Portazo de Exteriores a una candidata a los Nobel de la Paz
La Oficina de Derechos Humanos rechaza a las puertas de sus sede reunirse con la líder uigur exiliada Rebiya Kadeer.- La cita había sido pactada el 26 de abril
El Ministerio de Asuntos Exteriores negó ayer la entrada a la Oficina de Derechos Humanos a la líder uigur exiliada Rebiya Kadeer minutos antes de que se produjese una reunión pactada el pasado día 26 de abril. Según informa la ONG Amnistía Internacional, que acoge estos día a Kadeer en su visita por España, un funcionario informó a una delegación de la organización que según las "instrucciones" recibidas no podía permitir el acceso para la celebración del encuentro con el director del departamento Juan Duarte. Kadeer ha realizado esta semana una breve gira por ciudades españolas tras reunirse con parlamentarios europeos en Bruselas. Tras la cita fallida de ayer, la líder de la comunidad uigur, que puebla la región china occidental de Xinjiang, ha volado de vuelta a Virginia (EE UU) donde reside desde que abandonase Pekín en 2005 tras más de cinco años en prisión.
El portazo de Exteriores, que hasta el momento no ha informado sobre el incidente, coincide con las declaraciones hechas ayer por la portavoz de Exteriores china, Jiang Yu, quien instaba a la comunidad internacional a no dar facilidades a "actividades antichinas y separatistas", según recoge la agencia EFE. Yu, en alusión a la visita de Kadeer a España, insistió en que "perjudica los intereses chinos" y advirtió de que mantener contactos con ella podría entorpecer las "relaciones bilaterales con China". Rebiya Kadeer ha sonado en la carrera hacia el Premio Nobel de la Paz en varias ocasiones, aunque fue en 2006 cuando su candidatura llegó a la recta final que a la postre atravesó galardonado el bangladeshí Mohamed Yunus.
Kadeer, de 63 años, presidenta de la Conferencia Mundial Uigur y de la Asociación Americana Uigur, ingresó en una prisión china en agosto de 1999 momentos antes de recibir a una delegación del Congreso estadounidense para hablar de derechos humanos. Dos años antes, Kadeer había fundado el Movimiento de las Mil Madres para redirigir su fortuna (séptima en China y primera en Xinjiang) al auxilio de lo que denuncia como "brutal" represión de Pekín hacia la minoría a la que pertenece. En julio de 2009, enfrentamientos en Urumqi (capital de Xinjiang) entre uigures -un 45% de la población en esa región- y chinos de la etnia han -40% en Xinjiang, pero mayoría en China- causó la muerte de dos centenares de personas. Las autoridades de Pekín responsabilizaron a Kadeer de soliviantar a su comunidad hacia la violencia.
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