El paro de diputados y senadores
402 parlamentarios cobran el equivalente a dos salarios durante la disolución de las Cortes
Algunos ya están en modo campaña electoral en busca de la reelección. Otros pueden dedicar sus días al descanso o a la actividad que prefieran, siempre que no sea remunerada. Más de 400 parlamentarios de un total de 616 —222 diputados y 180 senadores— cobran un ingreso equivalente a casi dos meses de sueldo hasta la celebración de las elecciones del 20 de diciembre porque, tras la convocatoria de dichos comicios, publicada el 27 de octubre, las Cámaras quedaron disueltas y ellos, sin empleo. Los parlamentarios que así lo han solicitado —y siempre que no tengan otro ingreso, ni público ni privado— perciben la llamada "indemnización de transición".
Se trata de un pago que ha sido pensado como una especie de compensación, de subsidio de desempleo, para quienes "causen baja por disolución o expiración del mandato". En este caso, para quienes dejan sus escaños durante la campaña electoral que ha empezado este viernes. La primera vez que los parlamentarios cobraron dicho ingreso fue en 2008.
La indemnización de transición corresponde al pago de 54 días inhábiles: desde la disolución de las Cortes hasta el día previo a las elecciones. Por tanto, no afecta a los diputados y senadores que forman parte de la Diputación Permanente —un grupo de parlamentarios que queda de guardia en periodos inhábiles como este— que percibirán sus retribuciones habituales hasta la constitución de las nuevas Cámaras, prevista para el 13 de enero de 2016.
En el caso del Congreso, 103 parlamentarios forman la Diputación Permanente: el presidente y 51 diputados más 51 suplentes. Es decir, hasta 247 diputados podían solicitar la indemnización de transición y, al final, 222 lo hicieron (el 90%). En el Senado, en cambio, 77 de 266 conforman la Diputación Permanente (el presidente, 38 titulares y 38 suplentes), por tanto, 189 senadores podían pedir el pago, y 180 lo hicieron (el 95%).
El monto final varía según las particularidades de cada diputado. La Mesa del Congreso acordó que los parlamentarios cesantes que lo solicitaran recibieran la asignación constitucional que es idéntica para todos (2.813,87 euros al mes) más la cantidad que cada uno percibe en función de la provincia a la que representa (870 euros para los diputados de Madrid y 1.823 para el resto). A estas cifras se pueden sumar los complementos por otros cargos; por ejemplo, 1.431 euros para el presidente de una comisión y 1.046 euros para un portavoz.
La Cámara debe destinar un millón y medio de euros para el pago de los 180 senadores que han pedido la indemnización
El Congreso abrió un plazo para que los diputados pidieran dicha indemnización rellenando un formulario y, al final, 222 la han solicitado, según la lista oficial.
¿Cuánto dinero se ha destinado? La cifra no termina de cerrarse, según fuentes parlamentarias. Por ejemplo, el diputado Odón Elorza, cabeza de lista del PSOE en Gipuzkoa, anunció el pasado martes que devolvería más de la mitad de la indemnización porque "no es ético" percibir una compensación por alojamiento y gastos de representación sin mantener actividad parlamentaria.
El sueldo mensual de Elorza ronda los 5.700 euros: 2.813 de base, 1.823 por los gastos de su actividad en Madrid y 1.046 por ser vicepresidente de la Comisión de Cultura. Sin embargo, Elorza ha decidido devolver 3.652 euros que recibió por dietas y gastos de representación y mantener la parte de la indemnización que corresponde a su asignación constitucional (3.580 euros).
La Mesa del Congreso también ha resuelto que los diputados puedan quedarse con los teléfonos iPhone, ya que la Cámara los recibió sin coste por las condiciones del contrato firmado con una operadora. Además, el parlamentario que desee quedarse con su tableta tendrá que abonar al Congreso 50 euros. Para establecer el coste se ha realizado un estudio del valor residual. "Son tabletas descatalogadas, iPad 2, con cuatro años de uso", explican desde el Congreso.
El Senado, en cambio, acordó que los senadores cobraran 154,54 euros brutos al día entre la disolución de las Cortes y la jornada anterior a las elecciones. Así, los parlamentarios reciben una indemnización de 8.345,16 euros (154,54 euros por 54 días), incompatible con otros ingresos. La Cámara debe destinar un millón y medio de euros para el pago de los 180 senadores que han pedido la indemnización de transición.
Una modificación en el reglamento
- El cambio. Para que los parlamentarios, sin serlo ya, puedan seguir cobrando fue necesario modificar el reglamento de pensiones. Los partidos pactaron en 2006 crear una "indemnización de transición" y en 2007 le pusieron cifras a ese pago: el equivalente al sueldo, pero sin algunos extras.
- Una nueva restricción. La ley 3/2015, publicada en marzo, establece que los parlamentarios pueden pedir la indemnización solo si no tienen previsto tener otro ingreso, ni público ni privado. La primera vez que la cobraron fue en 2008.
- El acuerdo. La primera vez que los parlamentarios cobraron dicha indemnización fue en 2008, tras un acuerdo entre las Mesas del Congreso y Senado, de diciembre de 2007, y una reforma legal de esa misma fecha. Extender el pago equivalente a dos mensualidades a más de 600 diputados y senadores costó, entonces, más de cuatro millones de euros. Antes, lo usual era que cobraran solo el mes completo en el que se disolvían las Cortes, en este caso, el salario de octubre.
- Dos salarios. Se trata de un pago equivalente a casi dos de mensualidades (en este caso, 54 días de sueldo, desde la disolución de las Cortes hasta la jornada electoral del 20-D), que se abonan en un pago único, sujeto a tributación.
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