_
_
_
_

EE UU acusa a cinco agentes de Blackwater de 14 homicidios y otros cargos

Los ex vigilantes se han entregado a las autoridades en la ciudad de Salt Lake City, Utah, donde podría celebrarse el juicio

El gobierno de Estados Unidos ha acusado este lunes a cinco guardias de seguridad de la empresa Blackwater Worldwide de la muerte de 14 civiles y heridas a otros 20 durante un tiroteo en el centro de Bagdad en septiembre de 2007. Los cinco ex soldados se han entregado a las autoridades en la ciudad de Salt Lake City, Utah, donde podría celebrarse el juicio. En caso de ser hallados culpables, los acusados podrían ser condenados a 10 años de prisión por cada acusación de homicidio, más tiempo adicional por los otros cargos de intento de homicidio (hasta seis años) y uso de armas de guerra para cometer homicidio (hasta ocho años).

Un sexto miembro del grupo ya se ha declarado culpable de homicidio en un acuerdo negociado con la fiscalía. Según el Departamento de Justicia los vigilantes privados, que formaban parte de un convoy de vehículos blindados, usaron la táctica militar conocida como fuego de supresión en una intersección de Bagdad, el 16 de septiembre de 2007. Según el gobierno, los agentes privados usaron ametralladoras y lanzagranadas contra civiles en las calles de la capital iraquí. Como resultado, murieron 17 civiles, entre ellos varios niños.

Los cinco guardias de seguridad privada han llegado al edificio del tribunal federal acompañados por sus abogados, y han sido recibidos por decenas de periodistas, a quienes no quisieron hacer declaraciones.

La firma Blackwater sostiene que sus seis empleados dispararon después de que fueron atacados, en defensa propia. Una investigación del gobierno iraquí concluyó que los agentes abrieron fuego contra la multitud sin motivo ni provocación, en tanto que otra investigación militar estadounidense desveló que los agentes de seguridad fueron los únicos que abrieron fuego en ese tiroteo.

Este incidente sacó a la luz pública el papel de las empresas de seguridad subcontratadas por el Departamento de Estado, y puso en tela de juicio la presunta inmunidad con que operaban en Irak. Fuentes allegadas al caso señalaron a la prensa estadounidense que los mercenarios eligieron entregarse en Salt Lake City, donde vive uno de ellos Donald Ball, porque podrían obtener un jurado más conservador que en Washington, la capital de EE UU donde fueron acusados.

Blackwater Worldwide es una firma estadounidense que emplea, principalmente, ex soldados y ex policías y ofrece guardaespaldas, vigilantes armados, y unidades mercenarias de operaciones tácticas en diversas partes del mundo.

En Irak, además de los casi 150.000 soldados estadounidenses, hay más de 125.000 contratistas privados empleados por decenas de compañías y que dan desde apoyo técnico a servicios de cantina, recogida de residuos, custodia de instalaciones, protección de funcionarios y compañía armada para convoyes.

Los ex guardias de seguridad Nick Slatter, (2do Izq.) y Donald Ball, (3ro Izq.) llegan con sus abogados a un tribunal de Salt Lake City para entregarse a las autoridades de EE UU
Los ex guardias de seguridad Nick Slatter, (2do Izq.) y Donald Ball, (3ro Izq.) llegan con sus abogados a un tribunal de Salt Lake City para entregarse a las autoridades de EE UUREUTERS

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_