Carlos Bardem, Buenafuente y Évole firman el manifiesto ‘Protestar no es terrorismo’ tras el caso del Tsunami Democràtic
Personalidades del mundo del arte, periodistas, sindicatos y más de 200 organizaciones denuncian la “criminalización” de los movimientos sociales
El repicar de las campanas de la Catedral de Barcelona rebota contra la piedra de los edificios que cierran la plaza del Rei, en el barrio gótico. Colocados en forma de triángulo inverso, los periodistas Andreu Buenafuente y Jordi Évole, el actor Carlos Bardem, los músicos Joan Dausà, Santi Balmes, Nacho Vegas y Fermín Muguruza junto a otras personalidades y representantes sindicales han defendido este lunes el manifiesto “Protestar no es terrorismo”, como crítica de las investigaciones de la Audiencia Nacional contra Tsunami Democràtic.
La campaña denuncia la asociación de los movimientos sociales de protesta al terrorismo y reivindica la manifestación y la movilización como derechos ilimitables que deben ser protegidos en un país democrático. El manifiesto cuenta con el respaldado por más de 150 entidades―entre las que destacan las organizaciones Òmnium y la Asamblea Nacional Catalana―y figuras de la cultura y el periodismo como Mònica Terribas, Gemma García y Jordi Basté catalán, además de ciudadanos que lo firman a título individual.
“En los últimos años se ha visto cómo la justicia ha criminalizado la protesta, creando repercusiones para quienes ejercían el derecho de reunión y vulnerando la libertad de expresión”, ha comenzado la periodista Ana Polo, primera encargada de la lectura del manifiesto. El texto se entiende en clave de la investigación de la Audiencia Nacional contra la organización del Tsunami Democràtic y señala que el proceso solo tiene como objetivo “criminalizar la protesta, limitar los derechos fundamentales y silenciar la disidencia política”.
Esta iniciativa afirman que tanto los movimientos políticos, como los procesos de la Audiencia Nacional y el Tribunal Supremo para investigar por terrorismo el Tsunami Democràtic no son más que una “herramienta para desgastar al Gobierno central y la actividad parlamentaria”, ahora inmersa en la recta final de las negociaciones de la Ley de Amnistía. Los firmantes subrayan que la investigación encabezada por el juez García-Castellón es una “injerencia” del poder judicial en el legislativo y han exigido que se tomen las medidas necesarias para que la justicia “no sea una herramienta de persecución política” y que se retiren las imputaciones de terrorismo a los involucrados en las protestas en contra de la sentencia del Procés.
El mismo día se ha conocido que tres juzgados de instrucción catalanes―el 4 de Figueres, el 1 de L’Hospitalet y el 5 de El Prat de Llobregat― investigaron entre 2020 y 2023 los mismos hechos del Tsunami Democàtric, y suspendieron la investigación por falta de por falta de autor conocido. Los activistas David Fernàndez y August Gil Matamala, el cantautor Lluís Llach, las periodistas Andrea Gumes y Anna Pacheco, el escritor Quim Monzó y el actor Carlos Cuevas y la directora Elena Martín, entre otros.
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