ERC acusa a Junts de colocarse junto a la derecha y la ultraderecha por impedir regular el alquiler de temporada

La decisión de Junts per Catalunya de finalmente no abstenerse en el primer trámite de la proposición de ley de regulación de los alquileres temporales y votar en contra ha sido fuertemente contestada tanto desde otras formaciones políticas como desde el activismo en favor del derecho a la vivienda. En el Congreso, este miércoles, el más duro ha sido el portavoz republicano, Gabriel Rufián, que ha aprovechado la pregunta en la sesión de control para ubicar a los de la formación de Carles Puigdemont en el bloque “de la derecha y ultraderecha”, junto al PP y Vox, y ha calificado su voto de “miserable”. Por su parte, el Sindicat de Llogateres les ha acusado de mentir a la ciudadanía y condenar a los inquilinos “a la miseria” y han llamado a protestar esta tarde ante la sede del partido. “Regular el alquiler, por supuesto, pero que no nos cuelen políticas de un modelo que no funciona”, se ha defendido la líder de Junts en Madrid, Míriam Nogueras, en una entrevista a Catalunya Ràdio este miércoles.

La avalancha de críticas le ha caído a Junts desde casi todas partes. Tras conocerse pocos minutos antes de la votación, en la noche del martes, que los de Puigdemont daban un volantazo entre la abstención anunciada al mediodía y el no definitivo, comenzó un rosario de críticas que tiene como punto común la crítica a cierta pátina de progresismo que ese partido se había querido dar en lo últimos años para intentar, supuestamente, diferenciarse de sus antecesores de Convergència y del PDeCAT.

El portavoz de ERC, Gabriel Rufián, ha denunciado en su turno de preguntas de la sesión de control al Gobierno que Junts pertenece al bloque “de la derecha y ultraderecha” junto al PP y Vox. Por ello, ha preguntado al presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, cómo va a sortear los bloqueos políticos como el que ocurrió este martes, en el que Junts votó en contra de la regulación del alquiler.

El Gobierno catalán también ha arremetido contra la decisión de Junts. La consellera de Territorio, Sílvia Paneque, que también es portavoz del Ejecutivo, ha subrayado en una comparecencia en el Parlament que la decisión final de Junts es “un golpe durísimo e inexcusable para las clases trabajadoras” y ha lamentado que se desechara una oportunidad para “pactar, dialogar y consensuar la ley por otro tipo de cálculos”. De hecho, ha señalado que los precios de la vivienda son un motivo del “enfado” de la población y ha indicado que esta lo está “con razón”.

“Me gustaría insultar a Junts por la votación de hoy. Pero creo que la cosa va más allá. No es solo que voten a favor de la especulación. La cuestión de fondo es que están en el mismo marco antipolítica de Vox. Que lo han hecho es cerrar posibilidades de tener esperanza”, aseguró en la red social X Gala Pin. La ahora diputada por Sumar fue en su día concejal de Barcelona y compañera de batalla de la exalcaldesa Ada Colau en la Plataforma de Afectados por la Hipoteca. La norma tumbada, propuesta por el Sindicat de Llogaters con el apoyo de las fuerzas de izquierda, proponía, entre otras cosas, prohibir que se encadenaran dos contratos por seis meses o obligar al arrendatario a justificar por qué elige la opción temporal.

Rufián ha calificado de “miserable” el voto negativo contra la propuesta para regular los alquileres. “Desconocen la capacidad mediática de esta gente”, le ha advertido, a lo que Sánchez ha querido evitar mencionar a Junts y ha insistido en que el suyo es el “Gobierno del diálogo”. El Sindicat de Llogaters también ha expresado su malestar. En una nota de prensa posterior a la votación, han asegurado que consideran “incomprensible” que cualquier formación política se oponga a debatir sobre “un problema tan grave” como el de la vivienda, en referencia a que con el voto de Junts se ha impedido abrir el trámite parlamentario.

El Gobierno catalán, en manos de los socialistas, también ha sido muy duro con los del partido de Puigdemont. La portavoz del Ejecutivo y consejera de Territorio, Patrícia Paneque, ha calificado de “golpe durísimo e inexcusable” el naufragio de la proposición de ley. Barcelona es una de las ciudades más afectadas por la problemática y Laia Bonet (PSC), teniente de alcalde del Ayuntamiento, le ha afeado a Junts su decisión de no abstenerse. “Es imprescindible regular los alquileres de temporada para garantizar que medidas como el límite del precio del alquiler se apliquen en todos los casos”, ha asegurado en la red X. “Negarse a regular la vivienda es dar la espalda al problema más grande de nuestra ciudad y de nuestro país”, ha apostillado.

Sin embargo, el último intento de regular los alquileres de temporada en Cataluña —en el pasado mayo— no salió adelante precisamente por la abstención del PSC. El decreto contó con ocho votos a favor, de ERC, CUP y comunes, nueve en contra, de Junts, PP, Vox y Ciudadanos y las cinco abstenciones de los socialistas. El grupo alegó falta de consenso y consistencia jurídica en el texto.

Nogueras ha intentado salir al paso de las críticas por el cambio de parecer. En la radio pública catalana ha defendido el no al inicio de trámite de la proposición de ley y su cambio de sentido de voto. “Regular el alquiler, por supuesto, pero que no nos cuelen políticas de un modelo que no funciona”, ha dicho. La diputada ha dicho que cuando se les pasó el texto se les había advertido que no se podía “cambiar ni una sola coma” y que por tanto no podían dar por bueno un articulado donde creen que se invaden las competencias autonómicas. Con todo, se ha mostrado dispuesta a negociar.

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