De pivote de balonmano a voz de Amaiur
Errekondo fue compañero de Urdangarin en la selección y alcalde de Usurbil por ANV
Nada más salir elegido alcalde de Usurbil (Gipuzkoa, unos 6.000 habitantes) por ANV en mayo de 2007, Xabier Mikel Errekondo concedió una entrevista a EL PAÍS para su edición nacional, pero el contenido no llegó a los lectores. “O se publica en euskera o nada”, puso como condición innegociable. Entonces se negó a condenar los atentados de ETA. El actual portavoz de Amaiur en el Congreso, nacido en Usurbil en 1964, saltó la semana pasada a la portada de todos los periódicos de España tras su afable encuentro con el Rey, figura tan denostada por la izquierda abertzale.
Antes de adentrarse en la política, Errekondo ya dejó al descubierto sus afinidades ideológicas. En 2005 firmó el manifiesto de Ibaeta de apoyo a presos de ETA. Ya como alcalde, en 2008 se negó a debatir una moción de EA —integrante de Amaiur— para condenar el ataque contra la sede de este partido en su municipio. El año pasado asistió a una manifestación en protesta por la muerte del etarra Jon Anza, cuyo cadáver fue localizado en una morgue de Toulouse (Francia) tras más de 10 meses desaparecido.
El fornido diputado de Amaiur, jugador de balonmano profesional durante 15 temporadas y nueve veces internacional con España, llevará la portavocía de los soberanistas tras jugar un papel secundario en la campaña. Fue tercero en la lista de Gipuzkoa y logró el acta por apenas 1.495 votos de ventaja sobre el PNV. Pero de repente, será la voz de Amaiur en la Cámara Baja, asegura un representante de la coalición, porque “habla muy bien y es grande e impone mucho”.
La vena política de Errekondo viene “de lejos” y “de familia”. Su hermana Garbiñe es diputada de Función Pública del gabinete que preside Martin Garitano, de Bildu, y su hermano Iñaki Mirena fue condenado a cuatro años de cárcel por colaborar con ETA.
En su etapa como alcalde (2007-2011), se distinguió por su oposición a la construcción de una incineradora junto a su pueblo. Vecinos suyos aseguran que algunos terrenos expropiados para erigir la planta de combustión pertenecían a miembros de su familia. Errekondo trató de impedir que este proyecto fuera adelante implantando el polémico sistema de recogida de basura puerta a puerta, consistente en dejar los desechos en plena calle en unos colgadores personalizados.
Cuando jugaba a balonmano —terminó su carrera en 2002—, Errekondo era Recondo, o Xabier Mikel a secas. Era un mediocre lateral izquierdo que acabó siendo un buen pivote en los equipos en que militó: Bidasoa de Irún, Teka de Santander, San Antonio de Pamplona, Ciudad Real y Ademar León. Defendió los colores de España en el Mundial de Suecia de 1993, compartiendo vestuario con Iñaki Urdangarin. Aquella defensa que hizo de la enseña nacional choca con la animadversión que muestra hoy por todo lo relacionado con España.
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