“El PSOE ha ganado siempre que desde la izquierda miraba al centro”
José Carlos Díez tiene el encargo de elaborar la ponencia económica para el congreso que el PSOE celebrará en junio
José Carlos Díez (Palencia, 1971) es un economista fajado en tertulias y platós televisivos, con un discurso muy individualista. Lo que tiene ahora entre manos, el encargo de elaborar la ponencia económica para el congreso que el PSOE celebrará en junio, le obligará a escuchar más que a hablar, colegiar sus esfuerzos y ser muy consciente de que no puede empezar de cero: debe diseñar la propuesta para el siglo XXI de un partido que tiene 130 años de historia. De momento, el encargo es para cuatro meses, pero estará “a lo que le pidan”.
Pregunta. ¿Está obligado el PSOE a cambiar de mensaje para recuperar los millones de votos perdidos?
Respuesta. Estamos obligados a adaptarnos. Mantenemos un bloque fiel de votantes, pero debemos enfocar nuestros esfuerzos especialmente a los menores de 35 años y a las clases urbanas más activas. Queremos hacer un programa socialdemócrata clásico (con su parte social, redistributiva, de igualdad de oportunidades...), pero a la vez estamos obligados a impulsar una economía más competitiva e innovadora que cree más empleo. El mundo está cambiando muy rápido y todos, el PSOE también, debemos adaptarnos.
P. ¿Desde la izquierda?
R. Ya nos sitúan los electores a la izquierda, pero el PSOE ha ganado siempre elecciones cuando su relato se ha centrado, cuando desde la izquierda ha sabido mirar al centro. El problema de la socialdemocracia europea es que quiere seguir viviendo en los ochenta, cuando no había móviles, los billetes de avión eran carísimos, los chinos eran pobres y contaminábamos alegremente el planeta.
P. ¿Defiende entonces la globalización ahora que está más de moda que nunca atacarla?
R. A España la globalización le ha ido bien. Desde 1980 hemos consolidado la democracia y hemos creado seis millones de empleos. Junto con Corea del Sur, somos el país que más se ha beneficiado de la globalización. Tenemos multinacionales que compiten en el mundo. Necesitamos más. Lo que la socialdemocracia debe defender, desde sus principios, es una mejor gobernanza de la globalización.
P. Concretemos: ¿debe seguir aspirando el PSOE a derogar la reforma laboral del PP?
R. El PSOE tiene 85 escaños. La política debe comenzar a recuperar la credibilidad y la honestidad. No se puede prometer lo que no vas a cumplir. De momento, ya hay una propuesta de todos los partidos, salvo el PP, para reformar las leyes laborales. A corto plazo, habrá que negociar. Y si en el futuro volvemos a gobernar, ya haremos la reforma laboral que a nosotros nos gustaría hacer.
P. ¿Del brazo de los sindicatos?
R. Mi idea es incorporarlos a este esfuerzo. Por mi experiencia personal, las ideas más innovadoras y más progresistas a este respecto las he escuchado de las personas que trabajan en el equipo de industria de UGT, por ejemplo. Y su discurso de innovación y reindustrialización estará en nuestro programa.
P. ¿Y la patronal?
R. Su discurso se ha quedado en el siglo XX. De hecho, las empresas más innovadoras de este país no ven a la CEOE como un interlocutor. Debería dejar de preocuparse tanto por los impuestos y más sobre cómo ayudar a que nuestras empresas medianas se conviertan en empresas más grandes y competitivas.
P. ¿Es de izquierdas subir impuestos?
R. En absoluto. Si subir impuestos fuera de izquierdas, Rajoy sería comunista. Los impuestos son un instrumento, no un fin. El fin es luchar contra la precariedad y la desigualdad. En España el IRPF es ya bastante progresivo. Lo que necesitamos es gente con salarios más altos para que entren en los tramos más altos. Solo si volviéramos al nivel del peso de los salarios de antes de la reforma laboral del PP, en 2011, recaudaríamos 6.000 millones más de euros.
P. ¿Hacia dónde hay que apuntar entonces?
R. Por ejemplo, hacia el modo en que la Comunidad de Madrid ha perdonado el impuesto de Patrimonio. Nuestro sistema es federal y es bueno dar margen de actuación a las comunidades para que modulen su recaudación fiscal, pero perdonar al 0,2% de los madrileños más ricos 600 millones de euros es un desequilibrio que hay que corregir. Nosotros aspiramos a establecer un tipo mínimo.
P. No ha empezado usted con buen pie, tras sus polémicas declaraciones sobre la renta básica en un programa televisivo [Díez dijo en La Sexta que si se implantara una renta básica “no es que pongas el muro de Trump, es que tendrás que poner francotiradores” contra los inmigrantes].
R. Una frase desafortunada que me ha provocado un enorme disgusto, porque va en contra de todo lo que he defendido. Soy un defensor de la inmigración y me repugnan el racismo y la xenofobia. Yo apoyo la renta mínima de inserción que defiende el PSOE. Ahora bien, la gente lo que quiere es empleo, que puedan regresar al mercado de trabajo. Y para eso es prioritario cambiar las políticas activas de empleo. Olof Palme decía: “No nos importa que haya ricos, lo que no queremos es que haya pobres”. Un socialdemócrata no dejará tirado a nadie, pero la prioridad es devolverles al mercado de trabajo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.