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Mas revela que CiU no habría apoyado en solitario la negociación de los convenios

"Le dijimos al Gobierno que no podíamos asumir aparecer como los únicos salvadores" Mas ha asegurado que la reforma de la negociación colectiva "era una oportunidad de oro"

El presidente de la Generalitat, Artur Mas.
El presidente de la Generalitat, Artur Mas.EFE

El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha revelado hoy en Barcelona que CiU no pensaba asumir el coste político de apoyar en solitario con su abstención la reforma de la negociación colectiva que se votó la pasada semana en el Congreso.

"En ese momento hemos tenido muchas dudas. Tantas, que a pocas horas de la votación le dijimos al Gobierno que solos no estaríamos. Que si teníamos que aparecer solos salvando a este Gobierno no lo podíamos asumir", ha explicado Mas a preguntas del público en un almuerzo organizado por la firma de auditoría PriceWaterhouseCoopers.

Mas ha explicado que la abstención de CiU finalmente se produjo porque "al final el partido socialista convenció al PNV de que se abstuviese y en ese momento si nosotros votábamos en contra ya no suponía el final de la legislatura".

"Entonces era mejor abstenerse con un propósito: que la reforma de negociación colectiva se pueda mejorar en su tramitación. Y nosotros tenemos una batería de propuestas en la línea de aumentar la flexibilidad", ha justificado Artur Mas.

El presidente catalán ha asegurado que, una vez obtenida la neutralidad del PNV, "la legislatura hubiera continuado igual, por lo que no tenía sentido haber votado que 'no' cuando en la tramitación tenemos la oportunidad de mejorar las cosas".

Para Mas, la reforma de la negociación colectiva "es una ocasión de oro. Le hemos dicho al Gobierno que sea valiente. Y si en este ámbito hay ganas de tener coraje pensando en crear puestos de trabajo, no en favorecer a gente con poder, entonces sí que van a tener nuestro voto positivo".

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Mas ha dado estas explicaciones para responder a la pregunta de uno de los empresarios presentes en la conferencia, que ha reprochado a CiU que se estaba dando apoyo a un Gobierno agónico.

Sin embargo, Mas ha reconocido que en esta ocasión en CiU se ha dudado mucho, "mucho más que hace un año, en mayo del 2010, cuando salvamos una situación terriblemente complicada, con la economía española a punto de entrar en un caos total".

"Entonces, en lugar de hacer caer un Gobierno decidimos mantener no tanto al Gobierno sino al sistema económico, que no tenía por qué caer en el precipicio, como le ha pasado a otras economías europeas", ha defendido el presidente catalán.

A lo largo de su charla, Artur Mas ha defendido que el momento económico precisa de la colaboración del ámbito privado para dar el mismo nivel de servicios, tanto en las infraestructuras, por ejemplo en la privatización del El Prat, como en impulsar una red de guarderías concertadas.

Mas también ha desvelado que al principio, cuando la Generalitat solicitaba la privatización de la gestión de El Prat, la respuesta que recibían era: "A vosotros ya os lo daríamos esto de los aeropuertos -ha dicho-, pero no se lo vamos a dar a Esperanza Aguirre".

"Pero éste es un terreno en el que se está avanzando y por primera vez en un unos meses habrá dos grandes aeropuertos, entre ellos el de El Prat, que saldrán a concesión", ha detallado.

Artur Mas ha apuntado "si este proceso acaba bien, las instituciones catalanas tendrán una mayoría en el control de esta concesión. Y un privado tendrá la gestión operativa del aeropuerto y, por tanto, ésta se podrá hacer en abierta competencia".

El presidente catalán ha ejemplificado así "los terrenos en los que hay una gran oportunidad de colaboración entre público y privado" y ha señalado además que Cataluña dispone de una tradición en este sentido que resulta muy favorable, "ya que estamos rodeados de territorios donde el Estado lo ha sido todo o casi todo".

Sin embargo, Mas ha dicho que hay espacios donde esta colaboración no es posible y ha puesto de ejemplo las fuerzas de seguridad, que han de ser monopolio del Estado. Esto no se puede compartir".

"Pero no podemos pervertir las prioridades. Los poderes públicos tienen encargada la fuerza y esta fuerza se delega en la policía", ha descrito Mas que se ha mostrado profundamente convencido de este concepto.

El presidente catalán ha lamentado que "esto está muy cuestionado en este momento. Aquí, cuando actúa la policía parece que actúan los malos y que cuando los otros se defienden de la policía son los buenos. Y esto es una alteración de los valores. Esta perversión no puede ser".

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