Puig anuncia más Mossos contra los antisistema

El consejero catalán de Interior, Felip Puig, ha asegurado esta mañana que está aumentando el número de agentes de la Brigada Móvil, los conocidos antidisturbios. Puig se ha referido a un "nuevo orden económico, social y de estructura institucional" que conlleva también un cambio "del modelo de seguridad, de orden público". El consejero catalán comparece esta mañana en el Parlamento para explicar el operativo policial del pasado miércoles 15 de junio, que acabó una docena de diputados y trabajadores agredidos y con el presidente de la Generalitat, Artur Mas, llegando a la Cámara en helicóptero junto a varios consejeros y diputados.

Puig ha defendido que no existe la "perfección" en las operaciones policiales de este tipo. Pero ha mantenido que se cumplieron los objetivos: que se pudiese llevar a cabo la sesión parlamentaria y nadie acampase en el parque de la Ciutadella el día antes. Puig ha arremetido de nuevo contra el movimiento del 15-M, al que ha calificado de "tropa de infantería", que ha servido a algunos violentos para "enmascararse". "Usted consiguió extender y radicalizar" el movimiento de los indignados, le ha contestado el diputado del PSC, Joaquim Llena, a Puig, en referencia a la carga policial en la plaza el pasado 27 de mayo. "Yo habría renunciado por dignidad al cargo", le ha dicho.

La oposición ha criticado que no se dieron instrucciones a los diputados de cómo llegar de "forma segura" al parlamento. Y han acusado al consejero de "improvisación". El ecosocialista Jaume Bosch ha sido el único hasta el momento en pedir la dimisión del consejero.

En su intervención, Puig ha dibujado una Barcelona azotada por algunos violentos, que bien por cuestiones de diversión o bien por cuestiones políticas, se dedican a provocar altercados de forma intermitente. Para combatirlo, ha anunciado una unidad específica de obtención de pruebas e instrucción de atestados para perseguir "con más eficacia" a los antisistema.