Al rescate de 3.000 almas olvidadas
Desde que en 1990 la ley obligase a todo constructor a incluir arqueólogos en sus equipos, muchos de los grandes hallazgos en Londres se han hecho de la mano de constructoras
Desde que en 1990 la ley obligase a todo constructor a incluir arqueólogos en sus equipos, muchos de los grandes hallazgos en Londres se han hecho de la mano de constructoras