente al Ejecutivo de Mariano Rajoy en medio de las negociaciones para sumar apoyos a los presupuestos. “La política de beneficiar a los que incumplen y castigar a los que cumplen conduce al desastre”, advierte Abel Caballero, presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y alcalde socialista de Vigo, donde gobierna con mayoría absoluta. La FEMP reclama al Gobierno que los municipios puedan reinvertir los más de 7.000 millones de euros de superávit que alcanzaron en 2016.

Pregunta. El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, no es que atienda sus demandas en el proyecto de presupuestos presentado en el Congreso.

Respuesta. Hay una actitud y una filosofía antimunicipalista en este Gobierno. Denota un egoísmo, que las corporaciones locales sigamos siendo las que soportemos el coste del ajuste europeo. Que con nuestro superávit se cumpla con Europa en 2017 [el objetivo es del 3,1%]. Esto es intolerable. Perverso. Y eso es lo que Montoro tiene en la cabeza. Pero la política de beneficiar a los que incumplen y castigar a los que cumplen conduce al desastre. Tenemos superávit porque somos gente rigurosa. Sensata. Si se castigara a las comunidades que tienen más déficit del debido, ya vería cómo tienen superávit. O el Gobierno de España. O la Seguridad Social.

P. ¿Percibe diferencias entre el PP y el Gobierno por la financiación de los municipios?

R. El grupo popular de la FEMP votó, como el resto, por unanimidad la resolución para que podamos contratar en 2017 y 2018. Por tanto, quiere que seamos los ayuntamientos los que reinvirtamos nuestro superávit. Y el Gobierno no. Quiere decir que alguna diferencia ya hay, cosa que es normal. ¡Los alcaldes del PP tendrán que defender a sus ciudadanos también! Si la política del Gobierno es primar a los ineficaces y castigar a los eficaces, este país va al tacho [se muere].

P. ¿Qué partidos podrían asumir la enmienda?

R. Confío que todos. El PP, PSOE, Ciudadanos, Podemos, CiU, PNV… Todos. Porque lo que planteamos es "oiga, ustedes no pueden imponer el mayor castigo que hubo nunca contra los municipios". Que es no dejarnos recuperar un céntimo de nuestro ahorro el año que tuvimos un récord de ahorro y de contribución, para cubrir los requisitos europeos. Es decir, están diciendo a los eficaces que por ser eficaces los castigan.

P. Hay expertos que plantean que las comunidades tienen un déficit estructural equivalente el superávit de las entidades locales.

R. Quienes dicen eso no están en el mundo. Están en una campana de vacío. En otra galaxia. No saben cómo es el mundo. Todo sucede en las ciudades. Desconocen la respuesta que damos. Una parte importante de los Ayuntamientos en España somos la legitimización de la clase política. En el afecto, aprecio y valoración de los ciudadanos. Mire, esto que se dio en llamar la nueva política… La nueva política somos los alcaldes que lo hacemos bien. Estamos en el diálogo permanente en una ciudad. ¿Cómo cree usted que yo puedo tener el 52% de los votos en una ciudad de 300.000 habitantes? Contacto con toda la sociedad, no hay otra explicación. Quienes no lo entiendan están en las catacumbas. Hay gente en la política y en los expertos de España que están en los tiempos de los romanos, que no evolucionaron. No entienden lo que está pasando.

P. ¿En qué época está Mariano Rajoy?

R. Rajoy conoce el municipalismo porque estuvo en él, pero creo que antepone los intereses de Gobierno a las necesidades reales de las entidades locales. Este año, en el que tuvimos el mayor superávit de la historia del municipalismo en España, más de 7.000 millones, la respuesta del Gobierno es la más negativa que tuvimos nunca. Por la vía del hecho nos dice que no nos va a dejar invertir ni un euro de los 7.000 [en gasto corriente]. ¿Cuál es el incentivo de ser eficaces? Si nos castigan con techo de gasto y nos castigan con reinversión, aquí es mejor tirar por la vía de en medio. Si no nos dejan reinvertir, aportaremos más de un punto. Más de 10.000 millones de euros. ¡Pero si casi nosotros ya cubrimos el objetivo de Europa para todas las Administraciones! Esto es clamoroso, va en contra del municipalismo de forma incomprensible.

P. Lo pueden destinar a amortizar deuda y a gasto sostenible, como asfaltado de calles o el cuidado de zonas verdes.

R. Es difícil meter 7.000 millones en eso. Sería malgastar dinero. Quien pretende que hagamos gastos improductivos es el Gobierno. No. Queremos hacer inversiones razonables, gastos razonables. Aparte, contratar una inversión en seis meses… Los plazos no permiten hacerlo este ejercicio. Ese es el problema. Los presupuestos se aprueban el 30 de junio. Por eso pedimos que nos permitan reinvertir el superávit y que la inversión se pueda contratar y ejecutar a lo largo de 2017 y 2018. Que se aprueban tarde es un dato. Pero aprobándose tarde se puede resolver y permitirnos invertir lo que ahorramos en 2016. La FEMP ha aprobado por unanimidad una resolución para que podamos contratar en 2017 y 2018. Y ya está. Arreglado.De lo contrario, no da tiempo.

P. Y esto lo sabe Montoro.

R. ¡Bueno, lo sabe mejor que nosotros! La regla la hizo él, los plazos los pone él… Nosotros ponemos el superávit. ¡Y qué superávit! ¡Más del 0,6% del PIB! Y llevamos con superávit cinco años. Desde 2012 el conjunto de las corporaciones locales viene generando un superávit acumulado de 25.000 millones: 2.287 millones ese ejercicio (0,32% del PIB), 5.474 en 2013 (0,55%), 5.938 en 2014 (0,53%), 5.094 en 2015 (0,47%) y 7.083 en 2016 (0,64%). Hasta ahora nos dejaban reutilizar una parte del excedente y, bueno, no nos satisfacía pero digamos que nos valía. Pero es que esta vez no nos dejan reutilizar prácticamente nada. Entonces, el mejor año y en el que más contribuimos es en el que nos castigan de una forma intolerable. Esto para nosotros es un casus belli. Y estoy hablando en nombre de 8.125 ayuntamientos y en nombre de todas las diputaciones. De todos los colores políticos de todo el espectro político en España. No nos vamos a quedar quietos.