Una consejera de Ayuso, a una diputada detenida por Israel: “Viene de vacaciones en el mar. Crema de sol y palo selfi para su crucero”
Jimena González, de Más Madrid, viajó en la segunda flotilla que trató de llevar ayuda humanitaria a Palestina

Los ojos estaban puestos en ella desde primera hora. La diputada de Más Madrid Jimena González ha regresado a su escaño después de que viajara en la segunda flotilla que pretendía llegar a Palestina con ayuda humanitaria. Fue detenida durante 48 horas y, según denuncia, “maltratada” psicológicamente y físicamente por las fuerzas israelíes.
González, extremeña, de 35 años, filóloga, es transexual. Y este jueves ha tomado la palabra para preguntar a la consejera de Familias de Isabel Díaz Ayuso por los proyectos de ayuda humanitaria que tiene prevista la región. Ana Dávila, sin medias tintas, ha contestado de inmediato. “Estuvimos hablando hace una semana”, ha dicho. “Y usted estaría preparando la crema del sol y el palo selfi para su crucero del Mediterráneo. Gracias”. Cinco minutos después, el presidente de la Asamblea, el popular Enrique Ossorio, ha expulsado del pleno a un compañero de González, Pablo Padilla, ante la estupefacción de la bancada de izquierdas.

No es ninguna novedad. Otra bronca en el Parlamento madrileño, que ha comenzado a primera hora con la presidenta Ayuso asegurando que “cumplirá con la ley” del aborto, que exige un registro de los médicos objetores. Ayuso, sin embargo, no ha dicho cómo cumplirá si se niega a crear un registro con los médicos objetores. Fuentes del Gobierno regional aventuran que todo acabará en un nuevo enfrentamiento judicial entre el Gobierno de Sánchez y el de Ayuso. E insisten en que la Comunidad de Madrid cumplirá con la ley. Así, la clave es saber cómo lo hará si para Ayuso este registro es una “lista negra”, aunque ningún ciudadano puede observar qué médicos se niegan a practicar el aborto y la región cuente otro registro similar con la ley de eutanasia, del que, entonces, no puso ninguna objeción.
Es más, la Consejería de Sanidad votó a favor del registro de objetores del aborto, aunque ahora Ayuso haya desautorizado públicamente a su consejera. De todas formas, el tono de este jueves no tiene nada que ver con el de hace una semana, cuando Ayuso rechazó crear el registro de manera tajante y dijo:
−¡Váyanse a otro lado a abortar!
Ayuso ha encargado ahora a los servicios jurídicos que busquen cómo encajar este registro en la región sin que los médicos que se nieguen a practicar los abortos en la sanidad pública tengan que decirlo, como les exige la ley y cumplen el resto de autonomías. El Gobierno ha dado un plazo de un mes a la presidenta madrileña desde este martes para que conteste qué quiere hacer. De lo contrario, nuevo choque en los tribunales.
Así, el pleno ha transcurrido con normalidad hasta que la diputada de Más Madrid que viajó en la flotilla tomó la palabra. “El pasado sábado”, ha dicho, “fui liberada de la prisión de Israel después de 11 días navegando en aguas internacionales y dos días de encarcelamiento, vulnerando mis derechos fundamentales. He sido testigo directa de la brutalidad, del salvajismo y la falta de humanidad israelí”.
De pronto, González se ha dirigido al portavoz de Ayuso en la Asamblea, Carlos Díaz-Pache, que la calificó hace una semana de “Madre Teresa de AliExpress”. González le ha contestado este jueves. ¿Le ha parecido poco lo que me han hecho? Estas semanas no ha parado de pensar en mí. ¿Qué me hacían en sus fantasías más sádicas, díganos?, ¿qué le habría parecido suficiente castigo por ser una mujer trans que desafía un Estado genocida?“.
Pache ha pedido la palabra al presidente de la Asamblea, Enrique Ossorio, por, supuestamente, “juicios de valor”. El presidente ha intervenido muy rápido:
−¿Y cuál sería?
−La señora González ha dicho que tenía fantasías sádicas.
−Bueno, pero tiene un minuto. Aquí se dicen muchas cosas.
La bancada de Más Madrid se ha partido de risa al completo. Un gesto que no ha gustado nada al presidente. “Es un gallinero”. Y ha explicado por qué ha concedido el turno: “Yo considero que si dice fantasías sádicas, se dicen muchas cosas...”.
Y Pache ha sido tajante: “Toda su misión ha sido un fracaso. En cuanto la gente denuncia su narcisismo cuqui se ponen insultar a todo el mundo. Son un meme. Una vergüenza”. El PP, al unísono, se ha puesto en pie para aplaudir a su portavoz. Es entonces cuando el diputado y compañero de González, Pablo Padilla, se ha quejado a viva voz. Más Madrid quería contestar esta acusación de Pache, pero el presidente no ha considerado que tengan ese derecho:
−Bueno, ya, ya, ya.
Padilla ha continuado. Y el presidente le ha llamado al orden tres veces para terminar expulsándole de la sesión. “Cuando un diputado comete una falta grave de cortesía y se causa desorden, puede ser expulsado inmediatamente. No puede ser la actitud”. Más Madrid ha pedido de nuevo la palabra.
−No. No tienen la palabra. Ya está resuelto este problema.
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