Isabel II le retira a Harvey Weinstein la Orden del Imperio Británico
La soberana británica ha decidido quitarle los honores, concedidos en 2004, al productor estadounidense, en prisión por delitos sexuales y violación
Los delitos de Harvey Weinstein han llegado hasta las puertas del mismísimo palacio de Buckingham. Tanto que Isabel II ha decidido retirar formalmente los honores que ostentaba el antaño todopoderoso productor de Hollywood, hoy apartado de la industria del cine y que cumple una pena de 23 años de cárcel por delitos sexuales y violación.
“La reina ha decidido que el nombramiento de Harvey Weinstein como Comandante Honorario de la División Civil de la Excelentísima Orden del Imperio Británico, fechado el 29 de enero de 2004, debe ser cancelado y anulado y de que su nombre debe ser borrado del registro de dicha Orden”, se puede leer en el comunicado hecho público este viernes 18 de septiembre en el London Gazette, el diario más antiguo del Reino Unido (en circulación desde 1665) y uno de los periódicos oficiales del Gobierno del Reino Unido. La publicación está acompañada de otros ocho anuncios de ocho personas, todos hombres, a quienes se les retiran esos títulos. El nombre de Weinstein es el primero de la lista.
De ahora 68 años, Harvey Weinstein ha sido uno de los productores más poderosos de la industria del cine en Hollywood. Durante más de 35 años produjo más de 300 títulos, en una lista de títulos inconmensurable que incluyen Pulp Fiction, Shakespeare in love, Las normas de la casa de la sidra, El señor de los anillos, Los otros, Chicago, Cold Mountain, Gangs of New York, Kill Bill, El lado bueno de las cosas...
Sin embargo, todo cambió en octubre de 2017, cuando dos investigaciones por parte de los medios The New York Times y The New Yorker dieron cuenta de una gran cantidad de abusos sexuales cometidos por el gigante de Hollywood contra decenas de mujeres, que después de años de ocultarlo decidieron destapar las conductas criminales de Weinstein. Tal fue la cantidad de víctimas —tanto del productor como de otros hombres poderosos— que alzaron la voz y dijeron “Yo también” que se generó el llamado movimiento #MeToo.
Weinstein maltrató, vejó e incluso violó a mujeres, y en ocasiones acabó con sus carreras. Pero desde que salió a la luz su conducta se ha divorciado de su esposa, la diseñadora Georgina Chapman, creadora de la firma Marchesa, ha tenido que vender muchas de sus propiedades y ha sido expulsado de la Academia de Hollywood. El pasado febrero, tras meses de juicio, fue declarado culpable de dos de los cargos de los que se le acusaba: delito sexual en primer grado (sexo oral forzado), en este caso a la ayudante de producción Mimi Haleyi, y violación en tercer grado (sin consentimiento expreso, según la ley de Nueva York) a la actriz Jessica Mann. Se le condenó a 23 años de cárcel, que cumple en una prisión de Nueva York, y algunas de sus víctimas han sido indemnizadas con hasta 19 millones de dólares. Además, el exproductor tiene un segundo juicio pendiente por otros cinco supuestos delitos de los que, si es culpable, sumarían 29 años a su condena. También, el pasado mes de mayo una nueva demanda le acusaba de otros cuatro delitos sexuales, entre ellos a una menor.
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