El ritmo de vacunación en México cae en las dos últimas semanas a pesar de la disponibilidad de dosis
López Obrador lo achaca a la disminución de la llegada de vacunas contra la covid-19 y critica a quienes relacionan los días récord de principios de junio con las elecciones: “Es mala fe”
El ritmo en las vacunaciones contra la covid-19 ha bajado en las últimas dos semanas en México. El presidente del Gobierno lo ha reconocido este viernes en su conferencia matutina y lo ha achacado a la disminución del arribo de dosis al país, pero ese dato no puede explicar por sí solo la ralentización, puesto que hay un remanente de más de 10 millones de vacunas, si se tienen en cuenta los datos oficiales: se han puesto ya 38,6 millones de dosis, pero el volumen total de dosis llegadas al país es de 49,06 millones. “Hay disponibilidad”, ha dicho Andrés Manuel López Obrador, “pero podemos demostrar que han llegado menos vacunas”. Y acto seguido ha mostrado una gráfica en la que se aprecia esa caída.
En la semana del 17 al 23 de mayo México contó con 5,01 millones de dosis nuevas, entre las que llegaron y las que fueron liberadas de los laboratorios propios. La semana siguiente la cifra aumentó: 5,7 millones más. Después, la reducción ha sido significativa. En la semana del 31 de mayo al 6 de junio, cuando se celebraron elecciones, se recibieron 3,4 millones de dosis y las dos siguientes, hasta hoy, 2,8 millones cada una. Vacunas hay, en todo caso, antes y ahora. Es lo errático en la velocidad de aplicación lo que no cuenta con una explicación oficial, por ahora.
El presidente se ha molestado esta mañana porque los algún medio de comunicación ha relacionado estos datos con la proximidad de las elecciones del 6 de junio. Lo ha calificado de “mala fe”. Un escrutinio día a día de las vacunas aplicadas a la población desde el 20 de mayo hasta la fecha, presenta cuatro picos muy señalados, los que corresponden a los días 2, 3 y 4 de junio. Los reportes oficiales señalan cifras récord en esos días, con 816.380 posturas el día 2, más de un millón el día 3 y 901.000 el día 4. A partir de ahí, ha ido bajando la intensidad.
En paralelo, hay un plan especial para inmunizar a la población fronteriza con Estados Unidos, aprovechando un cargamento de 1,3 millones de dosis Jannsen donado por dicho país que se destinará en exclusiva a la Baja California. La idea es que toda la población mayor de 18 años esté vacunada en 10 días y el plan avanza a buen ritmo, a decir de la secretaria de Seguridad, Rosa Icela Rodríguez, quien se ha encargado de dar el reporte en la conferencia. El propósito es que toda la frontera norte de México quede protegida para reabrir cuanto antes el tránsito de personas entre ambos países, una zona de alto valor comercial. Economía y salud siguen yendo de la mano como las mayores preocupaciones derivadas de esta pandemia.
El Gobierno ha ensalzado la campaña de vacunación en este país como uno de los grandes logros contra el virus, que ha dejado ya 230,792 defunciones y aún hay más de 26.000 personas con la enfermedad activa. De hecho, México ha donado 400.000 dosis a Belice, Bolivia y Paraguay y se han enviado 800.000 a Argentina, como parte del acuerdo entre ambos países para producir y envasar el biológico.
López Obrador ha asegurado este viernes que los planes previstos para que en octubre esté inmunizado el total de la población prevista, al menos con una primera dosis, siguen en pie. Y el día anterior aseguró que no se debe un solo peso a las compañías farmacéuticas por la compra de los biológicos. La Administración mexicana ha contratado más de 250 millones de dosis con seis laboratorios, lo que supone la aplicación de la vacuna a unos 130 millones de personas. “El aumento de los contagios está relacionado con el clima y no queremos que llegue el periodo de lluvias y el invierno y que se active de nuevo la pandemia. Trabajamos en eso”, ha dicho.
Preguntado por una periodista sobre si se han usado todas las vacunas disponibles ha contestado que “sí, todas”. No es cierto, puesto que hay ese remanente de 10 millones, pero el presidente ha matizado que “están en tránsito en los distintos Estados”. Además, ha anunciado que habrá una reunión con los responsables sanitarios de todas las entidades para “reforzar el plan de vacunación”.
La Ciudad de México, por su característica poblacional una de las más afectadas por la pandemia, se mantiene en semáforo verde, a pesar de que algunos expertos señalan que sus datos podrían situarla de nuevo en el amarillo. Este viernes se ha anunciado un paso más en la relajación de las medidas aplicadas hasta ahora para controlar los contagios, aumentando el aforo en determinados lugares de ocio. Baja California, Tabasco, Quintana Roo y Yucatán, los territorios más turísticos están en semáforo naranja, es decir, riesgo alto. Las autoridades sanitarias han recomendado que se extremen las precauciones en esas zonas. Nueve Estados más tienen el amarillo. El resto luce verde.
Suscríbase aquí a la newsletter de EL PAÍS México y reciba todas las claves informativas de la actualidad de este país
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.