Sáenz de Santamaría pide que España tenga “peso” en la Comisión

Las negociaciones para cuadrar la nueva Comisión Europea marcarán el peso que España logre en el reparto de poder. Mientras se instala en el Gobierno y el PP el temor a que finalmente Miguel Arias Cañete no obtenga la deseada cartera económica relevante por la que lucha el Ejecutivo y que el puesto para Luis de Guindos como presidente del Eurogrupo se retrase un año más, la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, reclamó este viernes que España logre ese puesto “de peso” en la Comisión como reconocimiento a los esfuerzos que ha hecho durante la crisis y a sus reformas.

“[Jean-Claude] Juncker tiene libertad para formar su gobierno, pero España tiene un peso no solo por su trayectoria histórica y su población, sino porque es el país que está encabezando el crecimiento de la zona euro”, aseguró la vicepresidenta en la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros. “Además, ha hecho un programa de reformas reconocido por todos. Trabajaremos para que nuestra representación sea acorde con ese peso y esa trayectoria. Nos lo hemos ganado todos los españoles a pulso con los esfuerzos que hemos hecho durante toda la crisis”, añadió, tras la pregunta de si el Gobierno ya renunciaba a la posibilidad de lograr un peso importante.

La idea de que Arias Cañete tenga que consolarse con la cartera de Innovación ha causado estupor en el PP, tanto que creen que se trata solo de un globo sonda negociador para luego mejorar.

Para Rjoy resulta clave lograr un buen puesto porque uno de los ejes de sus críticas al Ejecutivo del PSOE es que perdió peso en Europa. La idea de que, como todo apunta, Arias Cañete vaya a lograr una comisaría mucho menos importante que la de Competencia que tiene hoy el socialista Joaquín Almunia supone un golpe a esa tesis. Además, bajo el mandato de Rajoy se perdió el puesto en el órgano decisivo del Banco Central Europeo.

Rajoy ha apostado toda su estrategia frente a esa idea a dos puntos: lograr que De Guindos encabece el Eurogrupo y una plaza en el Consejo de Seguridad de la ONU, que se vota en octubre. De Guindos, presente en la rueda de prensa, evitó chocar con el actual presidente, Jeroem Dijsselbloem, quien ha acusado a España de perjudicar al Eurogrupo. Guindos evitó contestarle y no aclaró si confía en lograr el puesto, aunque sea en 2015.