Rubalcaba se reencuentra con la dirección andaluza en un acto en Málaga

Los socialistas andaluces van a acudir a las elecciones del próximo 25 de marzo en las peores condiciones posibles. No solo por la brutal crisis económica, el fraude del caso de los ERE y la evidente pérdida de apoyo electoral testada en los dos comicios hasta ahora celebrados: los municipales del 22 de mayo y los generales del pasado mes de noviembre. En ambos casos, el PP ganó en el conjunto de la comunidad. A todas esas circunstancias, unen otra más, surgida hace apenas dos semanas, con motivo del 38º congreso federal. La división interna de los socialistas andaluces, que va a hacer que muchos hagan la campaña con los brazos cruzados y a medio gas. En Sevilla, además, con una gestora.

La situación de deterioro es peor que hace una semana, cuando se celebró el congreso federal, y hace siete días era peor que la semana anterior, cuando fueron elegidos en un ambiente de fuerte división los delegados al cónclave federal. “¿Quién va a hacer campaña electoral en las provincias?”, se preguntaba un dirigente regional, perplejo ante la descomposición de la federación andaluza. El estado de ánimo de los dirigentes está en situación crítica y si hace poco algunos pensaban que había “una remota posibilidad” de remontar por las duras medidas del Gobierno del PP, ahora ya son muchos los que consideran “imposible” esa misión.

Después del acuerdo alcanzado sobre las listas y del posado de los miembros de la comisión regional de candidaturas para visualizar que están todos juntos, los socialistas se lanzarán a decir que con el acuerdo Andalucía “sale fortalecida porque tenemos candidatos potentes” y que han dado un ejemplo de democracia interna, como aseguró Susana Díaz.

A esta foto de presunta unidad le seguirá hoy la del comité director. También el sábado está previsto que el secretario general, Alfredo Pérez Rubalcaba, participe en Málaga en una convención sobre el programa electoral junto con Griñán. La dirección federal no ha querido inmiscuirse más de la cuenta en las listas andaluzas y ha dejado la responsabilidad de lo que pase el 25-M en manos de Griñán.

Algunos dirigentes socialistas no han tenido más remedio que verbalizar que los comicios se presentan muy complicados para sus intereses. El secretario de Política Institucional y Autonómica del PSOE, Antonio Hernando, reconoció ayer que el partido tiene en Andalucía "un lío" que es "muy negativo" para los socialistas, aunque confió en que se resuelva cuanto antes. Hernando afirmó además que no cree que el presidente andaluz, José Antonio Griñán, "haya participado" en el proceso de elaboración de listas para las elecciones autonómicas que ha desencadenado la crisis.

"Lo cierto es que tenemos un lío y eso es mejor reconocerlo, y además es muy negativo para nosotros porque si hay algo que los ciudadanos castigan es que los partidos tengamos líos internos", declaró en una entrevista en el canal 24 horas de TVE.