Los equipos de rescate dan por muertos a los 65 mineros mexicanos atrapados desde el domingo

Los dirigentes de la mina de carbón de San Juan Sabinas (norte de México) han anunciado este sábado a los familiares de los 65 mineros atrapados desde el domingo que todos están muertos, según fuentes próximas a una de las víctimas.

Javier García de Quevedo, presidente de la empresa Industrial Minera de México, ha confirmado que no hay supervivientes porque la magnitud de la onda expansiva mató a los trabajadores y que las labores de recuperación de los cuerpos se reanudarán después de que se extraiga el gas metano acumulado y se ventile la mina.

El viernes, los trabajos de rescate se suspendieron después de que se detectaran altos niveles de metano en el interior de la mina que, según las autoridades y la empresa, podrían ocasionar otra explosión y poner en riesgo la vida de los socorristas.

Por su parte, el ministro de Trabajo, Francisco Salazar, manifestó que el próximo lunes se iniciará una investigación exhaustiva para establecer responsabilidades en el accidente.

El gobernador de Coahuila, Humberto Moreira, dijo a la prensa que no abandonaría a los familiares en sus demandas derivadas del siniestro. Moreira explicó que es imposible que haya supervivientes por las altas temperaturas, de hasta 600 grados, que se registró en el habitáculo después de la explosión del domingo, ocasionada por la acumulación de gas grisú.

La explosión ocasionó un derrumbe en la mina donde trabajaban 78 obreros, trece de los cuales resultaron con lesiones de distinta consideración y lograron salir por su propio pie.

Durante casi una semana los familiares de los obreros atrapados habían mantenido la esperanza de hallarlos con vida, pero el viernes sus ilusiones se desvanecieron cuando se anunció la suspensión de las labores de rescate por tres días. Los mineros quedaron atrapados a unos 160 metros de la

superficie.