‘Mascarillas que son corazones’

Héctor Delgado recuerda en su diseño que detrás de cada cubrebocas o EPI hay una persona

Héctor Delgado bromea con que su madre ejerce a veces de mánager. Tanto ella como su padre son lectores habituales de EL PAÍS, “en papel, además”, y fueron quienes le enviaron una noticia sobre el concurso ¡Muchas Gracias, Madrid! Consideró que la propuesta era interesante y se decidió a participar. Ha resultado uno de los 40 ganadores. Su diseño Mascarillas que son corazones recuerda que detrás de cada equipo de protección contra el coronavirus hay una persona que nos cuida.

Delgado (41 años) trabaja como director de arte en una agencia de Comunicación en Alicante, donde vive hace 22 años, aunque es madrileño de nacimiento. La ilustración es “una parte B del trabajo” que ha aprovechado en este proyecto. Empleó un programa que permite desarrollar diseños siguiendo patrones geométricos.

Las mascarillas se modulan sobre el oso y el madroño para crear formas de corazones y sonrisas. El director de arte explicó en su presentación del diseño que quería humanizar “un símbolo aséptico y frío de la pandemia” a través de las de las sonrisas que esconden. “Un homenaje a todos los profesionales esenciales, representados por diferentes colores, que han seguido trabajando por nuestro bienestar durante los peores momentos sin perder su mejor cara”.

Delgado se reconoce optimista, su propuesta lo transmite. Compartió los meses de encierro de 2020 con su hija de 10 años, Claudia. “Me permitió dedicar tiempo a cosas que me gustan, a estar con ella tiempo de calidad”, cuenta. A menudo se pregunta cómo lo recordará su hija en el futuro y confiesa que suele intentar ver la pandemia a través de sus ojos: “Estar en casa, sin cole, todo el día los dos para arriba, para abajo”. Eso le da fuerzas porque afirma que los niños siempre ven lo mejor de cada situación y eso “te quita cualquier tontuna” y “te empuja hacia arriba”.


El artista Héctor Delgado vitando su obra en el centro cultural Matadero.
El artista Héctor Delgado vitando su obra en el centro cultural Matadero.

Estuvo hace unas semanas en Madrid, cumpliendo con un deseo de visita pospuesto por las olas de contagio. Disfrutó del sol y también visitó el centro cultural Matadero, donde han estado expuestos los diseños ganadores. Allí comprobó si se había resuelto uno de los retos del proyecto: que el diseño, presentado en formato de dos dimensiones, encajara correctamente con una figura realizada en 3D. Las formas geométricas lo habían complicado, pero el resultado le agradó. “Fue un fin de semana chulo, me pareció emocionante verlos todos juntos”, concluye.

El símbolo del oso y el madroño de Madrid

¡Muchas Gracias, Madrid! Descubra los 40 diseños ganadores y a sus autores

Pincha aquí

Archivado En