Illa apela a los valores socialdemócratas y de “humanismo cristiano” del nuevo Govern

El nuevo Govern de Cataluña, presidido por Salvador Illa, ha tomado este lunes por la mañana posesión de su cargo en un acto celebrado en el Palau de la Generalitat. Ante la presencia del presidente del Parlament, Josep Rull, y de miembros del Ejecutivo saliente, los 16 consejeros han prometido el cargo. Tras el acto formal, Illa ha pronunciado un breve discurso en el que ha destacado que su gabinete es “transversal” y mantiene el equilibrio territorial y ha sostenido que los nuevos consejeros tienen como denominador común “la competencia probada con trayectorias acreditadas, independencia de criterio, valores socialdemócratas y humanismo cristiano”.

En su breve intervención, Illa ha subrayado la vocación de servicio público y que la piedra angular y el hilo conductor de su Govern será ejecutar la tercera transformación de Cataluña en un “espacio compartido de una España plurinacional y una Europa de horizonte federal”. Illa ha vuelto a agradecer el acuerdo firmado con ERC y los comunes y ha defendido que la creación del Departamento de Política Lingüística no es un ataque contra nadie. “Es en defensa de la lengua, que es la columna vertebral de nuestra nación”.

Illa juró el sábado el cargo, pero los 16 consejeros, encabezados por Albert Dalmau (Presidencia) y Alícia Romero (Economía y Finanzas) lo han prometido tras responder a esta pregunta que les ha formulado Illa. “¿Prometéis cumplir fielmente de acuerdo con la ley las obligaciones del cargo que asumís al servicio de Cataluña y con lealtad al presidente de Cataluña?”. Tras el acto, y a diferencia del Govern de Pere Aragonès, el nuevo Ejecutivo no ha salido a la plaza de Sant Jaume a hacerse la foto de familia. Poco después, tres consejeros han hecho en el Palau el traspaso de carteras: Dalmau y Bernardo Álvarez (Deportes) con Laura Vilagrà y Romero con Natàlia Mas.

El Diario Oficial de la Generalitat de este lunes ya publica también el nuevo organigrama del Govern. Hay dos nuevas consejerías: Deportes y Política Lingüística. Y algunos cambios de denominaciones que denotan una carga política. El Departamento de Interior pasa a denominarse “Interior y Seguridad”. El de Igualdad y Feminismos será a partir de ahora “Igualdad y Feminismo”, sin la “s”. Economía y Hacienda pasa a denominarse “Economía y Finanzas”. El Departamento de Justicia, Derechos y Memoria pasa a ser el de Justicia y Calidad Democrática”. Derechos Sociales añade la referencia de “Inclusión” a su denominación. Y el Departamento de Educación pasa a llamarse “Educación y Formación Profesional”. Illa también ha querido recoger el guante de las demandas del sector primario, que pedía un departamento específico. De aquí que el actual departamento de Acción Climática, Alimentación y Agenda Rural pase a denominarse “Agricultura, Ganadería, Pesca y Alimentación”.

El nuevo organigrama publicado por DOGC afianza la figura de Dalmau como conseller de Presidencia, al asumir entre sus funciones “la transformación de los servicios públicos y la administración digital” y, sobre todo, “la gestión de los gastos de personal”, una partida que hasta ahora recaía en el Departamento de Economía. No es un cambio trivial. Ese capítulo supone el 30% del presupuesto de la Generalitat y se ha incrementado considerablemente en los últimos años para asumir el incremento de plantillas de Educación y Sanidad.

Otro de los grandes cambios se encuentra en la nueva superconselleria de Territorio, que asume parte de las materias del hasta ahora Departamento de Acción Climática. Asume así las materias de agua (y la sequía), residuos, servicios meteorológicos, energía y medio natural. Se asume así la demanda del ámbito de la agricultura de tener un departamento centrado en su actividad, evitando el choque directo con las materias de transición ecológica. Ahora ese choque se producirá dentro de la misma conselleria con la promoción e impulso de nuevas infraestructuras.

La creación del Departamento de Política Lingüística se llena del siguiente contenido, según el último número del DOGC: “Desarrollo de políticas para fomentar los usos de la lengua catalana en todos los ámbitos de la sociedad y la disponibilidad de productos y servicios en catalán” y “garantizar el uso del catalán en las instituciones”. Hasta ahora el decreto que determina las funciones de cada departamento apenas hablaba de “la promoción y el fomento de la lengua catalana”, que el nuevo Govern también ha asumido.

Por otra parte, el Sindicato Autónomo de Policía (SAP - FEPOL) y el Sindicato de Mossos d’Esquadra (SME-FEPOL), como organizaciones mayoritarias de los Mossos d’Esquadra, han calificado este lunes de “absolutamente desafortunada”, las palabras del Departament de Interior el pasado jueves sobre la fuga de Carles Puigdemont: “No asumieron responsabilidades, todo se derivó a terceras personas, se habló de investigaciones y detenciones, una forma de echar balones fuera. La ciudadanía y los miembros de los cuerpos de seguridad merecen que se reconozca esa responsabilidad, porque reconocer el fallo implica analizarlo y rectificar para que no vuelva a suceder, y en eso radica la profesionalidad del cuerpo”, ha criticado Pere García, secretario general de SAP - FEPOL, en representación de ambos sindicatos, informa Amparo Pérez.

Con respecto a la llegada de Núria Parlón a Interior y Seguridad, los sindicatos piden “no ser considerados como un enemigo, sino como una herramienta para conocer las necesidades de los cuerpos de seguridad”. Ante la posible llegada de cambios en Interior, insisten, “no pueden ser considerados como una caza de brujas, el nuevo Govern hará cambios en el Departamento igual que los hace en la calle, los entendemos, pero en ningún momento entenderíamos que fueran políticos, ya que los Mossos no debemos tener una orientación política”, han explicado haciendo referencia a las posibles modificaciones en la estructura del cuerpo que podrá llevar a cabo la nueva consejera socialista, junto a Josep María Trapero en la primera línea del Departament.

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