Los afines a Marta Rovira se activan en la disputa con Oriol Junqueras por el liderazgo de ERC

La competencia por quién se hará con las riendas de la dirección de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) en su próximo Congreso extraordinario de noviemnre empieza a ganar velocidad. Si el pasado lunes fue la lista que busca la continuidad de Oriol Junqueras la que anunció su presentación oficial para el día de 21 de septiembre, este jueves será el ala de la formación que apuesta por una renovación de caras en la cúpula la que se presente en sociedad. La propuesta “coral” de Nova Esquerra Nacional, que agrupa a los afines a la secretaria general Marta Rovira en el actual pulso por el liderazgo, ofrecerá una rueda de prensa en Barcelona, aunque no se espera que se ponga sobre la mesa el nombre de quien se pueda batir en el cónclave con ahora expresidente de la formación.

La decisión, el pasado lunes, de anunciar la fecha de presentación de Militància Decidim, como se llama la candidatura de Junqueras, dejaba en una posición de debilidad a los afines a Rovira y el expresident Pere Aragonès. Hasta ahora los dos son las caras más visibles de quienes dentro de ERC consideran que se ha de cambiar de liderazgo tras los malos resultados del último ciclo político y para afrontar la nueva coyuntura, marcada por el pacto de investidura a Salvador Illa como presidente de la Generalitat. De ahí que se haya acelerado la presentación de Nova Esquerra Nacional.

Fuentes de la candidatura pro renovación descartan que en la rueda de prensa que se celebrará en la capital catalana se presente el nombre de quién tendría que batirse con Junqueras en el cónclave inicialmente programado para el 30 de noviembre. Su propuesta, dicen esas mismas voces, pivotará en torno de un liderazgo ”coral”, en un movimiento que busca alejarse de lo que consideran el personalismo “exagerado” de Junqueras y la lista que encabeza. El expresidente del partido había anunciado el pasado lunes que daba el pistoletazo de salida a su pretensión de recuperar la presidencia de la formación independentista con un acto el 21 de septiembre en Olesa de Montserrat (Barcelona).

Tanto Rovira, actual líder interina del partido, como Aragonès ya han dicho en repetidas ocasiones que no piensan presentarse al Congreso extraordinario. Con lo cual entre las quinelas de posibles nombres para enfrentarse al exvicepresident del Govern figuran la actual portavoz en las Cortes, Teresa Jordà, o la vicesecretaria de la formación Marta Vilaret. Jordà siempre ha sido la cara visible del alma más independentista de la formación —frente a una más de izquierdas— y Vilaret es muy apreciada entre la militancia al haber sido la responsable de negociar la ley de amnistía para los encausados por el procés.

El espíritu coral, sin embargo, tendrá que decantarse finalmente por una cara visible. El reglamento del Congreso establece que, como máximo el día 15 de octubre, las candidaturas interesadas en pujar por la dirección han de presentar su plan de trabajo y una lista de cómo máximo 29 miembros y que se especifiquen los nombres de los que opten a la presidencia, la secretaría general, la de finanzas y la de organización.

El anuncio de los afines a Rovira de presentarse en sociedad llega el mismo día que la dirección interina del partido ha pedido a la comisión de garantías del ERC que decida sobre cuándo ha de celebrarse finalmente el Congreso. La fecha fijada inicialmente era el 30 de noviembre, pero un grupo de militantes cercanos a Junqueras pidió adelantar el calendario ante la desaparición del riesgo de repetición electoral en Cataluña.

La fecha inicial daba margen de tiempo para encajar el cónclave tras unos nuevos comicios catalanes, pero finalmente hubo un pacto para investir a Illa. Los estatutos de ERC impiden que se realice el Congreso en periodo electoral. Los militantes cercanos a Junqueras —y también una parte importante de los consejeros nacionales— defienden que sin ese riesgo, se ha de seguir la normativa interna que fija un máximo de tres meses para celebrar la votación para elegir cúpula contados desde la renuncia del presidente. Junqueras dejó la dirección republicana en junio.

Los afines al expresident se pegan de los estatutos para intentar aprovechar que su candidatura no sufre el posible desgaste de Nova Esquerra Republicana, derivado de los pactos con el PSC o del futuro de la legislatura en España. Intentando adelantar la fecha del Congreso, intentaban jugar con lo que consideran la falta de una cara visible para enfrentarse Junqueras a su favor. La comisión de garantías no tiene un plazo establecido para pronunciarse, pero fuentes de la dirección aseguran que se les ha pedido celeridad.

Ambas partes, sin embargo, aceptan que hay la voluntad de poder llegar a una lista de consenso y evitar abrirse en canal en un momento clave para la formación republicana. La plataforma 1 de octubre, crítica desde un inicio con la gestión del tándem formada por Junqueras y Rovira y ahora con las decisiones de la dirección interina, también aspira a presentar una lista.

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