Anticapitalistas quiere acabar con los amplios poderes del líder de Podemos
El secretario general no podría convocar consultas internas, según su borrador de ponencia
Anticapitalistas, la corriente más izquierdista de Podemos y la tercera familia en apoyo, quiere restar importantes poderes al secretario general. Según su propuesta de documentos para el próximo congreso, el líder perdería la capacidad de convocar consultas a las bases por sí mismo y de nombrar y destituir a su ejecutiva. El sector que será llave quiere autonomía para los territorios y definir un rumbo que dé prioridad a la protesta social.
Pablo Iglesias puede convertirse en un secretario general con mucho menos poder si prosperan las iniciativas de los anticapitalistas, algunas de las cuales comparte el número dos del partido, Íñigo Errejón. El sector más izquierdista y asambleario quiere un líder con menos atribuciones especiales y una descentralización de la toma de decisiones, dando más independencia a las organizaciones autonómicas. “Hay que reinventar Podemos”, sostiene el eurodiputado Miguel Urbán, principal referente de la tercera familia, que será llave para el próximo congreso.
Anticapitalistas, que lograron el 10% de apoyo en la última consulta, pretenden revertir el modelo de partido que salió del primer congreso de Vistalegre 1, con un liderazgo presidencialista y vertical, y en el que los círculos, la principal novedad organizativa, no tienen un papel interno real. “La cultura vertical de Vistalegre es uno de los errores más grandes. No se confió en la gente”, se quejó este jueves Urbán en la presentación pública de los documentos político y organizativo que defenderá en el cónclave.
Según su propuesta, el líder, que pasaría a llamarse coordinador general, perdería una de sus facultades más importantes, la de convocar consultas a las bases unilateralmente. Podría proponerlas, pero necesitaría que fueran aprobadas en el consejo ciudadano (máximo órgano de dirección). De esta forma, Iglesias no podría haber convocado un referéndum interno sobre las reglas del congreso, como hizo el pasado diciembre entre críticas de los errejonistas, que se quejaron de que su propósito fue saltar al consejo ciudadano en el que estos tienen mayoría.
Urbán: “Ahora toca resistir y protestar”
El eurodiputado de Podemos y principal referente de los Anticapitalistas, Miguel Urbán, cuestionó ayer la línea política que el número dos del partido, Íñigo Errejón, defenderá en su ponencia política para el congreso. Errejón avanzó por la mañana la tesis principal que desarrollará en su documento. "No es momento de replegarnos en una formación de resistencia y de protesta, es momento de tomar la iniciativa y demostrar que somos útiles", señaló Errejón tras asistir a un congreso de CC OO.
Urbán defiende lo contrario. “Ahora lo que toca es resistir y protestar contra el tripartito de los recortes, claro que sí”, argumentó. Los 71 diputados de Unidos Podemos no son suficientes y hay que volver a salir a la calle, defiende Urbán.
El líder anticapitalista pidió también a Pablo Iglesias que no trate de “integrar” al resto de sensibilidades como ha avanzado que pretende con su ponencia, sino que todos trabajen en común para llegar a una síntesis de ideas.
La propuesta de los anticapitalistas pasa también porque el secretario general no pueda nombrar una ejecutiva totalmente afín, porque esta tendría que ser proporcional de acuerdo con los resultados de las primarias. Tampoco podría nombrar ni destituir a sus miembros sin acuerdo del consejo. Iglesias también hizo uso de esta atribución en la destitución fulminante del exsecretario de Organización Sergio Pascual. Anticapitalistas plantea además que el secretario general no pueda disolver órganos autonómicos o municipales, una facultad que ahora tiene sin más limitación que “por cuestiones de especial trascendencia” y “si lo estima oportuno”.
Anticapitalistas quiere un partido más descentralizado con mucha independencia de las organizaciones autonómicas, restando atribuciones sobre estas al órgano de dirección estatal y al líder. En clara influencia de la líder andaluza, Teresa Rodríguez, que se adelantó en estas demandas anunciando a Iglesias por carta que Podemos Andalucía se constituía como un “partido autónomo y federado”, el documento diseña un partido confederal en el que las organizaciones autonómicas pueden decidir “dotarse de una entidad jurídica propia, con contabilidad y CIF propios”. También tener autonomía de decisión y elaboración de sus listas electorales. “Necesitamos ámbitos de decisión privativos de los territorios, propios e inapelables respecto a la dirección estatal”, reclamó Rodríguez en la presentación en Madrid junto a Urbán.
Contra el PSOE
El sector de Urbán y Rodríguez, que pretende confrontar con su propia lista en el congreso, define también el rumbo político que quiere para Podemos, basado en priorizar la protesta social y confrontar con el establishment y con el PSOE. Eso pasa “por no mimetizarse, ni en la forma de hacer política ni en el proyecto y políticas que defendemos, con el PSOE”, escriben en su borrador de ponencia política, en el que apuntan que hay “compañeros” que defienden ese parecido, refiriéndose sin citarlo a Errejón. Urbán cree que Podemos tiene que constituirse como una “maquinaria de conflicto social” porque uno de sus mayores riesgos es “convertirse en un partido más. No hay nada que normalice más que las instituciones”, sostuvo el eurodiputado. Para combatir esa normalización hay que estar en las calles y mostrarse como una fuerza “antagónica” al PP y al PSOE. “El PSOE de la gestora es nuestro antagónico, es la pata izquierda del régimen que nosotros querremos derrotar”, señaló Urbán.
Un eventual Gobierno de Podemos debería, en su opinión, practicar la “desobediencia”, negándose a asumir el equilibrio fiscal de Bruselas o el pago de la deuda. Y nacionalizar los sectores estratégicos.
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