Navarra rechaza una investigación de la Caja tras el ‘caso Cervera’

El Parlamento de Navarra rechazó ayer, por segunda vez en tres meses, la creación de una comisión de investigación sobre la gestión que ha llevado a la desaparición a Caja Navarra. Los votos de UPN y PSN, hasta hace poco aliados en el Gobierno, derrotaron la iniciativa presentada por Bildu y apoyada por el resto de la oposición, incluido el PP. Lo hicieron con el mismo argumento que han repetido desde que la entidad navarra fue absorbida por Caixabank, valorada en 180 millones: en Caja Navarra no ha pasado nada diferente a lo ocurrido en el resto de las cajas de ahorro, de las que solo sobreviven cuatro.

La coalición abertzale volvió a presentar la iniciativa la pasada semana, después de que reverdeciera la polémica sobre la gestión de la extinta caja a raíz de la detención del exdiputado del PP Santiago Cervera, presunto implicado en un intento de chantaje al presidente de Caja Navarra, José Antonio Asiáin.

El portavoz de Bildu, Koldo Amézketa, recordó en la Cámara foral que fueron el expresidente Miguel Sanz y la actual jefa del Gobierno autonómico, Yolanda Barcina, ambos de UPN, quienes situaron al frente de la caja a Enrique Goñi. Y señaló que, por tanto, son corresponsables de la gestión que la ha llevado a su desaparición como entidad financiera. Amézketa acusó a los gestores de Caja Navarra de haberla utilizado para “clientelismo y negocios personales porque no había que rendir cuentas a nadie”. Puso como ejemplo a Bermer, la empresa que gestionaba la comunicación de la entidad, que facturó, en seis años, 3,5 millones de euros con una plantilla declarada de cuatro personas y sin embargo obtuvo un beneficio después de impuestos de 1,5 millones.

Para Barcina, lo ocurrido en la entidad es responsabilidad “de toda la sociedad”

La presidenta Barcina defendió esta semana la transparencia sobre la gestión de Caja Navarra, pero rechazó la creación de la comisión de investigación porque asegura que la responsabilidad de lo ocurrido es “de toda la sociedad, que estaba representada en el Consejo de Administración”, en referencia a que desde 2010 hay empresarios o miembros de los sindicatos en ese órgano.

Mientras tanto, el líder del PSN, Roberto Jiménez, también ha afirmado que en este asunto no hay nada nuevo “más allá de la detención de un diputado del PP con gorro y bufanda”, en alusión a cómo se produjo hace dos semanas en la muralla de Pamplona la caída en desgracia del exdiputado popular.

Santiago Cervera acudió este viernes al juzgado de instrucción de Pamplona para entregar todos sus aparatos informáticos, tal y como le había ordenado el magistrado que instruye el caso de supuesto chantaje al presidente de Caja Navarra. Cervera entregó una mochila con sus ordenadores portátiles, tabletas y su teléfono móvil, aunque no declaró ante el juez Fermín Otamendi, que lo citará en las próximas semanas.

El exdiputado del PP depositó ayer en el juzgado sus aparatos informáticos

Cervera solicitó personarse en esta investigación judicial, y también lo ha hecho ahora la asociación de consumidores Kontuz. La organización fue citada en la carta de chantaje que Asiáin recibió al inicio del caso y que le llevó a presentar una denuncia ante la Guardia Civil. El portavoz de la asociación, Patxi Zamora, subrayó que la razón para personarse es que desean que se aclare si Asiáin ha utilizado su cargo para beneficiarse a sí mismo o su familia, como indicaba el anónimo que recibió. En ese supuesto, reclamarían su dimisión.

Zamora, portavoz del colectivo que destapó el caso de presunto blanqueo de dinero en Caja Navarra que le costó el cargo al consejero de Bienestar Social, Jesús Pejenaute, reconoció ayer que “es difícil pensar que Cervera” se quisiera vender por 25.000 euros, que es el dinero que alguien reclamó al presidente de la Caja amenazándole con sacar información comprometida en su contra.