‘Dialogues des Carmélites’, obra maestra de la ópera moderna, llega a Les Arts con el aclamado montaje de Robert Carsen

El Palau de les Arts Reina Sofía inaugura 2025 con el estremecedor y aclamado montaje de Robert Carsen de Dialogues des Carmélites, la singular ópera de Francis Poulenc sobre las 16 carmelitas guillotinadas durante el Terror de la Revolución Francesa y proclamadas santas por el papa Francisco. El libreto es obra del propio compositor a partir de la pieza teatral homónima del escritor Georges Bernanos. Está considerada una obra maestra de la ópera del siglo XX.

El director artístico de Les Arts, Jesús Iglesias Noriega, y el director musical de la obra, Riccardo Minasi, acompañados del propio Robert Carsen, han presentado este viernes este título, una de las grandes apuestas artísticas de la temporada, que podrá verse los días 23, 25, 28 y 31 de enero y el 2 de febrero.

Iglesias Noriega ha destacado que esta versión está considerada la producción de “referencia” de la obra de Poulenc desde su estreno en 1997 por el uso magistral que Carsen hace del espacio y la luz, junto con su excepcional dirección de intérpretes, que ya han “conmocionado” Londres, Milán, Viena Chicago, Ámsterdam, Toronto y Madrid. Se ha estrenado en 16 escenarios operísticos. “No conozco a nadie que haya visto esta producción que no haya sentido un impacto emocional muy fuerte por la fuerza increíble que trasmite”, señala. Basa

El director de escena incide en que Dialogues des Carmélites, que es la primera vez que se representa en València, es una obra “muy íntima y muy poco inusual” pues si la ópera en general aborda “historias de amor, amor casi erótico”, la temática de este título es la muerte, que surge ya desde el principio como amenaza en el contexto de la revolución francesa y concluye con la decapitación de las monjas por su fe, “un mensaje muy poderoso”. Las monjas encaran así su muerte con “gozo” porque han decidido ser mártires antes que huir y entonan el Salve Regina mientras caminan serenas hacia la guillotina.

Sin embargo siempre tuvo claro que no quería ningún elemento cristiano en escena -la única cruz que figura son los rosarios en los hábitos de las monjas- porque “la grandeza” de esta obra “fascinante” es precisamente adentrarse en la fe de forma individual. Por ello, no aprecia diferencias en la respuesta del público según la religión dominante del país: “El libreto puede ser algo más concreto, pero al final la música es espiritual, todos hablamos Poulard y eso hace que todos nos entendamos”. El director canadiense recurre en cambio a la luz para contar las distintas historias de las protagonistas y sus sacrificio.

Por su parte, el maestro Riccardo Minasi destaca “la espectacular” partitura para recrear el amor no sensual, pero sí fraternal, filial y de amistad que empapa la obra y “el monstruo de la muerte”. Una partitura “muy compleja e inusual” que resuena a Stravinski, Mahler o Prokófiev, pero también “muy visionaria” con páginas con ecos a las melodías del Hollywood de compositores como John Williams.

La extraordinaria partitura de esta obra coral supone también para el teatro uno de los mayores retos artísticos que ha tenido que afrontar al congregar más de 230 músicos y artistas en una sola producción para recrear los atroces acontecimientos de la Revolución francesa: 25 intérpretes solistas, 59 cantantes del Cor de la Generalitat, 75 figurantes y 77 músicos de la Orquestra de la Comunitat Valenciana (OCV) en el foso.

La veterana diva Doris Soffel regresa a València para interpretar a la vieja priora Madame de Croissy acompañada en su estreno en Les Arts por las sopranos Alexandra Marcellier (Blanche de la Force), Ambur Braid (Madame Lidoine) junto con el tenor Valentin Thill (Le Chevalier de la Force), acompañados de reconocidos intérpretes como el bajo Nicolas Cavallier (Le Marquis de la Force) y la mezzosoprano Michèle Losier (Mère Marie de l’Incarnation).

Además, ‘’Diálogos de Carmelitas plantea un desafío en el ámbito técnico para acoger la colosal escenografía de Michael Levine ya que su representación requiere de un espacio escénico útil de 700 metros cuadrados, que está limitado por tres impresionantes muros móviles de 17 metros de altura, cuyo peso oscila entre 1 y 1,5 toneladas, que van dando paso a los requisitos escénicos del drama.