Esqueletos, luces y una ofrenda monumental: el Zócalo de Ciudad de México se transforma para el Día de Muertos
El corazón de la ciudad se convierte en el epicentro de una celebración que, además de ser una tradición, representa una importante oportunidad turística para la capital, que registra más del 80% de ocupación hotelera
El Zócalo de Ciudad de México se transforma desde el 30 de octubre hasta el 3 de noviembre con esqueletos monumentales, luces temáticas y un desfile para celebrar el Día de Muertos, convirtiéndose en el epicentro de una festividad que atrae a turistas nacionales e internacionales.
La primera ofrenda monumental en el Zócalo de la ciudad se hizo en 2005, pero hoy el Día de Muertos es una de las celebraciones más importantes para el turismo en la capital. Según Alejandra Frausto Guerrero, secretaria de Turismo de Ciudad de México, en 2024 se registró un incremento del 10% en la ocupación hotelera respecto a 2023 y se espera una derrama económica superior a los 2.000 millones de pesos.
Megaofrenda en el Zócalo
La megaofrenda de 2023 atrajo a un millón de personas al Zócalo, y para la edición de 2024 se espera una asistencia aún mayor. Este año, cinco colectivos revisaron 10 propuestas únicas, elogiadas por Ana Francis Mor, secretaria de Cultura de Ciudad de México, y Clara Brugada, la jefa de Gobierno. Finalmente se seleccionó un proyecto del Taller de Arte Xibalbá, con figuras inspiradas en las comparsas o muerteadas de Oaxaca (desfiles teatrales con alusión al Día de Muertos), y en la obra del grabador Eduardo Robledo, originario de Xochimilco.
La noche del 30 de octubre se realizó el encendido de la iluminación temática, con lo que iniciaron las festividades y el paso para la megaofrenda titulada Procesión. Esta instalación artística incluye 21 piezas de cartonería monumental, que van desde los 6 hasta los 17 metros de altura. También cuenta con un espejo de agua de más de 200 metros cuadrados inspirado en Altotonga, Veracruz; dos trajineras; una chinampa monumental y un jardín de cempasúchil con 10.000 plantas de productores de Xochimilco. Más de 100 artistas entre cartoneros, escultores, pintores, soldadores y escenógrafos participaron en el proyecto.
Ana Francis Mor destacó que “resalta el vínculo casi natural entre el arte surrealista y la cultura popular mexicana que constituye la conmemoración del Día de Muertos”. La ofrenda estará abierta al público hasta el 3 de noviembre.
Iluminación del Zócalo
El alumbrado decorativo en la Avenida 20 de Noviembre y en los edificios gubernamentales que rodean al Zócalo complementan este homenaje en la plaza más emblemática del país. El secretario de Obras y Servicios, Raúl Basulto Luviano, presumió las figuras de esqueletos y catrinas creadas por 60 trabajadores de la Dirección de Alumbrado para iluminar los edificios del gobierno capitalino. “Se trabajaron dos conjuntos monumentales; en los extremos se representan dos calaveras cultivando flores de cempasúchil, amarillas y rojas, incluyendo hojas con símbolos de la tierra fértil. Al centro, un mosaico luminoso con una calavera tradicional representando a una catrina surrealista, con una corona de flores”, explicó. La iluminación estará activa entre las 19.00 y las 23.00 horas hasta el 3 de noviembre.
Desfile de Día de Muertos
El desfile de Día de Muertos se llevará a cabo el sábado 2 de noviembre a partir de las 14.00 horas. Esta tradición, iniciada en 2016 y cuyo precursor es el desfile de calaveras en 2014, ya es una de las activaciones más populares, pues tan solo en 2023 registró una asistencia de más de un millón de personas. El recorrido iniciará en la Puerta de los Leones, en Chapultepec, avanzará por Paseo de la Reforma, Avenida Juárez y Cinco de Mayo, para culminar en el Zócalo.
Las autoridades locales informaron que participarán al menos 5.800 personas en 37 contingentes, siete carros alegóricos y 16 comparsas musicales. Tres carros rendirán homenaje a mexicanos destacados por su aniversario luctuoso: la escritora y periodista Rosario Castellanos y la cantante Lucha Reyes, fallecidas hace 50 años, y el pintor David Alfaro Siqueiros, fallecido hace 80 años.
Usualmente el desfile dura entre tres y cuatro horas y media, por lo que se espera que concluya cerca de las 18.30. Media hora después, las luces de la plaza volverán a iluminar los esqueletos monumentales y lo harán durante un día más, hasta el 3 de noviembre, cuando hayan concluido las celebraciones.
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