Sánchez trata de detener el debate sobre los candidatos a la presidencia

Detrás de una frase aparentemente convencional del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, se esconde una declaración de principios y una recomendación al partido. “No voy a contribuir a hacer ruido”, dijo Sánchez al ser preguntado este miércoles en los pasillos del Congreso sobre si la presidenta andaluza, Susana Díaz, podría barajar dar el salto a la política nacional, después de convocar elecciones anticipadas en Andalucía en marzo.

Susana Díaz seguía este miércoles tarde sin aclarar sus intenciones inmediatas. Afirmó que convocará elecciones autonómicas cuando lo considere necesario por el bien de Andalucía, “se ponga el PP como se ponga, o aquellos que vienen de turismo, como Pablo Iglesias”. Lo dijo en el acto de presentación de la candidata del PSOE a la alcaldía de Córdoba, Isabel Ambrosio.

Cuando Sánchez dice que “no haya ruido”, lo que pretende que es que los dirigentes socialistas eviten las declaraciones sobre este asunto. La dirección federal entiende que alimentar este debate da pábulo a la existencia de un enfrentamiento soterrado en el PSOE. De fondo, estarían las dudas que podría suscitar el liderazgo de Pedro Sánchez, que fue elegido secretario general por los militantes en votación directa el pasado 13 de julio.

Las próximas horas y días serán importantes para constatar si los barones provinciales y regionales siguen el camino marcado por Sánchez de soslayar las cuestiones internas.

Este miércoles sí hubo silencio porque las manifestaciones de Ximo Puig, secretario general de los socialistas valencianos y candidato a la presidencia de esa comunidad, podrían situarse en el campo de la equidistancia: elogió a Susana Díaz, de quien se siente muy cercano, a la vez que mostró su respeto y lealtad “al secretario general”.

Puig calificó a Díaz de “el mayor y más importante referente político del PSOE”, en una línea similar a la expresada en la Cadena SER por el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero. “Susana Díaz ha tenido la oportunidad de contrastarse como gobernante y ha superado la prueba de manera sobresaliente, eso es importante. Pedro Sánchez puede hacerlo también, pero lógicamente ha tenido menos tiempo y no ha tenido la responsabilidad de gobernar, que es completamente distinta”, declaró el expresidente del Gobierno.

Aunque este miércoles ha proclamado su imparcialidad entre los candidatos en el último congreso, Zapatero pensaba que Díaz era la mejor opción para dirigir el PSOE. Finalmente, la líder de los socialistas andaluces no se presentó, pero sí Eduardo Madina, José Antonio Pérez Tapias y Pedro Sánchez, que resultó ganador. ¿Por qué se cuestiona a Sánchez solo seis meses después de ser elegido? “Por la inercia de las cosas”, ha respondido este miércoles Zapatero, reviviendo lo que le ocurrió después de ganar a José Bono en la pugna por la secretaría general del PSOE en el año 2000. En efecto, las dudas sobre su liderazgo estuvieron presentes durante mucho tiempo hasta que ganó las elecciones en 2004. Cuando José Luis Rodríguez Zapatero llegó al palacio de La Moncloa, los resquemores internos desaparecieron.

Zapatero abundó en el halago a Susana Diaz, de quien dijo que es “la mejor gobernante, a mucha distancia de los demás” que tiene España. “Tiene capacidad para gobernar todo lo que la responsabilidad y las circunstancias, que son muy importantes, le pongan por delante”. ¿Y Pedro Sánchez? Esa posibilidad no se ha planteado, pero sí el nuevo líder del PSOE sí ha demostrado “determinación”, según afirmó el expresidente, quien pidió “tiempo al tiempo”.

Tiempo es lo que pretende tener Sánchez y su equipo, al menos, hasta las próximas elecciones generales. Está por ver si el PSOE andaluz mantiene que el primer examen lo tiene en mayo, con las elecciones autonómicas y municipales, aunque él no se presente.