La fiscalía investigará el acto de Alsasua que vinculaba al Rey con los nazis

El ministro de Justicia, Francisco Caamaño, ha avisado hoy de que la fiscalía investigará el acto del pasado día 3 de septiembre celebrado en la localidad navarra de Alsasua, gobernada por Bildu, donde la asociación juvenil Gazte Asanblada parodió al Rey, al Cuerpo Nacional de Policía, a la Policía Foral y a la Guardia Civil en un desfile en el que se les comparaba con el régimen nazi.

"A parte del mal gusto y de que al final no está resultando ser más que una parodia de sí mismo lo que tenemos que seguir haciendo los demócratas es actuar con la ley, analizando los hechos y, si se ha producido violación de la ley, actuar desde el Estado de Derecho", ha señalado el responsable de Justicia en una entrevista en RNE.

Varios vecinos de Alsasua, que estos días celebra sus fiestas patronales, decidieron hacer, en un edificio municipal, esta particular y ácida crítica de los símbolos del Estado y lo grabaron en vídeo para colgarlo después en Youtube. Su objetivo: denunciar la "presión policial".

En concreto, en las imágenes se puede ver un desfile con un imitador del Rey, ataviado con su uniforme de gala y situado junto a una bandera nazi y un crucifijo con una muñeca hinchable. “Gracias a ellos [los cuerpos policiales] todas las salidas y entradas del pueblo están bien vigiladas, todos los bares están controlados y la casa de la Juventud está controlada día y noche”, asegura el falso monarca en el vídeo. Y añade: “Tenemos el derecho de mantener al pueblo reprimiendo y excluyendo a todos esos bárbaros libre prensadores, que creen que pueden gobernarse por ellos mismos”.

El acto pedía la salida de todos los cuerpos policiales, y concluyó con una gran pancarta desplegada por dos encapuchados que se descolgaron por un edificio en la que se decía "Que se vayan a hacer ostias”.

Asimismo, en el video se indica que a las fuerzas de seguridad "ni se les quiere ni se les necesita" y critican la "asfixiante presencia de los distintos cuerpos policiales". "Este acto es una parodia, pero se acerca bastante a la realidad en la que vivimos. Puede ser una exageración, o puede ser la muestra de un futuro negro que nos espera. Ninguno de nosotros quisiéramos conocerlo. De todos depende. Si seguimos luchando, conseguiremos echarlos de una vez por todas", indican los organizadores.