Detenidos ocho españoles por luchar en el bando prorruso en Ucrania
Se les imputa la participación en delitos de asesinato, tenencia de armas y explosivos
La Comisaría General de Información del Cuerpo Nacional de Policía ha detenido este viernes a ocho españoles por combatir en el bando prorruso de la guerra de Ucrania. Las detenciones han tenido lugar en Asturias, Cataluña, Extremadura, Murcia, Navarra y Madrid. Tres de los arrestados son exmilitares españoles con experiencia en el uso de armamento de guerra y de uno se tiene total certeza de que había estado en primera línea de fuego, según fuentes de los servicios antiterroristas. Las edades de los encartados en la llamada Operación Danko están entre los 20 y los 30 años. Fuentes policiales aseguran que todos los arrestados han quedado en libertad a la espera de que el juez los cite a declarar.
Los detenidos son: R.M.P, A.A.M., A.I.B, S.B.V., A.R.S., B.L.M., H.A.P. y D.S.A. Las detenciones se han producido en Gijón, Cartagena, Barcelona, Cáceres, Pamplona, Alcorcón (Madrid) y dos de ellos en Madrid capital. Las fuentes consultadas han precisado que entre los retornados, ahora detenidos, se encuentran Rafael Muñoz Pérez, de 27 años, y Ángel Arribas Mateo, de 22, los dos jóvenes españoles que hicieron público, a través de vídeos insertados en las redes sociales, que se habían unido al Batallón Vostok, bajo las órdenes de Igor Strelkov, jefe de las Fuerzas Armadas de la República Popular de Donetsk.El primero es natural de Madrid y extrabajador social, aunque está afincado en Gijón (Asturias) donde milita en las Juventudes de Izquierda Unida desde 2010; el otro, nacido en Murcia, es seguidor de los Colectivos de Jóvenes Comunistas de Cartagena, la rama juvenil del Partido Comunista de los Pueblos de España
Los ocho detenidos pertenecen a distintas ramas de formaciones comunistas y habían recibido apoyo de una especie de liga europea prorrusa. La operación se ha acelerado tras el regreso de tres de ellos a lo largo del presente mes de febrero; el último llegó la semana pasada. Los arrestados, según ha informado Interior, se desplazaron el año pasado a combatir a las regiones ucranias de Lugansk y Donetsk.
Los arrestados, que fueron detenidos en una operación a las 6.30 de hoy, participaron en el conflicto armado en la región de Donbass, por lo que se les imputan la participación en delitos de asesinato, tenencia de armas y explosivos y actos que atentan contra los intereses de España.
La identificación de los detenidos se ha visto facilitado por su tendencia a fotografiarse con material bélico (fusiles de asalto, artefactos y dispositivos explosivos) y colgar dichas imágenes en las redes sociales. Fuentes policiales indican que otro grupo de jóvenes españoles, igualmente de tendencia prorrusa y vinculados a movimientos comunistas, estaban preparando su salto a Ucrania.
La nota facilitada por Interior precisa: "Durante su estancia en territorio ucraniano, además de la presunta comisión de delitos de cooperación o complicidad en asesinatos y homicidios llevados a cabo por los grupos y batallones a los que se unieron, hay que añadir la tenencia y depósito de armas y explosivos, hechos que han difundido también a través de las redes sociales y con repercusión en la captación y reclutamiento de futuros combatientes".
La operación es similar a las que se están desarrollando en otros países de Europa para evitar el envío de combatientes y desmovilizar a quienes se lo estén pensando. Sin embargo, Interior asegura: "Se trata de la primera operación policial llevada a cabo en Europa contra las actividades de los combatientes extranjeros en el conflicto ucraniano".
Las fuentes afirman que la comunidad internacional en la que se apoyaban los ahora detenidos tiene ramificaciones en Alemania, Italia o Francia, entre otros países. De todos ellos han partido combatientes hacia Ucrania, algunos de ellos a través del llamado Comité de Apoyo a la Ucrania Antifascista.
Asturias es la comunidad más involucrada en el apoyo a los prorrusos de Ucrania. En diciembre del año pasado, por ejemplo, un español armado con un fusil de francotirador, supuestamente integrado en el llamado Batallón Vostok, leía un comunicado de condena al asesinato de Francisco Javier Romero Taboada, Jimmy, natural de A Coruña y seguidor del Deportivo, y simpatizante de movimientos de ultraizquierda.
Esta operación, que culmina diversas investigaciones de la Comisaría General de Información dirigidas por la Fiscalía de la Audiencia Nacional, se está desarrollando en virtud de Diligencias del Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional. La operación continúa abierta.
Un grupo de españoles que se autodefinieron como "anticapitalistas" relataron en septiembre que se habían desplazado al este de Ucrania para combatir junto a los separatistas prorrusos para hacer frente al "resurgimiento del Cuarto Reich en Europa"."Tenemos el honor de comunicaros que las Brigadas Internacionales han vuelto", proclamaban en un comunicado"
Estos jóvenes fundaron la Brigada Internacional Carlos Palomino en homenaje al joven antifascista asesinado en Madrid por un militar de ideología neonazi cuando acudía junto a otros radicales a reventar una manifestación de extrema derecha, que estaba integrada en el momento de su creación por "al menos de diez" españoles procedentes de "varias ciudades del Estado español". El comunicado que colgaron en las redes para anunciar su marcha, cargado de un lenguaje bélico y pretendidamente épico, concluye: "Donbass será la tumba del fascismo. Hoy como ayer ¡No pasarán! ¡Nos vemos en las barricadas!".
Este mismo viernes, cuatro supuestos “voluntarios brasileños”, armados con lanzacohetes y fusiles de asalto rusos, lanzaron a las redes un comunicado de apoyo a los detenidos. Además, varios autodenominados “Comités de solidaridad con la Ucrania antifascista” de Asturias, Cuenca, Zaragoza o Madrid, hicieron manifiestos de apoyo y llamaron a movilizarse por su liberación.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.