HONOR 70: el smartphone que reivindica la revolución tecnológica y estética de los setenta

No es casualidad que la gran mayoría de canciones de los setenta hablen de bailes y juventud. De la oposición de Donna Summer de irse a dormir a las noches febriles de los Bee Gees, todos esos temas rompepistas evocan el espíritu de una década en la que absolutamente todo parecía posible. “El futuro se comprende mejor con el oído y se siente con el cuerpo”, comentaría el artista Giorgio Moroder, sobre esos bailes bajo las luces de discoteca y esos movimientos desinhibidos que, junto con la ropa brillante, reivindicaban el derecho a liberarse y divertirse. Porque en los setenta, la idea del futuro, por una vez, parecía posible para todos.

Tampoco es casualidad que HONOR 70, el nuevo modelo de la marca de smartphones, invoque en fondo y forma el espíritu optimista y esperanzador de esa década, más necesario que nunca. Finísimo y minimalista, con las esquinas ligeramente redondeadas, los tres colores en los que está disponible capturan esa estética inconfundible y vibrante que perdura en el imaginario colectivo: negro, verde esmeralda y un acabado de cristal esmerilado, en un guiño a esas refulgentes bolas de espejo. Pero más allá de su espectacular aspecto, se trata también de un móvil de gran rendimiento, con una batería de 4800 mAh6 y una carga realmente rápida (carga un 60% en tan solo 20 minutos), capaz de seguir el ritmo de las noches más frenéticas y registrarlo todo con detalle.

Al fin y al cabo, HONOR 70 es la culminación de la revolución tecnológica que arrancó también en esa década. Las casas empezaron a equiparse con televisiones a color, cambiando para siempre la distribución de los muebles y la forma de ver el mundo; aparecieron los primeros relojes digitales y las calculadoras de formato bolsillo nos parecían el invento del siglo. También los primeros prototipos de ordenadores y móviles datan de esa época. Unos diseños contundentes, con tapas y largas antenas para capturar la señal que, aunque hoy nos parecen el atrezzo de alguna película retrofuturista, dejaban entrever la posibilidad de imaginar otros mundos y materializarlos gracias a la tecnología.

Porque HONOR 70 no es un simple smartphone, es muchas cosas y a su vez, la herramienta para que lo seamos también. Su sistema de cámara triple habría conquistado al mismísimo Bill Bernstein, el mejor testigo de la vida nocturna neoyorquina, la razón por la que sigamos soñando con Studio 54. Todo lo que podría haber narrado con una cámara de profundidad de 2 metros, un sensor Sony IMX800 de 54 megapíxeles y una lente ultra angular de 50 megapíxeles con la que no se nos escapa ni un detalle. En la era del selfie y el contenido inmediato, el frontal también está equipado con la cámara Super Selfie de 32 megapíxeles y Efecto Dual de belleza.

Como aquello que no se cuenta no existe, HONOR 70 está equipado con herramientas de edición como Solo Cut, que nos permite editar y crear piezas audiovisuales para dejar nuestro testimonio para la posteridad. O para revivirlo siempre que queramos, gracias a su pantalla de 6,67 pulgadas con una resolución de 1.07 billones de colores y 4096 niveles de brillo, que nos sumerge en una auténtica experiencia audiovisual.