García-Page ensalza las políticas de Sánchez contra la crisis y recuerda que “con los asesinos de ETA no iría ni a la vuelta de la esquina”

El PSOE llevaba desde el miércoles eludiendo el problema o tratando de minimizarlo. Se le abrió un frente inesperado a las puertas de la campaña electoral del 28-M por la decisión de EH Bildu de incluir en sus listas a 44 exmilitantes de ETA, siete de ellos con delitos de sangre, en algunas de sus 300 candidaturas para las elecciones municipales de Euskadi y Navarra. Emiliano García-Page, el barón del PSOE más crítico con el presidente del Gobierno y secretario general de los socialistas —con permiso de Javier Lambán, el presidente de Aragón— sí ha sacado la relación con EH Bildu justo en el primer mitin que mantenía con Sánchez desde septiembre. “A mí me verán siempre en una lucha contra todo tipo de privilegios, y cuando los independentistas buscan arrimar el ascua a su sardina, es decir que el resto no tengamos lo mismo, siempre levantaré la voz. Y si además han utilizado una pistola con más motivo: yo con los asesinos de ETA ni a la vuelta de la esquina”, ha afirmado en un acto en Puertollano, una localidad de fuerte arraigo obrero y tradición minera que ha apostado por el hidrógeno verde para su reconversión industrial. Días antes, Lambán instó a “romper cualquier relación con Bildu” como socio parlamentario. El presidente del Gobierno, que el viernes afirmó en Washington sobre las listas de EH Bildu que “hay cosas que pueden ser legales, pero no son decentes”, no ha reaccionado ante las palabras de García-Page. De hecho, ha eludido hacer ninguna mención en la única ocasión en la que coincidirá con el presidente de Castilla-La Mancha hasta la noche electoral del 28 de mayo.

Pese a la fortísima discrepancia por el trato con EH Bildu, García-Page ha destacado las políticas de Sánchez durante la pandemia y la guerra de Ucrania. “Estamos haciendo lo contrario que María Dolores de Cospedal [su predecesora en la Junta entre 2011 y 2015] en todos los sentidos. De la misma manera que el Gobierno de España está ofreciendo ante la crisis por la guerra de Ucrania y la de la pandemia una medicina totalmente contraria a la del PP. Con ellos había despidos, recortes, desaparición de empresas, desaparición de autónomos… Hay que dejar claro que unos a una crisis le respondieron de una manera, en la que salieron perdiendo los que más pierden, y nosotros estamos respondiendo ayudando a quienes más lo necesitan y contratando sanitarios, maestros y ayudando a las empresas y la creación de empleo. Hay distintas formas de entender la vida y la política”, ha apreciado el presidente de Castilla-La Mancha. “Cuando ellos gobernaban, los Consejos de Ministros eran de recortes sociales. Con nosotros son de avances sociales”, le ha secundado Sánchez.

Pero, aun así, la cuestión de EH Bildu que el PSOE venía arrastrando ha terminado surgiendo en Puertollano. El presidente incidió en Washington, tras ser recibido por Joe Biden en la Casa Blanca, en que los antiguos miembros de la banda “solo pueden aportar a la vida pública un mensaje de perdón, reparación y arrepentimiento”, pero evitó aclarar si revisaría la relación con EH Bildu. Ya de vuelta a España el sábado, en su primer mitin de campaña en Sevilla, no hubo ninguna mención a la polémica, que el PP está agitando dentro de su estrategia para desgastar a los socialistas. “Nosotros no vamos a estar en los insultos. Eso se lo dejamos a la derecha. Nosotros estamos en la gestión, los avances sociales y la paz social”, ha observado hoy Sánchez, que hacía ocho meses que no compartía acto con García-Page. En Semana Santa, el presidente del Gobierno tuvo un mitin en Albacete y el 21 de abril otro en Toledo. El presidente de Castilla-La Mancha no acudió a ninguno de ellos (en el segundo se encontraba de viaje en Bruselas). Otra prueba de que la sintonía no es la mejor es que Sánchez y García-Page solo han compartido unos minutos antes del mitin de Puertollano. Y, ya en el acto, solo se han permitido un abrazo rápido y frío.

