La Generalitat confina la prisión Brians 2 tras un brote de coronavirus con un centenar de positivos

La Generalitat de Cataluña ha confinado la cárcel de Brians 2 (Sant Esteve de Sesrovires), en la provincia de Barcelona, a partir de este lunes para evitar una expansión de un brote de coronavirus detectado en la prisión que afecta a al menos 98 personas, 91 reclusos y 7 funcionarios. El confinamiento comporta que se limiten “al máximo” las entradas y salidas de presos y que se suspendan los traslados de internos que tengan como origen o final Brians 2.

El Departamento de Justicia concreta que los módulos 3 y 13 están aislados tras descubrir 72 positivos, lo que obliga a los internos de estos espacios a permanecer en sus celdas. Los positivos solo pueden salir de manera individual hasta la cabina del pasillo del módulo para realizar una videollamada y comen dentro de la celda. Los negativos tienen permitido bajar a hacer compras en el economato “el tiempo indispensable”, pero sin mezclarse con otros internos. Estos negativos podrán vovler a hacer vida normal el miércoles, siempre que no den positivo en las pruebas realizadas este lunes.

Otros siete módulos están confinados, por lo que los afectados no pueden salir de él para ir a los espacios comunitarios como el polideportivo o el taller, aunque sí salir al patio. Las comunicaciones con el exterior (visitas y vis-a-vis) también quedan suspendidas. Justicia confirma que otros 16 infectados están en la unidad sanitaria del centro con sintomatología covid.

El brote se originó “probablemente” en la lavandería del centro y los primeros positivos se detectaron el pasado 29 de octubre, según una portavoz de Justicia, pero un comunicado interno de Brians al que ha tenido acceso EL PAÍS, asegura que los primeros contagios se dieron el 27 de octubre.

El sindicato UGT ha reprochado que “los responsables penitenciarios no se hayan adelantado tomando medidas preventivas” de contagios en las prisiones. En un comunicado, el sindicato achaca el confinamiento de la cárcel a “las erráticas decisiones que el Departamento de Justicia está tomando para garantizar la seguridad de los centros penitenciarios”. El sindicato también considera que Justicia “mantiene a los profesionales penitenciarios en el abandono más absoluto”, critica que se ha reducido la plantilla de funcionarios de prisiones.

Francesc López, Coordinador de Cataluña de la asociación Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (Acaip), sindicato mayoritario del sector, también entiende que ha faltado “agilidad”. “En Cataluña cuesta tomar grandes medidas, y lo que acaba pasando es que los brotes se extienden”, lamenta. “Quizás se debieron cortar los vis-a-vis cuando se detectaron los primeros casos en todos los módulos ante de que todo explotara”. López propone que los visitantes muestren una prueba PCR negativa, tal como se hizo en su día en las residencias de ancianos, y pide que Justica proporcione mascarillas FPP2 hasta el fin de la pandemia, “y no únicamente cuando se detecten brotes”.

El portavoz del sindicato, además, avisa que el próximo fin de semana se celebran unas oposiciones del sector penitenciario en el que están convocados trabajadores de Brians 2, que pueden ser positivos sin saberlo y, por tanto, infectar al resto de aspirantes. “Pedimos al Departamento que posponga los exámenes o que nos trasladen qué medidas de seguridad tomarán”, reclama.

Brians 2 es un centro con una población reclusa de unos 1.300 internos y esta semana la Generalitat tiene previsto hacer más cribajes para determinar la profundidad del brote y conocer si otros internos son positivos.

La cobertura vacunal de los internos de Cataluña es del 82%, según datos de Justicia, un porcentaje similar al de los mayores de 12 años en la comunidad (83,5%). A partir del lunes 15, Salud realizará las vacunaciones de refuerzo a aquellos reclusos que se protegieron con la vacuna monodosis de Janssen.