La juez investiga supuestos sobornos al Gobierno del BNG en Pontevedra

La Operación Pokémon, que desde 2012 investiga el supuesto pago de sobornos a políticos de Galicia, ahora salpica al BNG a través de su principal alcalde: Miguel Anxo Fernández Lores, regidor de Pontevedra desde 1999. El BNG era, hasta el momento, el único de los principales partidos gallegos que quedaba al margen de la trama corrupta. La juez Pilar de Lara, titular del Juzgado de Instrucción 1 de Lugo, ha citado a declarar al alcalde, a un concejal, a un extesorero y a técnicos municipales que supuestamente recibieron sobornos de la firma Aquagest (actualmente Viaqua), una de las filiales del grupo Agbar. La magistrada aún no fija una fecha para el interrogatorio.

La juez sospecha que Fernández Lores; su portavoz municipal y concejal de Hacienda, Raimundo González; y varios funcionarios del Ayuntamiento favorecieron la renovación del contrato a la empresa a cambio de favores. El entonces tesorero del BNG, Xosé Gontá, habría hecho de intermediario en el supuesto acuerdo entre el alcalde y la firma, según consta en el sumario.

La documentación aportada por agentes de Aduanas a petición de la instructora —que este miércoles ordenó un registro en las dependencias municipales que se prolongó hasta la madrugada— destapa una comida de Fernández Lores con directivos de Aquagest, pagada por la empresa que la carga como "obras varias en Galicia", mientras se sucedían favores de la concesionaria (viajes, enchufes y regalos) a representantes municipales.

La juez, que ha imputado a un centenar de personas en esta causa y ha detenido a representantes de la empresa y a políticos del PP y el PSOE, no ha imputado hasta el momento a ningún miembro del BNG, ni a funcionarios del Ayuntamiento de Pontevedra. Los pinchazos telefónicos de 2012 desvelan la satisfacción del gerente de la empresa, José Luis Míguez Rey, por la comida con el alcalde de Pontevedra, celebrada en el restaurante Casa da Viña, en Santiago de Compostela, el 14 de mayo de ese año.

Míguez manifiesta en una conversación con una persona de Aquagest (que los agentes no identifican) que, en ese encuentro, el alcalde de Pontevedra "se mostró muy cariñoso" con ellos y pidió "que le echásemos una mano". El gerente interpreta que "echarle una mano" supondrá la "renovación" del contrato, que caduca en 2017 y que había sido realizado por el alcalde del PP que precedió a Lores. El directivo de Aquagest informa también a su interlocutor de que el entonces director territorial de la empresa en Galicia, Henry Laíño, posteriormente detenido junto a él, "está preparando unos números para hacérselos llegar" al alcalde.

Míguez no fue el único que comentó por teléfono el encuentro con Lores. Laíño también deja constancia en una conversación que mantiene con un empleado de su empresa. Según la transcripción realizada por Aduanas, el empleado le pregunta qué tal le fue en la comida con el alcalde y Laíño le comenta que "él mismo le sacó el tema de la renovación".

"Henry le dijo que si él movía el tema dentro del Ayuntamiento a nivel técnico, Henry conseguía el dinero", resumen los agentes las palabras del gerente de la empresa. Aduanas incorpora al sumario fotografías del encuentro en las que se muestra a Lores accediendo al restaurante, al que llega en un coche conducido por otro representante de la empresa, con los directivos de Aquagest.

Diez días después de esa comida, el entonces tesorero del BNG, Xosé Gontá, llama a Laíño de parte del alcalde de Pontevedra "para hablar del asunto del que hablasteis los dos" y quedan en verse personalmente en la oficina del primero en Santiago. Gontá propone "comentar ahí, a ver qué solución es la mejor para todos". Los directivos de la trama intentan por todos los medios ganarse a Lores. En una conversación grabada a finales del mismo mes entre Míguez y Laíño, este sugiere que deben "dar más satisfacción" al alcalde que "se porta mejor" con ellos y quedan en proponerle "temas relacionados con Smart City y cosas de ese tipo".

Viajes y regalos

Aquagest se vuelca con los favores. El sumario incluye documentación que acredita el pago por la concesionaria de viajes y estancias en hoteles a funcionarios municipales. Entre los beneficiarios figuran el ingeniero técnico de Obras Públicas Luis Navarro, el arquitecto municipal Ángel Velando y otros empleados del Ayuntamiento. El sumario incluye invitaciones a comidas y a un partido de baloncesto por parte de Aquagest al teniente de alcalde y concejal de Hacienda, Raimundo González.

Paralelamente, Aquagest acuerda entrevistas de trabajo con parientes de funcionarios con vistas a emplearlos en sus delegaciones. Entre otras, las del hijo de la secretaria de Lores en la alcaldía y de un familiar del ingeniero jefe. En julio de 2012, Míguez habla por teléfono con el delegado territorial en Pontevedra para preguntarle cómo se van a presentar al concurso para la adjudicación de la ETAP (Estación de Agua Potable) de Pontevedra y le explica, según la transcripción de Aduanas, que Laíño ya había pactado con otras empresas.

La instructora sospecha que "se utilizaban varias empresas, en apariencia ajenas a Aquagest, para amañar concursos públicos". De Lara ha citado para tomar declaración al alcalde Miguel Anxo Fernández Lores, al extesorero del BNG y a los técnicos municipales que supuestamente recibieron sobornos de Aquagest. También demanda toda la documentación de las empresas incluidas en el grupo Aguas de Barcelona entre 2009 y 2013.