López Obrador regresa a la capital mexicana para celebrar la segunda asamblea de su movimiento

El movimiento opositor del ex candidato a la presidencia de México Andrés Manuel López Obrador se enfrenta a una seria prueba con la celebración de la segunda asamblea de la Convención Nacional Democrática (CND), que dio comienzo ayer en la capital mexicana para, entre otras cosas, convocar "movilizaciones ciudadanas si la derecha panista [del gobernante Partido Acción Nacional, PAN]" reforma la Constitución para privatizar la industria petrolera.

La reaparición de López Obrador se produce nueve meses después de que perdiera las elecciones presidenciales frente a Felipe Calderón, derrota que todavía atribuye a un fraude electoral.

Las encuestas reflejan una caída en la popularidad del líder izquierdista, que se ha dedicado a recorrer México como "presidente legítimo" e itinerante, como lo fue Benito Juárez, cuyo natalicio se conmemoró el 21 de marzo. Su poder de convocatoria es un enigma, pero el músculo de los partidos que antes movilizaban a sus simpatizantes parece debilitado.

El encuentro de los seguidores de López Obrador se prolongará hasta el próximo domingo en varios puntos del Centro Histórico de Ciudad de México, especialmente en el Zócalo, la plaza pública considerada el corazón político mexicano, desde donde pretende relanzar una nueva oleada opositora al Gobierno de Calderón, que, después de sus primeros 100 días en el poder, no disfruta de demasiada popularidad en las encuestas de aprobación de su gestión.

López Obrador se proclamó "presidente legítimo" en la primera Convención Nacional Democrática, donde a mano alzada miles de simpatizantes le respaldaron. En las semanas que siguieron a las elecciones presidenciales, el movimiento fue perdiendo fuerza, pero su líder afirma que su poder de convocatoria se mantiene y por ello pide a sus simpatizantes por todos los medios a su alcance que acudan a la Convención "para defender la economía popular".

Los apoyos también han disminuido en el seno de su formación, el Partido de la Revolución Democrática (PRD), y de otros grupos políticos. En una entrevista con el periodista Miguel Ángel Granados Chapa, López Obrador afirmó: "Soy presidente legítimo a mucho orgullo y no estoy a expensas de que me reconozcan o no los dirigentes del Frente Amplio [formado por los partidos que respaldaron su candidatura presidencial], presidentes municipales, gobernadores surgidos de nuestro movimiento". Y recalcó: "No pido lealtad a ciegas".

Reconoció que el respaldo ha bajado, pero dijo considerarlo algo "normal". "Tenemos todos los medios encima, desaparecimos" de un escenario nacional en el cual es "durísimo el intento por destruirnos", argumentó.

Los temas que analizarán los delegados de la asamblea llevan los títulos de La patria no se vende, El derecho a la felicidad, Que se oiga la voz de todos, México es de todos, Un país mejor es posible y Primero es el campo.

El domingo por la mañana, López Obrador encabezará una marcha y hará público un informe a la nación sobre sus primeros meses como "presidente legítimo".