Los grupos palestinos acuerdan una tregua para 2005 condicionada al cese de ataques israelíes
Sharon saluda la medida como un "primer paso positivo" dentro del acuerdo de paz de Sharm El Sheij.- La declaración conjunta establece además que Israel debe liberar a todos los presos palestinos
"En respuesta a un compromiso israelí de cesar en todas sus agresiones y liberar a todos los presos", trece organizaciones radicales palestinas se han comprometido hoy a "mantener el actual clima de calma durante 2005". El primer ministro de Israel, Ariel Sharon, ha calificado de "primer paso positivo" el acuerdo de tregua arrancado hoy por el presidente palestino, Mahmoud Abbas, aunque ha abogado por el desarme de estos grupos para avanzar en la resolución del conflicto.
Reunidos con Abbas durante 48 horas en un hotel perdido en el desierto a las afueras de la capital egipcia, El Cairo, los representantes de las 13 organizaciones han suscrito el siguiente acuerdo: "Los asistentes han acordado una agenda para 2005 sobre el compromiso de mantener el actual clima de calma, en respuesta a un compromiso israelí de cesar todo tipo de agresiones contra nuestra tierra y contra los palestinos, allá donde puedan estar, y de liberar a todos los presos y detenidos".
La declaración conjunta de tregua —un alto el fuego endeble, puesto que sólo tiene validez para este año y siempre y cuando Israel no lleve a cabo ninguna acción que cualquier facción considere hostil, y sobre todo dando por hecho la muy difícil liberación por su parte de todos los presos palestinos— refuerza a Abbas, que el pasado 8 de febrero puso sobre la mesa en la cumbre del balneario egipcio de Sharm El Sheij con Sharon su compromiso de lograr precisamente este acuerdo. Además, se produce un día después de que el Gobierno israelí traspasara el control y la administración de la ciudad de Jericó (20.000 habitantes, a orillas del río Jordán) a los palestinos, dentro del plan de Sharm El Sheij aunque con un mes y medio de retraso sobre el calendario previsto por las discrepancias entre ambos países sobre cómo llevar a cabo la retirada israelí.
El representante de Hamás, Mohammad Nazzal, ha explicado a los periodistas que "lo que se ha acordado hoy es [un periodo de] calma hasta el final de este año, como plazo máximo en respuesta al compromiso israelí de retirarse de ciudades y liberar a prisioneros". Sin embargo, fuentes del partido Al Fatah —el movimiento oficialista al que pertenece Abbas— y de la organización radical Yihad Islámica han asegurado que la tregua está condicionada a que Israel cumpla con la parte que le han asignado, y que por tanto podría ser cancelada en cualquier momento. "La redacción final no especifica un periodo de tiempo concreto", ha dicho el militante radical de este grupo Anwar Abu Taha.
Un portavoz del Gobierno israelí ha explicado hoy a la agencia de noticias británica Reuters que el primer ministro ha conversado hoy por teléfono con el presidente de Egipto, Hosni Mubarak, y le ha transmitido que "el acuerdo alcanzado en El Cairo es un primer paso positivo". Sharon lo considera un pacto interno entre los palestinos, y cree que el proceso de paz debe avanzar por estos derroteros: "Las organizaciones terroristas no pueden seguir existiendo como grupo armados y desde luego no como organizaciones terroristas", ha dicho el primer ministro, según esta fuente.
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