El ‘síndic’ pide que se expediente a los policías que cargaron en plaza Catalunya

Las imágenes de los Mossos d’Esquadra interviniendo en la plaza de Catalunya de Barcelona el 27 de mayo, ocupada por los indignados, demuestran que “hubo agentes que actuaron de una manera desproporcionada, utilizando la fuerza física de manera desmesurada”. Así lo recoge el informe presentado ayer por el Síndic de Greuges (equivalente al defensor del pueblo), Rafael Ribó. En un duro escrito, de 18 páginas, Ribó sugirió al consejero de Interior, Felip Puig (CiU), que reflexione, investigue y expediente a los que se excedieron en el uso de la fuerza. La operación policial acabó con 121 heridos (37 de ellos mossos).

Con su investigación de oficio, Ribó concluye que tanto en la plaza de Catalunya como en el cerco Parlamento catalán por parte de los indignados, el pasado 15 de junio, los dispositivos policiales fueron ineficaces: por exceso y por defecto. El defensor tildó de “disparatada” la situación del presidente de la Generalitat, Artur Mas, y 31 autoridades más llegando a la Cámara en helicóptero. Otras 50 lo hicieron en furgones policiales. En el Parlamento “no se vio una respuesta al input recibido”, se quejó Ribó, en referencia a la actuación de los mossos. Y criticó que la policía no dispersase a la decena de personas que impidieron que tres caravanas de coches oficiales accediesen a la Cámara.

El defensor ha recibido 394 quejas, la mayoría (391) por la actuación policial en la plaza de Catalunya. En su exposición, después de entregar el informe a la presidenta del Parlamento catalán, Núria de Gispert, arremetió contra Puig. “No se puede aceptar, como afirmó el responsable del Departamento de Interior, que las agresiones sucedidas se tengan que considerar solo como ‘alguna pequeña incidencia”, lamentó, en referencia al cerco al Parlamento. Para Ribó, es algo “muy grave”, que no debe relativizarse. Por eso apoyó que los responsables respondan penalmente (hay un proceso judicial abierto).

Ribó negó también categóricamente que de su investigación se desprenda que hubo violentos en la plaza de Catalunya que alentasen las cargas policiales, como afirmó Puig en sede parlamentaria. “No tenemos constancia, ni una sola”, sentenció. Ribó, en cambio, señaló la descoordinación entre Guardia Urbana y Mossos d’Esquadra, admitida por el propio consejero.

El defensor pidió también que los agentes antidisturbios vayan identificados, como marca la ley. Algo que sistemáticamente se incumple en Cataluña. Ribó solicitó una solución rápida al hecho de que los chalecos de defensa que se colocan los Mossos d’Esquadra oculten su identificación.