Ayuso deja fuera de juego a Feijóo al apoyar que las embarazadas de 16 y 17 años aborten sin consentimiento paterno
La presidenta de Madrid contradice la posición del líder del PP, que ha defendido la necesidad de que los padres de las menores den su aprobación
Isabel Díaz Ayuso ha dejado este jueves fuera de juego al PP al defender durante una entrevista en Onda Cero que las embarazadas de 16 y 17 años tienen derecho a abortar sin el consentimiento de sus progenitores. Esa afirmación contradice lo dicho hasta ahora por Alberto Núñez Feijóo, el líder de la formación conservadora. Contrasta, además, con la oposición de su partido a la reforma de la ley del aborto que patrocina el Gobierno de Pedro Sánchez para devolver la capacidad de decisión autónoma para interrumpir su embarazo a las mujeres de 16 y 17 años. Y supone, finalmente, una crítica implícita al Gobierno de Mariano Rajoy, que fue el que en 2015 elevó la edad para interrumpir el embarazo sin permiso paterno de los 16 a los 18 años.
Si una joven de 16 o 17 años quiere abortar, ¿debe poder hacerlo aunque sus padres estén en contra?, le han venido a preguntar a Ayuso. “Yo creo que tiene que abortar, desde luego. Una vez que una mujer tiene claro que no quiere salir adelante con ello, y lo tiene claro, creo que no puedes obligar a nadie a llevar una vida contraria a la que desea”, ha contestado la presidenta de la Comunidad de Madrid. “Lo que sí que creo es que hay que fomentar que no se llegue a ello. La mayoría creo que sabemos cómo evitar un aborto. ¿Por qué nunca hablamos de cómo evitarlo?”, ha añadido. “No puedes decir, ‘tú aborta que no pasa nada’, tomar como anticonceptivo lo que no lo es”, ha seguido. “Yo llamo al sentido común para no llegar a ello, pero, ¿cómo decirle a una mujer que viva como no quiere?”, se ha preguntado. “Es distinto si hay que informarles [a los padres] o si necesitas su aprobación. Hay que informarles, sin ninguna duda. Un padre con una hija de 16 años necesita conocer que su hija va a ser sometida a una intervención de esas características”, ha argumentado.
“No se me ocurriría pensar que una mujer de 16 años, que es muy joven, y que tiene unos proyectos, tenga que seguir con una vida que no quiere”, ha precisado. Y ha rematado: “No obstante, no podemos dejar que sigan esas cifras alarmantes de abortos. Hay que intentar no llegar al embarazo no deseado [...] Es importante que un padre sepa que su hija de tan solo 16 años va a vivir algo así, del mismo modo que hay muchas mujeres que son presionadas para abortar, y para no hacerlo, y necesitan el respeto merecido para que cada una elija qué es lo que quiere”.
En mayo, Núñez Feijóo dejó clara una posición muy diferente: “Si la legislación prohíbe consumir alcohol a una menor de 18 años, parece razonable que esa legislación solicite el permiso de los padres para la interrupción voluntaria del embarazo”. Una opinión que reafirmó taxativamente a finales de junio, y durante un foro informativo organizado por La Razón: “Nosotros creemos que una menor de edad debería tener consentimiento paterno”, dijo. Anoche, durante otra entrevista en Onda Cero, el líder del PP reafirmó su visión sobre el consentimiento paterno sobre el aborto de una menor aunque admitió: “En mi partido seguro que hay distintas sensibilidades”.
Aquellos fueron dos momentos incómodos para el expresidente de Galicia. Núñez Feijóo apuesta por intentar llegar a la Moncloa cabalgando la ola de la crisis abierta por la invasión de Ucrania por parte de Rusia, ofreciendo su experiencia de gestión con el aval de las mayorías absolutas que obtuvo en la política autonómica, y evitando escorar ideológicamente al PP para atraer a cuantos más votantes mejor. En esa hoja de ruta, el aborto es un tema tabú. No solo divide al partido internamente. También dificulta su relación con Vox, el partido de extrema derecha clave para sus posibilidades de gobierno. Y, por lo tanto, saca del foco todo lo que Núñez Feijóo quiere subrayar.
Así, el posicionamiento de Ayuso sobre el aborto ha supuesto todo un recordatorio de que la relación entre el político gallego y la madrileña está sometida al riesgo de las actuaciones como verso libre de la presidenta de la Comunidad de Madrid, igual que pasó en la etapa de Pablo Casado, y pese a las continuas reuniones y llamadas entre ambos para intentar lograr una coordinación adecuada. De hecho, la incomodidad que ha provocado sus declaraciones ha sido lo suficientemente notable como para que su equipo haya querido hacer precisiones a posteriori: “La presidenta ha dicho que los padres no pueden obligar a que su hija tenga un bebé si ella no quiere, del mismo modo que no la pueden obligar a abortar. Nadie ha hecho tanto por las mujeres embarazadas solas, en defensa de la vida y la familia”.
Además, Díaz Ayuso ha rechazado que se hagan “listas negras” de profesionales que no quieran seguir el “objetivo básico por el que estudiaron”, que es “prolongar la vida”. También ha abogado por más campañas de anticonceptivos para prevenir que se tenga que abortar. “Hace falta más educación, concienciación y hablarles a los jóvenes, que están muy solos”, ha dicho Ayuso. “(...) Hay que hablar con ellos y explicarles que el aborto no es un anticonceptivo al uso y que causa males mayores”.
En todo caso, la nueva dirección del PP, encabezada por Núñez Feijóo, espera que prospere su recurso contra la ley de aborto en el Tribunal Constitucional. Los conservadores recurrieron la ley de plazos en 2010 impugnando varios preceptos, entre ellos el que prevé la posibilidad de abortar en las 14 primeras semanas por la decisión libre de la madre, pero el tribunal de garantías todavía no ha emitido sentencia.
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