Romper las cadenas de la polarización y desinformación: las nuevas oportunidades se debaten en el foro entre EL PAÍS y Edelman

Romper las cadenas de la desinformación y la polarización en América Latina constituye un área de oportunidad para las empresas, en un momento en que los niveles de confianza entre los habitantes de la región se encuentran en su punto más bajo. Durante el diálogo La confianza en América Latina, organizado por EL PAÍS y Edelman, expertos en comunicación y política debatieron las principales aristas de la confianza que se percibe en países como México, Argentina, Colombia y Brasil.

De acuerdo con el Índice de confianza 2022, elaborado por Edelman, la confianza que se tiene en el Gobierno y los medios ha disminuido a sus niveles más bajos, mientras que las empresas y las Organizaciones No Gubernamentales (ONG) son las que representan más confianza. “La confianza es el más importante de los vínculos entre las personas y las instituciones, un antídoto contra la indiferencia y la base del éxito continuo de empresas y marcas”, ha dicho Ana Julião, gerente de Edelman Brasil.

La mesa de debate, encabezada por Jan Martínez Ahrens, director de EL PAÍS América, y Sonia Corona, jefa de redacción de EL PAÍS México, abundó en las áreas de oportunidad que tiene el sector privado para generar mensajes de certidumbre en un entorno dominado por la desinformación y las noticias falsas.

Mariana Sanz, directora de Edelman México, mencionó que el diálogo entre los diversos actores de la sociedad se hace complicado cuando se promueven los factores de polarización. “Si todos desde nuestra trinchera nos comprometemos a ser fuentes de información concreta y útil, será un factor para recortar los valores de desconfianza”, comentó.

Varios países de la región se encuentran viviendo procesos democráticos de cara a elecciones que definirán su futuro. En ese sentido, Juanita Barrios, gerente de Edelman Colombia, comenta que el trabajo interinstitucional es clave para remontar los índices de certidumbre en la región. “En la medida en que los ciudadanos no confían a los medios elevados porque los consideran como poco éticos, la complejidad crece, los ciudadanos buscan información en otras fuentes que adicionalmente presentan niveles de desconfianza altos”, comenta.

Finalmente, uno de los retos más importantes para las sociedades latinoamericanas se encuentra en el trabajo que se puede hacer en conjunto entre los sectores público y privado. Para Matías Coudeu de Achaval, director de grupos de Edelman Argentina, se trata de un momento decisivo para construir puentes de diálogo y así romper las cadenas de la desinformación. “Debemos tomar esa información para que haya coordinación entre el sector público y privado para mejorar las condiciones de la confianza en la región y alcanzar nuevos índices”, señala.