El narco que importaba muebles chinos y fruta de Sudamérica
Robert Dawes, detenido en Málaga, lideraba una de las mayores bandas de narcos de Europa
El británico Robert Dawes, de 44 años y natural de Nottingham, ha protagonizado en los últimos años una especie de película de acción. Pero su papel no sería el de héroe, sino el de villano. Le seguían la pista la Guardia Civil, la Policía Judicial Francesa, la Agencia Británica contra el Crimen y Europol por liderar, supuestamente, la mayor organización de narcotráfico de Europa. Tenía en Málaga un entramado societario con el que supuestamente blanqueaba los beneficios del narcotráfico, para lo que se valía de muebles de China y contenedores de fruta de Sudamérica que importaba. Una operación conjunta de estos cuerpos de seguridad permitió su detención en Benalmádena (Málaga) hace unas semanas. El asalto a su mansión se produjo de madrugada con la participación de agentes de las Unidades Especiales de Intervención del instituto armado por su “peligrosidad”.
Dawes, actualmente encarcelado en una prisión francesa, era investigado desde 2007 por sus vínculos con el narcotráfico. La Guardia Civil lo acusa de abastecer a Europa de cocaína procedente de Sudamérica y de enviar heroína desde Turquía y Afganistán. La organización tenía conexión con al menos 13 países y con la mafia calabresa Ndrangheta, supuestos compradores de grandes cantidades de estupefacientes a este grupo delictivo. La droga se transportaba en contenedores por vía marítima, aeronaves comerciales y embarcaciones recreativas.
El supuesto narcotraficante ya había sido detenido en 2008 por una orden internacional española, tras huir a Dubái por la presión policial, aunque quedó en libertad tras pasar un tiempo entre rejas. En ese momento se estableció en la Costa del Sol. Residía con su familia en una mansión de Benalmádena, custodiado por un fuerte equipo de seguridad, atendido por personal de servicio y rodeado de lujo. Dawes vestía vaqueros y una sudadera en el momento de su arresto.
La organización, de estructura piramidal, se comunicaba con teléfonos y mensajes encriptados, algo que dificultaba su control. Para facilitar el trabajo, Europol creó un grupo con policías de varios países, liderado por la Guardia Civil, que se dedicó en exclusiva a seguir los pasos de Dawes y su banda. Las pesquisas se centraron en la Costa del Sol tras una gran operación en 2013 en el aeropuerto francés Charles De Gaulle. Se intervinieron 1.332 kilos de cocaína, transportada en 32 maletas, y se detuvo a seis personas, tres de ellos de la Ndrangheta. En Venezuela, fruto de este dispositivo, cayeron 27 personas, incluidos varios mandos militares.
Los agentes, a lo largo de la investigación, han constatado reuniones del supuesto capo británico con representantes de los cárteles de Medellín (colombiano) y De los Soles (venezolano) en hoteles de Madrid. Dawes disponía en el litoral malagueño de un entramado societario con el que supuestamente blanqueaba los beneficios del tráfico de drogas, centrado en la importación de muebles desde China y de contenedores de fruta desde Sudamérica. En este último caso, se dirigían al Puerto de Algeciras, en Cádiz, y también se habrían utilizado para transportar estupefacientes.
La operación, bautizada con el nombre de Halbert IV, ha permitido desmantelar la estructura empresarial y financiera del grupo. Durante los registros se han intervenido 150 teléfonos móviles encriptados, 40 ordenadores portátiles, 30 discos duros de almacenamiento informático y 450.000 euros en metálico. Han sido decomisados, además, 19 inmuebles valorados en 5,5 millones de euros.
En los últimos ocho años, desde que comenzaron las pesquisas alrededor de Dawes, se han practicado 15 operaciones en distintos países de Europa y Sudamérica que han permitido la detención de 50 personas y la intervención de más de dos toneladas de droga, entre cocaína y heroína. Además de propiedades inmobiliarias, se han decomisado aviones y veleros. La Guardia Civil apunta que Nottingham (centro de Inglaterra), ciudad de origen del narcotraficante, es “la cuna de la delincuencia más peligrosa y violenta del Reino Unido”.
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