La jornada era especialmente sensible para el PSOE, como se pudo comprobar. Y eso que el partido ha movilizado a 1.600 militantes y simpatizantes, incluidos los cientos que se quedaron fuera del recinto de La Central y siguieron el acto a través de pantallas (Alberto Núñez Feijóo congregó el viernes a 400 en Toledo). Pero los precedentes estaban muy presentes. Las críticas de García-Page a la derogación del delito de sedición y la rebaja de la malversación, con la que se pretendía beneficiar a encausados del procés, fueron de las más feroces dentro del PSOE. También se opuso a la concesión de los indultos a los dirigentes soberanistas encarcelados por el desafío unilateral de independencia. “Estas son unas elecciones para hablar de nosotros, aquí se juegan ayuntamientos y comunidades autónomas. Sepamos lo que tenemos realmente entre manos. Que nadie se lleve a engaño cuando el 28 de mayo vaya a votar: yo siempre he puesto, pongo y pondré los intereses de Castilla-La Mancha por encima de los de mi partido y de todos los partidos juntos”, ha querido distinguir el presidente castellanomanchego frente a la estrategia de Feijóo de convertir el 28-M “en un plebiscito contra el sanchismo”.

“Esta campaña va a terminar bien, noto un ambiente espectacular con el proyecto que representamos. Y eso hace ratificarme en algo. En el autobús de campaña solo sale mi cara y, sin embargo, voy viendo vallas por la región donde el PP pone la cara del presidente de Andalucía, de la de Madrid y del que fue presidente de Galicia. Y luego del de aquí. ¿Es que necesitan cuatro? Uno se presenta con lo que tiene de bueno y de malo”, se ha reivindicado García-Page frente a la campaña que ha diseñado el candidato del PP, Paco Núñez, que pretende aprovechar el tirón de Juan Manuel Moreno Bonilla, Isabel Díaz Ayuso y Feijóo. El barón del PSOE necesita revalidar la mayoría absoluta ante la certeza de que el PP pactará con Vox si les dan los números.

“No me cabe ninguna duda, Emiliano, Adolfo [Muñiz, alcalde de Puertollano], de que la gente cuando vota defiende lo que piensa. Y va a votar al PSOE y vamos a volver a ser la primera fuerza en nuestro país, en Castilla-La Mancha y en Puertollano”, ha concluido Sánchez en la única mención directa a García-Page al final de su discurso, en el que ha hecho un nuevo anuncio. Isabel Rodríguez, exregidora de Puertollano y actual portavoz del Gobierno y ministra de Política Territorial, ha animado a que se repita de nuevo la “triple alianza” con gobiernos del PSOE en la ciudad, la comunidad autónoma y La Moncloa.

Los mayores de 65 años podrán ir al cine por dos euros los martes

El Boletín Oficial del Estado (BOE) es una de las armas más poderosas de la política española. Marca la diferencia abismal que hay entre gobernar o aspirar a hacerlo. Entre prometer o el poder de ejecutar. Entre lo que implica estar en La Moncloa o estar en la oposición. Sánchez ha aprovechado el escenario que le otorgaba su segundo mitin de la campaña electoral para adelantar una medida dirigida a los 9,5 millones de españoles mayores de 65 años: el Consejo de Ministros del martes aprobará un plan para fomentar la asistencia a las salas de cine en el que pagarán solo dos euros por ir los martes a los patios de butacas.

El programa supondrá una inversión de 10 millones de euros y se desarrollará en colaboración con las principales asociaciones del sector de la exhibición, que representan más del 90% de las salas. El sector celebra este lunes la 20ª edición de la Fiesta del Cine: durante cuatro días las salas adscritas a la Federación de Cines de España, que agrupa al 80% del sector, ofertarán entradas a 3,50 euros con el requisito de acreditarse antes en su web. Según la última Encuesta de Hábitos y Prácticas Culturales, solamente el 27,7% de los espectadores que asistían a las salas antes de la pandemia habían retomado el hábito en 2021.

“La pandemia provocó que las salas de cine se tuvieran que cerrar y provocó algunos efectos adversos. Tenemos que recuperar esos espacios, hacer de la cultura una política de Estado. Por eso vamos a hacer un nuevo avance: bonificar a los mayores de 65 para que vayan al cine y los martes paguen dos euros y puedan disfrutar del cine español y del cine internacional. Ya sé que a la derecha le va a molestar, pero cuando ellos gobernaban sus Consejos de Ministros eran de recortes sociales y los nuestros son de avances sociales”, ha señalado Sánchez. El gesto a la industria cultural se engloba dentro del interés del Gobierno de que la campaña se centre en la gestión frente a la intención del PP, que ha puesto el foco en los problemas internos en la coalición entre el PSOE y Unidas Podemos y en las listas de EH Bildu.

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