El dengue rompe el récord histórico en América con más de 12,6 millones de casos en 2024

El dengue ha roto cualquier registro histórico en el continente americano. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) ha anunciado este martes que la región ha superado los 12,6 millones de casos para este 2024, esto es el triple de los 4,5 millones de contagios del año pasado, que ya se habían establecido como récord. El director de la OPS, Jarbas Barbosa, ha señalado que el continente se enfrenta a la “epidemia más grande” de la enfermedad desde que empezaron a contabilizarse los casos en 1980. El doctor apunta al cambio en los fenómenos climáticos, a la urbanización no planificada o al mal manejo de residuos como los factores claves que están detrás de esta expansión descontrolada de mosquitos.

Las cifras insisten: el dengue está desangrando América. En panorámica, esta enfermedad ha pasado de causar 683 muertos en 2014, a 2.467 en 2023 hasta los 7.713 de este año. Igual que las defunciones, los casos se han multiplicado por 10 en una década, pero la distribución no ha sido pareja, sino que los contagios se han acelerado en estos últimos 12 meses. El incremento se da en la mayoría de los países del continente, pero en ninguno se alcanzan los números de Brasil. El país registra por sí solo 10 millones de casos y 5.870 de defunciones, esto es casi el 80% de los contagios y muertes de toda la región. Además, la letalidad es altísima, según las cifras de la OPS, porque fallecieron el 75% de los 7.900 pacientes a los que se diagnosticó dengue grave. El Estado, dirigido por Lula Da Silva, ha introducido este año una nueva vacuna pública para tratar de hacer frente a la enfermedad.

La misma medida ha tomado Argentina, que ha registrado el brote más letal de su historia. El país apenas registraba muertos por la picadura del Aedes aegypti hasta que llegaron a 75 el año pasado, pero ya han superado los 400 decesos este 2024. Los contagios, además, sobrepasan los 581.000 para sus 46 millones de habitantes; son más que los que registra, por ejemplo, México, que tiene el triple de población. En el país centroamericano, la OPS identifica casi 520.000 contagios y 303 muertos. Además, los mosquitos están llegando a zonas del norte de México a las que no habían llegado nunca. “Esta situación se debe a un conjunto de factores climáticos, de mutaciones propias de los mosquitos, pero también porque los Gobiernos han dejado de hacer su control vectorial, como la fumigación”, explicaba a EL PAÍS el virólogo Luis del Carpio.

El siguiente país del continente con más fallecidos es Perú, que registra 257 para 275.000 casos. Sin embargo, esto supone una gran reducción en comparación con 2023, cuando con el mismo número de contagios, los muertos llegaron a 441. Una tendencia similar se ha registrado en la región del Caribe, donde han conseguido reducir los fallecidos de 127 a 45 para prácticamente el mismo número de casos. Sí se han duplicado en un año los decesos en Colombia, que roza los 200 para más de 300.000 contagios (el triple que en 2023).

Hay pocos oasis contra estos mosquitos en el continente. En Chile ha sido noticia su entrada este año, pero no se identifican casos graves ni letales; y lo mismo en Estados Unidos, donde se registran casi 2.700 contagios (frente a los 156 del año pasado), pero sin fallecidos. “La mayor parte de los casos han sido importados por personas que han viajado, aunque se ha informado un grado de transmisión local limitada en Florida, Hawái, Texas, Arizona y California”, ha explicado Barbosa este martes.

“Este aumento del número de casos está asociado directamente con fenómenos climáticos, como sequías, inundaciones y temperaturas más cálidas que favorecen la proliferación de criaderos de mosquitos”, ha dicho el director de la OPS, “el rápido crecimiento poblacional, la urbanización no planificada y las condiciones de vida deficientes en las que el suministro de agua, los servicios sanitarios y el mal manejo de residuos también están favoreciendo la propagación”. Barbosa, además, ha destacado que el dengue también está representando un riesgo mayor de lo normal para la población infantil. Los menores de 15 años han representado más de un tercio de los casos de dengue en Costa Rica, México y Paraguay. En Guatemala, por ejemplo, el 70% de las muertes por esta enfermedad ha ocurrido entre la población infantil.