Las defunciones cayeron un 83% en las residencias de mayores con la vacunación

Un total de 1.768 mayores han fallecido en las residencias de la Comunidad Valenciana por la covid-19 desde que estalló la pandemia pero la vacunación cambió significativamente la situación y ha reducido los contagios en un 95% y las muertes un 83% desde el pasado enero, ha explicado este martes la consejera de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, en una comparecencia en las Cortes Valencianas a petición de Ciudadanos y el PP.

La vicepresidenta ha destacado que la vacunación contra la covid-19 “ha sido decisiva frente a la enfermedad en los centros de diversidad funcional y, sobre todo de personas mayores, al ir acompañadas de otras medidas para controlar la pandemia”. Así, la tercera dosis se ha administrado “en la totalidad de los centros residenciales de personas mayores de la Comunidad Valenciana”, excepto en dos, que están pendientes de que se cierre un brote de coronavirus. En total se han inoculado 20.778 dosis adicionales, con lo cual más del 87,23% de las personas residentes ya tienen esa pauta.

Como balance, la vicepresidenta destaca que la situación cambió significativamente desde el inicio de la vacunación el 27 de diciembre, con una caída de los contagios del 95% y de las defunciones del 83% en menos de dos meses. Eso sí, ha recordado que la tercera ola fue especialmente virulenta en la Comunitat, con efectos “dramáticos” en las residencias al concentrar casi un 50% del total de los contagios durante la pandemia.

La letalidad de la quinta ola en residencias es del 7% y desde mediados de agosto se inició una tendencia a la baja que se mantiene, con la mayoría de los contagios en personas asintomáticas. Durante estos meses se ha hecho un “seguimiento permanente” de los centros con brotes abiertos y ninguno ha pedido medidas adicionales.

Paralelamente ha resaltado que solo el 1% de los centros no ha presentado su plan de contingencia y que la mayoría del 1,99% del personal activo no vacunado no es de atención directa. Entre estos trabajadores ha explicado que se abrió un expediente a dos no vacunadas que no se quisieron realizar las pruebas de antígenos, de las que una desistió de la negativa y la otra pidió la baja voluntaria.

Junto a la vacunación, Oltra ha celebrado que hay un mejor conocimiento del comportamiento del virus gracias a datos como el estudio realizado junto a la Consejería de Sanidad, que refleja que el 98,7% de los residentes analizados desarrolló anticuerpos y que solo un tercio del 1,3% restante no generó otro tipo de inmunidad.

En la denominada quinta ola, Oltra ha informado que en el total de centros residenciales de mayores, con diversidad funcional y otras comenzó a experimentar un crecimiento de casos a finales del mes de junio, y el pico más alto de brotes se produjo durante la segunda semana de agosto, momento a partir del cual se inicia una tendencia a la baja que se mantiene permanente hasta ahora.

Duras restricciones o “irse de cañas”

El grupo de Ciudadanos le ha recriminado a la consejera que no se hicieran antes controles a los trabajadores, incluso a los vacunados, y también ha habido reproches por las fuertes restricciones a las que han estado sometidas las residencias durante las diferentes olas de la epidemia y el bloqueo de 1.500 plazas (es una reserva para posibles brotes) que hacen que muchos mayores se queden fuera. Elena Bastidas, del PP, ha asegurado que la gestión que Oltra ha hecho en las residencias durante la pandemia sería “motivo de reprobación” y le ha reprochado que estuviera desaparecida de sus responsabilidades.

De los grupos del Botànic, Carles Esteve, de Compromís, ha comparado la respuesta a la pandemia de la Generalitat valenciana con la del gobierno de Isabel Díaz Ayuso en Madrid, afirmando que “la gestión de ‘hacerse cañas’ hubiera supuesto 3.000 fallecidos más” en las residencias valencianas.

Oltra ha precisado que a la vuelta de vacaciones o en nuevas incorporaciones de trabajadores se han hecho pruebas de PCR, aunque el Ministerio de Sanidad estableció que los cribados periódicos a los empleados vacunados estaba desaconsejado. Respecto a las plazas bloqueadas, la vicepresidenta ha asegurado que se han liberado 500 para que puedan ser ocupadas.