La actriz Karla Sofía Gascón denuncia a la líder de la extrema derecha francesa Marion Maréchal por un comentario tránsfobo

La actriz española Karla Sofía Gascón (Alcobendas, Madrid, 52 años), protagonista de la película musical Emilia Pérez, de Jacques Audiard, y primera mujer trans en ganar el premio a Mejor Actriz en el Festival de Cannes (junto con las otras protagonistas de la cinta Adriana Paz, Zoe Saldaña y Selena Gomez), ha presentado este miércoles 29 de mayo una denuncia en Francia por ultraje sexista y tránsfobo contra la candidata ultraderechista a eurodiputada Marion Maréchal, que publicó en su cuenta de la red social X (antes conocida como Twitter) que “es un hombre quien ha recibido el premio de interpretación femenina” e insistió en que “el progreso para la izquierda es borrar a las mujeres y a las madres”, el mismo día en que la intérprete recibió el galardón durante la ceremonia de clausura del festival.

“Hay que pararle los pies”, ha subrayado Gascón en declaraciones a la agencia EFE para explicar esta demanda, que va en apoyo de la que el lunes ya formalizaron seis ONG francesas contra Maréchal, de 34 años y quien además es sobrina de Marine Le Pen. Según indican las diferentes organizaciones, presentaron la querella “por haber infringido las leyes de la República al promover el odio y la discriminación”. La actriz transgénero, que se alzó con el prestigioso galardón la noche del 25 de mayo, señaló que ha decidido denunciar a la cabeza de la lista en los comicios europeos del partido ultra Reconquista porque se lo habían pedido estas ONG. De hecho, la intérprete ha precisado que, en caso de que la Justicia francesa imponga a Maréchal algún tipo de sanción económica, el dinero irá a esas asociaciones.

La actriz no se ha mostrado sorprendida por las declaraciones de la política, puesto que ya anticipó este tipo de comentarios en el discurso que dio al recoger su premio. “A todas las personas trans que estamos sufriendo todo el puto día el odio”, dedicó. A ello se ha referido en un comunicado en el que ha explicado la situación y las razones que han llevado a la intérprete a unirse a la demanda: “El día posterior a la entrega del reconocimiento no he parado de recibir comentarios de odio a través de mis redes sociales, mensajes, etc., entre los que se encontraba el de una líder de un partido ultraderechista francés. Seis organizaciones no gubernamentales francesas interpusieron una denuncia por los comentarios de odio que hizo esta señora y, obviamente, me ofrecieron la oportunidad de sumarme a ellas, algo que no puedo dejar pasar por alto, pues no solamente es contra mi persona, sino que afecta a toda la comunidad, que afortunadamente me ha tocado representar”, explicaba en su texto, en el que añadía que “los comentarios de odio, racistas, o cualquier acción violenta contra una minoría denigrada socialmente deben ser enfrentados desde la ley que nos protege”. La actriz también añade que cree que “lo han hecho a propósito” con intención de generar ruido de cara a la campaña para los comicios europeos del 9 de junio. Gascón también ha puntualizado que, aunque ella no está vinculada a ningún partido político, su denuncia la presenta “por responsabilidad social” porque “hay que parar este tipo de cosas”.

Gascón, que informó de su iniciativa al Gobierno español, ha querido también dar una respuesta a las palabras de Maréchal: “El premio lo ha ganado una mujer, con sus defectos y con sus virtudes”. Pero, sobre todo, insiste en que lo más importante de ganar el premio ha sido “las tantísimas personas” que le han felicitado y a las que ha “dado una esperanza”.

Maréchal ya afirmó el martes, después del anuncio de la demanda de las seis ONG, pero antes de la de Gascón, que las querellas no le afectan: “Ninguna intimidación judicial me hará callar. Seguiré al lado de la verdad, de lo real y del rechazo a la anulación de las mujeres”, aseguró, de nuevo, en X.

El abogado de la actriz, Etienne Deshou, ha dicho este miércoles a la agencia EFE que es la primera vez que se mediatiza un procedimiento por el delito de ultraje sexista en razón de la identidad de género, que se incorporó en el Derecho Penal francés en abril de 2023. Ese delito penaliza las ofensas contra las personas trans dirigidas contra ellas precisamente por su identidad de género y prevé para las personas que sean declaradas culpables una pena de 3.750 euros: “Es sobre todo una cuestión de principios”, ha puntualizado el letrado, quien calcula que un proceso de este tipo tarda unos dos años en concretarse en un juicio.