Los accidentes de tráfico más graves

Los humos de una incineradora de basuras, y su consecuente falta de visibilidad, provocaron un accidente múltiple cerca de Aranjuez el 13 de abril de 1984. Siete vecinos de Miguel Esteban (Toledo) que viajaban en el mismo taxi fallecieron al ser embestidos por un camión.

En plena operación retorno, el 31 de agosto de 1984, 11 personas de nacionalidad portuguesa perdieron la vida tras chocar su vehículo con un camión cisterna cerca de Salvatierra (Álava). Las víctimas regresaban de sus vacaciones en Francia.

Un accidente en cadena en Simancas (Valladolid) provocó 13 muertos el 29 de octubre de 1984. Un autocar perdió el control y chocó contra varios vehículos, entre ellos un camión militar. Cinco de las víctimas eran soldados del regimiento de San Quintín.

El 6 de diciembre de 1991 17 personas murieron calcinadas tras una colisión múltiple en la que 25 vehículos se vieron involucrados en la autopista A-8 cerca de Amorebieta (Vizcaya). La niebla cerrada que cubría la carretera esa mañana fue el detonante de uno de los peores accidentes múltiples acontecidos en España.

El 20 de marzo de 2002 ocho personas fallecen en Simancas (Valladolid) tras un choque en cadena de 40 vehículos. La escasa visibilidad debido a la niebla fue la causante de un siniestro que también dejó el balance de más de 40 personas heridas.

El 8 de agosto de 2008, seis personas pierden la vida en un accidente en una carretera que une los pueblos toledanos de Polán y Gálvez. Cinco de los fallecidos pertenecían a una misma familia. Un adelantamiento y una distracción provocaron un choque frontal entre los dos vehículos involucrados.

Seis trabajadores de nacionalidad portuguesa fallecieron el 6 de noviembre de 2008 al chocar su furgoneta contra un camión cerca de la localidad palentina de Torquemada. El vehículo en el que circulaban las víctimas se saltó una mediana y colisionó contra el camión, provocando que los seis ocupantes de la furgoneta fallecieran en el acto.

La A-3, a su paso por Buñol (Valencia), fue el escenario de un accidente en el que perecieron seis personas el 4 de septiembre de 2009. Las víctimas mortales eran trabajadores temporeros rumanos que se dirigían al campo. La furgoneta donde viajaban fue embestida por un camión cuando estaba detenida en el arcén de la autovía.

Un choque frontal entre turismos provocó siete muertos el 11 de septiembre de 2010 en una carretera de la provincia de Badajoz, cerca del municipio de Oliva de Mérida. Un BMW perdió el control en una curva e invadió el carril contrario, lo que provocó una colisión brutal contra un C5. El único superviviente del accidente fue un joven de 14 años que resultó herido grave.

El 11 de agosto de 2012 una furgoneta cayó a un canal en Naveros de Pisuerga (Palencia) y sus seis ocupantes murieron ahogados. Los fallecidos eran del pueblo cercano de Zarzosa del Río Pisuerga y regresaban de las fiestas de un municipio cercano. El puente que cruza el canal está sobre una peligrosa curva que había causado anteriormente 14 muertes.