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Katy Perry y Orlando Bloom, una relación de ida y vuelta que se consolida

La pareja, que se separó durante un año, acaba de anunciar que espera su primer hijo en común para el próximo verano, cuando también se casarán

Orlando Bloom y Katy Perry en el estreno de "Carnival Row" en Los Angeles, California, en agosto de 2019.
Orlando Bloom y Katy Perry en el estreno de "Carnival Row" en Los Angeles, California, en agosto de 2019.Jen Lowery / SplashNews.com (GTRES)
El País

Katy Perry y Orlando Bloom esperan su primer hijo juntos. Después de varios años de relación y una sonada ruptura, la pareja se reconcilió hace algo más de dos años, cuando volvieron a dejarse ver juntos. Una historia de amor que parecía que iba a sellarse dentro de unos meses con su boda, pero que ahora ha venido a redondearse con el embarazo de la cantante. Un acontecimiento que demuestra cómo han cambiado las vidas y el romance de ambos artistas, que han pasado de ocultarse y evitar ser fotografiados juntos a mostrarse juntos públicamente en eventos, bodas e incluso en el Vaticano. Algo que muestra el giro que han sufrido ellos mismos y su relación.

El bebé que espera Perry nacerá el próximo verano, como ella misma ha anunciado: lo ha hecho a través de un videoclip y también en sus redes, donde haciendo gala de su humor ha afirmado sentirse contenta de no tener que mentir más ni de tener que llevar bolsos enormes para tapar un embarazo que ya ni quiere ni puede esconder. Será el primer hijo para ella y el segundo para el acto de El señor de los anillos, que ya tiene un niño, Flynn, junto a la modelo Miranda Kerr, que a principios de enero cumplió nueve años.

Bloom y Kerr estuvieron casados durante tres años, entre 2010 y 2013, y conservan una buena relación. Perry, por su parte, también ha pasado por un matrimonio aún más breve: el que la unió durante 14 meses y hasta diciembre de 2011 al cómico británico Russell Brand. Aquellas relaciones les marcaron, como ellos mismos han explicado en algunas entrevistas: "He estado casado y me divorcié, no quiero que vuelva a ocurrir”, confesaba el actor hace un año. Fue en marzo de 2016 cuando se empezó a ver imágenes del actor y la cantante, juntos.

Su relación causó expectación desde el primer momento. A principios de aquel año un par de imágenes de ellos charlando animadamente en los Globos de Oro hizo saltar todas las alarmas. Un par de meses más tarde, unas fotos en Hawái lo confirmaron. Pero ellos siempre fueron discretos, tratando de no hacer evidente su relación. Todo un imposible en Hollywood.

El papa Francisco, con Katy Perry y Orlando Bloom en el Vaticano en abril de 2019.
El papa Francisco, con Katy Perry y Orlando Bloom en el Vaticano en abril de 2019.INSTAGRAM

Fue un año después de arrancar aquel romance cuando se cortó en seco. “Antes de que los rumores o las falsas informaciones estén fuera de control, confirmamos que Orlando y Katy se han tomado un tiempo”, decían sus representantes entonces. Horas antes se les había visto en una fiesta con motivo de los Oscar.

Tenía que pasar otro año para que sus seguidores vieran una luz de esperanza: la segunda etapa de su relación. Una fase que parece más estable, madura, sin secretos ni fotos robadas. Unas fotos en Praga en marzo de 2018, en el rodaje de la serie Carnival Row que él protagoniza, hicieron saltar las alarmas. Después, se les ha observado juntos en los lugares más sorprendentes: desde en el Vaticano junto al papa Francisco, al que acudieron a ver en audiencia, hasta en eventos como una gala por los océanos en Mónaco en compañía de los príncipes Alberto y Charlene.

La sorpresa la dieron apenas otro año después. En el día de San Valentín de 2019, la cantante mostraba un enorme anillo con una flor que le había regalado Orlando Bloom: había llegado el momento del compromiso. “En pleno florecimiento”, se leía en el pie de foto, en un juego de palabras con la forma del anillo y con el apellido de su ya prometido, ya que bloom significa florecer. Horas más tarde, las fotos de la fiesta de compromiso corrían por la web.

La llegada del bebé no va a parar los planes de boda. “Va a ser un verano apretado”, ha dicho la propia Perry, dejando caer que habrá niño, fiesta y, seguramente, disco nuevo.

Cuentan medios estadounidenses como Page Six que el enlace se mantiene, que probablemente será en junio (les habría gustado que fuera en invierno, pero no les dio tiempo) y que a los novios les gustaría que la ceremonia se celebrara en Japón, país que ambos conocen, también juntos, aunque la crisis del coronavirus podría frenar sus planes al medio plazo. Pero solo de forma temporal. Porque parece que esta nueva oportunidad va a ser la definitiva para la pareja.

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